La luz de la primavera

Capítulo 24

Cuando Sasuke pensó en las posibles reacciones de la pelirrosa ante la verdad sobre Itachi, creyó que podría recibir rechazo de su parte, incluso repulsión ante su pasado tan crudo. No es lo mismo conocer la versión de la masacre del clan Uchiha que todos en Konoha conocían, como ver directamente la historia y escenas absolutamente violentas y frías de sus recuerdos.

Lloró frente a sus compañeros de Taka al conocer la verdad de su hermano mayor, pero con nadie había sido completamente transparente ante el dolor y amor que tuvo por su familia, exponer su vulnerabilidad y sobretodo llorar junto a alguien más. Con Naruto podía sentirse comprendido en el sentimiento de soledad, e incluso en su enfrentamiento fue capaz de profundizar en aquello y la esperanza del compañerismo, sin embargo tampoco expuso lo más íntimo de su corazón. Sakura es la primera persona con quien comparte aquello, se siente aliviado de haberlo hecho, ya que nuevamente puede conectar sus sentimientos con alguien más, sin anteponer ninguna barrera o secreto. Se siente libre, comprendido y amado, aunque al mismo tiempo siente temor a perder este lazo tan íntimo.

Sus anhelos de compartir con ella, verla a su lado, poder interactuar juntos de esta forma natural y sin miedo de expresar su amor, son cada vez mayores, ya no es capaz de ocultarlos como antes. Está decidido y confiado de que recibirá una respuesta positiva de su parte si se lo propone nuevamente. Al cumplirse los siete días, como le había prometido, le ayudará a recobrar los recuerdos si aún no volvían de forma natural a ella. No esperará más tiempo para entrelazar sus vidas, Sakura es definitivamente la única mujer con la que desea casarse y formar una familia.

Al regresar a la casa enviaron la nota prometida a la aldea para notificar que la ojiverde se encontraba bien, anexando sus agradecimientos personales y saludos a sus padres, puesto que no volverá prontamente allí ante la misión de investigación que aún tienen por delante. El azabache fue el último en escribir el mensaje, añadiendo el reporte correspondiente a la misión previa que Naruto y Hinata desconocían, e indicó que se comunicaría con el Sexto solo cuando tuviese novedades, ya no seguirá con la irritante frecuencia de notificar su ubicación ahora que está segura la identidad de la ninja médico. Luego de cenar y que la Haruno se quedara dormida, con cuidado se apartó de su lado y salió en búsqueda de la anciana, pues necesita ayuda para efectuar su plan, por lo que tendría que pedírsela a ella.

— Creí que ya estaban dormidos Sasuke-san. —dice Saki al verlo acercarse al salón donde se encontraba terminando de arreglar la ropa dañada de la pareja.

— Necesito que me ayudes con algo. —explica de forma directa, evitando mostrar su vergüenza ante aquello, pues no está acostumbrado a esto.

— ¿Ya han aclarado los asuntos pendientes? —pregunta con una sonrisa, y él asiente como respuesta—. ¿Ha recordado tu propuesta? —añade con clara curiosidad en sus palabras.

— Aún no, si en seis días no lo recuerda, se lo diré nuevamente.

— Parece que ya no tienes dudas de su respuesta y por eso buscas mi ayuda.

— Estoy seguro que aceptará. —respondió de forma tranquila y con plena confianza de ello.

— Tendremos que ir a una aldea próxima para poder solucionar todo lo referente a la ceremonia. —comenta intuyendo el plan del ojinegro.

— Está bien, es probable que Sakura decida mañana mismo hacer el chequeo médico a todos que mencionó hoy. —suspira demostrando su desaprobación con esto—. Será mejor ir mañana mismo, mientras ella esté ocupada.

— Kyoko-chan la acompañará, así que ambas estarán pendientes de la otra. —se levanta del suelo—. Iré a descansar, ya que mañana estaremos muy ocupados. —añade contenta pasando a su lado.