"El Contrato" ||GoldFred||

°21° Malas Noticias

Un sereno y tranquilo castaño estaba limpiando un amplio mostrador con una franela semi húmeda. En tan pocos días había conseguido trabajo en una paletería. Y aunque la paga no era mucha, le bastaba con poder ayudar. Además acababa de salir del hospital hace poco luego de una cirugía, así que era como un milagro.

Feliz tarareaba una canción mientras terminaba de acomodar los vasos y cucharas en sus respectivas cajitas.
Estaba feliz, muy feliz. Ya mañana era víspera de navidad y estaba emocionado por poder volver a pasarla afuera del hospital, junto a Fred y poder celebrar de verdad.

Estaba pensando en que podía regalarle a su hermano, tenía tanto tiempo que no le daba algo... 6 años... 6 años encerrado en un insípido y aburrido hospital. Sin nadie. Nadie más que su hermano que estuvo junto a él hasta el último momento.
Una amplia sonrisa se mostró en todo su rostro. Si, definitamente tenía que darle un obsequio. Pero... ¿Qué?

En eso se le vino a la mente una persona. Recordó a aquél rubio con el que había platicado el día que salió del hospital. Y... A decir verdad, se habían llevado muy bien. Antes de irse intercambiaron números. En realidad quería preguntarle a su hermano sobre Fred, pues, hasta este momento, solo lo había visto interactuar con él. Quizás él sabía que podría gustarle a Fred.
Pero no tenía su número, así que usó eso como excusa para comenzar, por primera vez, una conversación con aquel agradable rubio.

~°~

El azabache se encontraba tirado en su cama mirando el techo, ya habían pasado 2 días desde que el albino lo había dejado plantado en aquella fría banca. No estaba molesto, al contrario, estaba preocupado de que algo le hubiera pasado. En todo ese tiempo no le había mandado ningún mensaje, no sabía nada de él... No, mentira, si estaba enojado, muy enojado. ¡¿Cómo osaba dejar a su perfecto ser plantado bajo 20 kilos de nieve?! Enojado-Preocupado. Más bien FuriosoVenQueTeRompoLaCara-Preocupado.

Soltó un suspiro... ¿Y si lo va a visitar? No, no, no. Era un opción... ¿Cómo Fred o como su "novia"? ¡QUE NO!
Negó varias veces con su cabeza, negándose a ir a rogarle después de que ÉL lo dejó  como un perro bajo el frío. Tenía poquita dignidad (la única que le quedaba). Tomó su celular y se metió a su chat por enésima vez en el día... Miró aquel último mensaje que le había mandado esa noche.

¿Acaso lo había hecho sentir mal? ¿Hirió sus sentimientos porque le dijo no cumpleañero pero en realidad si era su cumpleaños? ¿Cuándo era el cumpleaños de Gold? ¿Por qué nunca le preguntó? ¿Quién soy?
Agh ya, muchas preguntas.

Después de aquel loco debate consigo mismo y la duda existencial de quién era lo incitó a levantarse de su cama. Se colocó una bufanda y unos guantes y salió de su departamento. Tomar un poco de aire lo haría sentirse menos agobiado.

~°~

Un pequeño toque en la puerta llama la atención de un albino que se encontraba en su habitación haciendo gráfica de ventas. Sabía quién era así que le dejó entrar.
Su hermano entró en total silencio para dejar más papeles en la mesita de noche. Lo miró unos segundos, y decidió hablar...

–Oye... Si tienes algún problema, sabes que yo siempre estoy aquí... –Gold sin mirarle todavía le hizo un ademán para indicarle que saliera de su habitación. Golden soltó un leve suspiro y cerró la puerta detrás de sí.

Se quedó en el pasillo pensando... Su hermano jamás le contaba nada, nunca hablaban de como se sentían o que pensaban o cuáles eran sus sueños. Eran como completos desconocidos, no sabían nada de ellos más allá de sus nombres. ¿De verdad eran familia? No siempre fue así... El podía recordar aquella linda época, cuando eran niños... Cuando eran hermanos... Pero todo cambió... Cambió desde que su madre los dejó...