— Sasuke, ¿Tienes pensado qué hacer luego de tu viaje de redención? —le cuestiona con las manos entrelazadas sobre la mesa el Sexto.
— Ahora sí lo tengo claro. —le responde firmemente.
— ¿Ese plan incluye a alguien más? —pregunta con una sonrisa bajo su máscara.
— Sí. —sonríe de lado, evitando que vea este gesto su antiguo profesor.
— Que bueno que al fin te diste cuenta. —se relaja en su asiento aún con una sonrisa—. Aunque conociéndote, imagino que aún no le has dicho nada a ella, ¿verdad?
— Sé que me acompañará. —responde tranquilamente.
— Ay Sasuke. —suspira cansado—. Debes decirle, nunca sabes si te sorprenda su decisión. —lo mira fijamente.
— Hmp.
— Además estamos hablando de mi estudiante favorita, así que espero que la trates como se merece. —agrega muy serio y con un tono protector—. Yo no tendría problemas en quedarme a su lado, cuidando a una mujer tan bella. —sonríe mientras el Uchiha lo observa de forma asesina.
— No necesita que alguien la proteja. —activa su Sharingan por un segundo, antes de percatarse y desactivarlo.
— Recuerda que soy el hokage, así que no me amenaces en la oficina, podrían considerarte un traidor. —responde burlándose, coloca su mano sobre su hombro al levantarse—. Pero es en serio, si la tratas mal seré yo mismo quien me enfrente a ti, no importa todo el cariño que te tenga como tu antiguo maestro.
— Tsk. –mira hacia otro lado.
— Bien. —habla calmado—. Te mandé a llamar porque necesito entregarte dos informaciones. —se sienta en su escritorio y abre un pergamino—. Se ha visto movimiento de un grupo de ninjas de la aldea de la hierba, son unos renegados que al parecer quieren atacar a los señores feudales por haber sido descuidados con las aldeas que no son principales. No es algo muy grande, pero creo que tú podrías solucionar ese problema mucho más rápido que si envío a un equipo por este asunto. —se rasca la cabeza—. También indagué sobre tus investigaciones durante tu viaje, y junto a Shikamaru hemos recolectado información de que aún hay algunas cuevas subterráneas debido al gran árbol en la cuarta guerra, así que esto sí necesitaré que lo averigües personalmente. —lo mira directamente—. Como puedes ver en el mapa las locaciones son bastante alejadas, de modo que estarías nuevamente fuera por algún tiempo. —su antiguo estudiante solamente lo mira serio en respuesta—. Por eso creo que lo mejor es que hables con ella, nadie más puede decidir si quiere acompañarte o quedarse.
Sasuke piensa profundamente las palabras del peligris, tenía razón. Volver a emprender un viaje con un tiempo indeterminado y claramente peligroso al relacionarse a Kaguya, no le emociona para compartir con Sakura, no quiere exponerla a ese peligro. También sabe lo fuerte que es, y que sería un gran apoyo en la misión. Al mismo tiempo desea estar junto a ella, poder compartir lugares que pudo conocer en su viaje de redención. Por mucho que le genera conflicto pensar que puede rechazar su invitación, tiene que preguntarle. Él no puede decidir por la ninja médico que tiene toda su vida hecha en su tierra natal. Suspira.
— ¿Cuándo debo partir?
— Lo más pronto posible, a más tardar en tres días.
—Está bien. —su semblante se mantiene inmutable—. Se lo preguntaré hoy.
— Creo que mejor le preguntas eso mañana. —añade acercándose a una caja y entregándosela al confundido pelinegro—. Hoy es un día importante para ella, así que déjala disfrutar de su noche
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La luz de la primavera
FanfictionEl frío invierno se derrite ante la inminente primavera, una época de sonrisas y nuevos inicios. Todo comienza con una misión que tiene como objetivo resguardar a una pelirrosa. Un viaje en el que se expresa el amor de un inexperto en el romance co...