Le sería imposible a alguien como yo conquistar a alguien como Tzuyu¿No creen?
Todo era demasiado difícil, ella estaba rodeada de Bombones, Bombones que querían su cuerpo, que querían sus caricias, que querian su querer, su mismísimo amor.
¡Pero nad...
Minatzosaki Sana, Minatzosaki Sana, Minatzosaki Sana... Dulce es el mejor adjetivo que existe para poder describir a Sana. Ella era como una cucharada de miel, como una galleta con chispitas de chocolate, como un cupcake con adornos de arcoíris, como una inyección intravenosa de glaseado rosa. Era tierna, amable, cariñosa... Sana era demasiado buena para ser real, de hecho, no la conozco enojada, y la he visto triste muy pocas veces. Al pelearnos recuerdo que siempre ella nos hacía disculparnos, o nos ayudaba a arreglar las cosas. Repito. Demasiado buena para ser real.
Era difícil ver a Sana de otra forma que no fuera feliz, neutra, o seria.
Por suerte un día, tuve la suerte de presenciar a lo que me estaba enfrentando. Sana y Jihyo, una vez, tuvieron un encuentro en casa de Mina. Estábamos ahí festejando el cumpleaños de la difunta, bebimos mucho y terminaron haciéndolo en el auto de Tzuyu; según Jihyo no lo recordaba pero Sana decía atesorarlo preciadamente en su mente. Sana parecía atender bien al prójimo, siendo una bestia salvaje hacia el mismo.(Yo no soy eso, no soy una bestia)
Recuerdo que a partir de ese día, Sana, comenzó a aprovechar cada situación que se presentaba para toquetear a Jihyo, ya sea cuando los tomaban una foto, o en una fila. Era rapida, ágil... En fin, volviendo a Tzuyu. Sana se había vuelto muy intensa con ella, sentía como la deseaba, a la forma de Sana Por supuesto.
Si soy sincera no quería asesinar a Sana, pero bueno... Sí, lo hice.
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Busqué la forma por la cual sufriría menos, pero luego de pensar mucho decidí tan solo envenenarla. Estuve durante 5 días haciendo cupcakes sin parar hasta que logr3e hacer unos deliciosos. En ese momento me sentí preparada. Recuerdo haberle puesto el veneno a la masa y luego haberla tirado.
No podía asesinar a Sana... Jihyo se daría cuenta. Ella me había visto cocinar, y probablemente me vería dárselos. Tenía que buscar otra cosa...
Igualmente, imagina que Sana comenzaba a provocarme cada vez más. Yo pensaba que, al haber asesinado a Mina, y alejado a Jihyo podría estar en paz con Mi Tzuyu... Pero no.
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