❄️Capítulo 21❄️

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Camus caminó mordiéndose los labios con temor de lo que fuera a pasar después. Creía que había hecho mal, pero por otro lado lo veía algo que fuera beneficioso para su hijo.

Antes de retirarse del templo de escorpio, escuchó que Milo gritó, no supo si lo hizo de rabia, arrepentimiento o simplemente por la presión de ese momento.

Llegó al templo de Capricornio, viendo que Shura y Kert estaban recostados sobre la cama con los cabellos amarrados con ligas. Oyó sus risas, era confortante escucharlos reír en un momento así. Se apoyó al marco de la puerta, de brazos cruzados y estuvo así durante varios segundos hasta que ambos se percataron de su presencia.

-Mamá!

-Hola, mi niña..-dijo con evidente sarcasmo.

-No soy una niña, papá me puso esto porque quiso aprender a hacer colitas. Dice que quiere darme una hermanita.

Camus se ahogó con su propia saliva y se puso rojo del todo, realmente era algo para decir..no,no..bueno sí.

-Yo no dije eso Kert, no mientas.- lo empujó por el hombro hasta voltear la mitad de su cuerpo fuera de la cama.

-¿Pero que tiene de malo?-sonrió.-Yo..no lo sé, solo quiero tener a un hermanito o hermanita a quien cuidar.

-Vamos a adoptar a uno..

-¿Eh..?.-sus labios estaban a punto de formar una sonrisa.

-Que sea invisible y que sólo exista en nuestra imaginación.-dijo Shura para molestarlo.

Kert estiró sus labios en un movimiento bastante divertido.

Llegada la mañana siguiente, Shura durmió en el sofá, Camus en el suelo y Kert en la cama, lamentablemente el juego de piedra,papel o tijera aveces no era una forma tan civilizada de resolver una pelea sobre dónde dormir.
Y todo por querer quedarse en el templo de Capricornio, realmente, Kert nunca subió al templo de acuario, pero tenía curiosidad.

Desayunaron, el pelinegro traía el cuello adolorido y Camus sentía incomodidad en la espalda.

-Tuve un sueño excelente.-Se estiró el pelirrojo con gran satisfacción.

-¿Que soñaste?.-preguntó Camus

-hum..nada en especial.-mintió inflando sus cachetes y soltando el aire en un cómico movimiento.

-Está bien.-asintió a la vez que se sentó a su lado.- Oye kert, el tema que hablamos ayer, fue duro..para todos.-apretó los labios.-.. pero quiero hacerte una pregunta.

El pelirrojo se inclinó sobre la silla y suspiró dando un asentimiento leve con la cabeza.

-¿Quieres entrenar para ser un caballero?

-..A qué quieres llegar mamá..? Sabes que yo..

-Solo responde, te gustaría ser un caballero?

-Porqué..? Bueno, no podría, mi maestro sabes bien que sería..

-Es por eso que te lo pregunto, ayer, estuve hablando con él, y le hablé con respecto a tí. Lo hago parecer natural pero..fue algo difícil decirle que debía de entrenarte. Tienes la capacidad de ser su sucesor..

-¡él no me quiso! No quiero serlo.

-Y tú Shura, no dirás nada?.-lo miró con seriedad.

-¿Qué podría decir? Es claro que es tu decisión..y la de él, pues..

-Shura, eres su padre, dile algo.- recalcó entrecerrando sus ojos.

Shura soltó un suspiro como liberándose de un gran peso, se levantó y se puso en frente de kert.

Madre a los 16Donde viven las historias. Descúbrelo ahora