Llegando a la meta

Capítulo 10

(Janis)

La mañana había pasado volando, mientras le contaba a Mick lo que había sucedido ayer entre Keith y yo a través de mensajitos en una hoja de papel. Mick pensaba que me estaba empezando a volver loca y no le pude desmentir porque hasta yo misma lo pensaba.

-¿Hoy también tienes que ir al entrenamiento? –me pregunto cuando acabo la clase.

Yo estaba embobada mirando la muñequera. Como llevaba la mitad de la mañana.

-No me digas que en verdad eras una fan reprimida del atletismo. Una apasionada del atletismo –dijo incrédulo cuando fui a asentir con la cabeza.

Se me escapo una sonrisa cómplice a la que Mick puso los ojos en blanco por unos segundos.

-Cada vez se está volviendo más y más interesante cada vez que voy –dije levantando la muñequera mientras sonreía.

Mick me la quito de pronto de la mano, al ver que me quedaba mirándola embobada.

-Devuélvemela –dije quitándosela de vuelta. Me puse en pie- me tengo que ir.

Me colgué la mochila a la espalda y salí de la clase ignorando las voces de Mick mientras me llamaban.

******

Estaba entrenando con todo el equipo. Nos habían puesto por parejas y, casualmente, me pusieron con el piernas cortas de David.

En uno de los estiramientos David me dio en el tobillo, con todas sus fuerzas, el muy imbécil.

-Lo estás haciendo a propósito –dije poniéndome en pie, encarando al enano.

-¿Quién te dio derecho a usar la muñequera del manager? –pregunto acusándome.

-¿Puedes cogerla, piernas cortas? –pregunte alzando la mano todo lo que pude.

-Puta –me llamo dando un salto, sin llegar a cogerla.

Su insulto no paso por alto y Emmet y Keith se acercaron.

-¿Qué pasa? –pregunto Keith cuando llego a nuestro lado.

-Es ella –me señalo David- No está bien.

-Para empezar deberías mantener un perfil bajo cuando estás haciendo bullying por ser la novata y porque no te cae en gracia.

-Emmet –le llamo Keith.

-¿Qué diablos estáis haciendo? –pregunto Emmet a todos, ignorando a Keith- No falta mucho para la competición. Y vosotros os estáis dedicando a bullying a la novata. ¿Aun queréis competir?

-Por eso digo que es innecesario entrenar a la novata.

-Hey –llamo su atención Keith.

-Tengo una cosa que decir, manager. Solo quedan unos pocos días antes de la competencia. No creo que nos convenga, como grupo, gastar nuestro tiempo entrenarla cuando se toma los entrenamientos a risa. Es desperdiciar nuestro tiempo. No es como si estuviéramos rodando una película.

-¿Alguien ha dicho que no nos tomemos vuestro entrenamiento enserio? –pregunto Keith muy serio.

Mientras discutían entre ellos vi como apareció Mick, acercándose a nosotros.

-De todo este tiempo que te conozco, Janis. Nunca he visto que sufras de bullying. Esto es tan raro, es casi mágico.

-Mick... -dije como advertencia para que frenara.

-Manager, capitán, quiero estar en el equipo -declaro dejándonos a todos con la sorpresa en el cuerpo.

-¿En el equipo? –pregunte atónita.

Ya que Mick es más lento corriendo que una tortuga en skate.

-Por supuesto. Para protegerte.

-Bienvenido. Bienvenido –dijo de forma eufórica Emmet por haber conseguido otro integrante- Nina llévatelo para hacerle la ficha y darle el uniforme de atletismo y que se cambie.

Antes de que se fuera con Nina le empuje hacia un lado.

-¿Por qué te has unido si odias los deportes?

-Para apoyarte.

-¿A mí?

-Sabes que siempre estaremos juntos.

-Para eso también podrías ponerte mini falda y coger unos pompones y animarme desde las gradas.

-Déjate de bromas –dijo riendo antes de irse al lado de Nina.

-Aunque Janis ya tiene una forma atlética y siempre va con él, puedo ver como a él le falta fuerza física –comento Nina con Keith.

-Por supuesto. Tenemos diferentes padres –dijo Mick.

-Pues en vez de ser del equipo serás el próximo manager –le anuncio Nina.

-Me parece bien también –contesto Mick, más que contento de no tener que correr.

******

-Esto es para ti –dijo Keith pasándome una bolsa.

Nos encontrábamos en los bancos de fuera de la facultad.

-¿Has cocinado para mí? –pregunte más emocionada de lo que quería, al ver los tapers dentro

-Yo no, mi hermana.

Gracias a la investigación de Mick habia descubierto que Nina es la hermana de Keith.

-Me entere hace poco que fuiste castigada hace poco por ayudar a mi hermana.

Nina era la chica que había recibido una colleja y que Mick se metió en medio, en donde yo acabe por pelearme con el tío.

-Te quería decir gracias por todo...

-Solo quería tener una pelea –le aclare terminando con la emoción, estaba decepcionada- no tienes que darme las gracias.

-Soy su hermano mayor, tengo que ser responsable. Así que gracias. Gracias por ayudarla, de verdad.

-Si quieres darme las gracias, enséñame tu salto –dije dando un mini salto.

-No –dijo sonriendo.

-Lo sabía –dije volviendo a sentarme- toma la comida de regreso, no la quiero.

-Este es el esfuerzo de mi hermana –dijo sacando el taper dejándolo delante de los dos- Ella especialmente me pidió traerte esto. Así que me quedare hasta que vea como te lo comes.

A regañadientes cogí el taper. Keith saco el móvil y me empezó a grabar.

-¿Qué haces?

-Ella también me pidió grabar el proceso de ti comiendo su comida.

-¿Qué?

-Venga, no tardes. Que me canso –dijo protestando.

-¿Tu... estas seguro que esto es lo que tu hermana quiere hacer para regresarme el favor? –Pregunte atónita- ¿No sera que quiere matarme con veneno, verdad?

-Abre la boca -quitándome el tenedor de la mano para darme, él mismo de comer.

Abrí la boca y Keith me alimento como si fuera una niña chica.

-Rápido come.

Durante un rato estuvo alimentándome. La comida sabía a rallos. Ahora realmente creía que Nina quería envenenarme. Pero estar en esta situación con Keith parecía valer la pena.

Mientras él me daba de comer al tiempo que me grababa yo no podía parar de mirarle a los ojos, me sentía como una verdadera imbécil pero no lo podía evitar.