BALAS PERDIDAS #BBPP1

CAPÍTULO 16

JULIO 2019

MANUEL

Escucho como viene Lisell hacia mi, pero cuando veo que no es ella la que está tras la puerta, me quedo exhausto.

Isabella - Hola. ¿Manuel? ¿Qué haces aquí?

Manuel - Eh, hola. Isabella, yo le traigo esto a Lisell.

En serio, no he hablado más nervioso en mi vida. Y eso que solo le estoy dando un par de boletos para el cine.

Isabella - Ah, ya se lo entrego. ¿Algo más?

Manuel - Eh.., no, adiós. Que les vaya bien.

Isabella - Ah. Sí, claro, chao.

Tres doritos después... Es decir, tres minutos después.

Lisell - ¡Hola Manuel! ¿Qué pasó?

Martin - ¡Ay, güevón! ¡Soy un imbécil! ¿Por qué debo comportarme tan idiota cuando estoy en frente de ella...? ¡En fin! ¡Qué tonto! Lisell, quien te invitó al cine soy yo, así que te voy a pasar a buscar en tres días.

Lisell - Okey Manuel, entonces ya nos veremos.

Manuel - Perfecto, adiós.

Lisell - Adiós.

Llego a casa, saludo a Laura pero no me responde. Ella solamente sale por la puerta y se va para la calle. Y por más que le pregunte que le sucede, sin explicaciones esto se vuelve rutina. Menos hoy, salgo tras ella cansado de las excusas que me pone mi cabeza. Me subo en el carro y conduzco siguiendo el suyo, hasta un... ¿Hotel? La sigo hasta la entrada, hace como si no estuviera aquí. ¡Auch! ¡Mierda! ¿Isabella? ¿Qué hace aquí?

Isabella - ¡Será soplado! ¡Ya no jalo más! Dios, perdón, lo siento...

Manuel - ¿Isabella?

Isabella - ¿Manuel? Que rara coincidencia. Lo siento por el golpe. ¿Te hice daño?

Manuel - Nah, estoy bien. ¿Qué haces por aquí?

Isabella - ¡Cierto! Tengo que entrar, busco a alguien.

Manuel - Yo también, ¿vamos juntos?

Isabella - Gracias pero no, debo ir sola, adiós.

Salió corriendo a la recepción del hotel, dijo algo que no llegué a escuchar y tal como había entrado, subió por las escaleras como un cohete. Yo perdí de vista a Laura, así que seguí a Isabella por si me la cruzaba en el camino.

Isabella - ¿Me estás siguiendo?

Manuel - Ya te he dicho que venía a buscar a alguien.

Isabella - Y yo, pero, ¿a qué habitación?

Manuel por favor, piensa rápido una, que no te pillen.

Manuel - La 204, esta de aquí al lado.

Isabella - Imposible, ahí es donde tengo que entrar yo.

Manuel - ¿Se puede saber el por qué?

Isabella - Es la habitación de mi novio. ¿Ves?

Tenía la llave en la mano, qué puntería tienes Manuel.

Manuel - Me habré equivocado de habitación, entonces...

Isabella - Espera, quédate.

Mi memoria solo quiere borrar lo que procesó los siguientes ciento veinte segundos.

Manuel - ¡Isabella! ¡Isabella! ¡ESPERA! Yo estoy contigo, respira...

Tenía lágrimas en sus ojos, demasiadas. La acompañé hasta la puerta, busqué mi carro y nos fuimos pa' su apartamento. Durante el camino solo lloramos, dejamos salir lo que teníamos dentro. Paro en un desvío y gritamos de todo, pateamos piedras, intentamos consolarnos mutuamente. Al llegar a su apartamento, ella me pidió le deje sola, y aunque me doliera, eso hice. Solo quería volar de regreso a Ecuador.