La luz de la primavera

Capítulo 18

Sasuke POV

Al estar de esta manera recostados, con su cabeza sobre mi pecho, y su brazo sobre mi abdomen, sentir el calor de su cuerpo a mi costado y su fragancia impregnándose a la bata que tengo puesta, se apaciguan las nuevas olas de calor y cosquilleo que aparecieron en el instante que nos besamos en esta ocasión.

Tengo completa certeza de que quiero estar a su lado, pero ahora en mis células aparece un anhelo de sentirla completamente cerca, aunque me alegra saber que al parecer es un deseo mutuo, pues sentí su respiración más agitada y en sus ojos percibí un brillo desconocido, imagino que también debió aparecer en el mío, sin embargo por mucho que mi ser grite en su interior por hundirme en sus caricias, sus besos y su fragancia, no puede ser, no aún. Debo ser cuidadoso, estos nuevos instintos se exacerban al tenerla próxima a mí, pero al mismo tiempo ya no puedo estar lejos de Sakura. Tengo que aferrarme a mi lado racional y sereno, que amenaza con desaparecer en cada instante que nos dejamos llevar de ese modo, y frenarme antes de realizar un acto irresponsable e irrespetuoso.

No puedo permitirme estar vulnerable en mis sentidos mientras esta misión siga en curso, debo priorizar su protección. Prometí también entregarle todo el respeto que merece e ignoré en el pasado. No realizaré nada indebido hasta que sea mi esposa. Le confesaré esta intención apenas acabemos con el peligro de Kou. Lo haré nuevamente, con ella plenamente consciente de mis palabras en esta ocasión.

Es necesario encontrar un punto medio en nuestra intimidad. No quiero sentirla alejada luego de nuestra confesión mutua de amor, sin embargo tampoco puedo arriesgarme con besarla y acercarnos como hace unos momentos. Por primera vez soy incapaz de confiar en mi fuerza de voluntad, así que estoy complacido que aceptara mi propuesta de dormir de este modo, para calmar el calor y mantenerme firme en mi labor como shinobi.

Es un silencio agradable, mis dedos se mueven entre su cabello rosa, y su mano, aún tímida, se mueve de forma casi imperceptible sobre mi bata.

— Sasuke-kun. —me llama suavemente, su voz tiene un tono levemente alto, parece insegura.

— ¿Hm?

— No sé si creerás que estoy loca. —levanta su rostro, permitiéndome ver ese jade iluminado—. Aunque es primera vez que estamos así. —me mira intermitente mordiendo su labio, duda de decir lo que está pensando, a mí solo me genera ganas de besarla. Sus mejillas se encienden, y luego se fija en mi rostro otra vez—. Hay algo que me hace sentir que... ya he estado recostada sobre tu pecho anteriormente.

Sí había estado así previamente, cuando la encontré junto al río como una niña dentro del genjutsu. ¿Ella tendrá otros recuerdos de todo lo que dijimos? ¿Recordaría mi objetivo que se convierta en mi esposa?.

— Hmp. —sonreí de costado, no indagaré en esto aún, no es el momento indicado para que ella recuerde sobre ello.

Me mira con reproche al no recibir una respuesta más larga. Se escucha un golpe suave en la puerta. Sakura se levanta de un salto, nerviosa y completamente ruborizada.

— Un momento. —digo con voz tranquila, evitando contener la risa en mi interior—. Azami. —llamo en voz baja.

Rápidamente hace el sello con sus manos y se transforma. Me levante y abrí la puerta despacio. Frente a mi apareció una joven que trabaja en el lugar junto a la cena.

— Que lo disfruten. —dice con una pequeña reverencia.

Asentí como respuesta, ingresé la comida y cerré la puerta detrás de mí. Deshizo la técnica, y comenzamos a comer.

— Mañana almorzaremos con Hideki-san. —escuchar ese nombre me hace recordar su coqueteo, inmediatamente mis dedos en los palillos se tensan—. Debemos averiguar si la leyenda que contaba Kou es conocida por las personas de aquí.