ᴅɪᴍᴇ ᴄᴏɴ QᴜɪÉɴ (Reylo AU)

Capítulo 11 "Tú, otra vez"

Kylo se fue a su habitación pensando en que todo estaba perdido, ahora no había nada más que hacer ¿Debía alejarse de ella y perderlo todo? Probablemente la respuesta era un sí, y él lo sabía muy bien. Se maldijo a sí mismo por haber apostado todo a eso, pero no podía evitarlo, pensar en ella era algo que no podía evitar, sobre todo ahora y tal vez esa era la parte que más le agradaba de todo esto. Tomó su teléfono y llamó a su número, pero ella no contestó.

Tomó su guitarra y comenzó a tocar una de sus canciones con el volumen más bajo posible para no molestar a su hermano. Necesitaba pensar y eso siempre lo ayudaba a ordenar sus ideas. Estaba siendo tan inmaduro, al igual que su padre, de hecho, estaba actuando tal como lo había hecho Han Solo cuando se fue de casa, diciendo que no podía acostumbrarse a las responsabilidades de ser el esposo de una princesa... y fueron las mismas palabras que él utilizó cuando se fue de casa... no estaba listo para ser el hijo de una princesa y nunca lo estaría. Tal vez por eso lo odiaba tanto, porque sabía que era exactamente idéntico a él.

Recordar a su padre hizo que viniera a su memoria una de las canciones que siempre les cantaba a él y a Ben cuando eran unos niños, a pesar de los regaños de su madre, quien decía que no era apropiado para ellos, pero escuchar a "Queen" era la mejor forma que tenía de burlarse de su madre al ser de la realeza. Prendió la radio y puso el disco, buscó la canción "we will rock you" y sonrió al recordar cuando junto a Ben aplaudían imitando el sonido de la canción mientras su padre les brindaba un pequeño espectáculo. Bastó un minuto para que se diera cuenta de que su hermano estaba observándolo desde la puerta, cantando al igual que él, tratando de imitar a su padre cada vez que cantaba aquella canción. Ambos sonrieron al darse cuenta de que estaban volviendo a ser unos niños por un momento, olvidando todo lo que había pasado, hasta que la canción terminó.

-Eres ridículo – dijo Kylo entre risas.

-No tanto como tú – Ben toma una almohada y se la tira, golpeándolo en la cara – Me lo debes.

-Está bien... - dijo resignado. Ben se dio la vuelta para volver a su habitación – Benji, espera...

-Odio que me llames así.

-Perdóname... soy un tonto, lo sé, pero no lo hice para molestarte... tengo mis razones...

Ben lo miró sin entender - ¿Cuáles serían esas razones?

Kylo lo pensó por unos momentos, otra vez estaba a punto de confesarle todo, pero no podía, entonces era mejor contarle solamente una parte de la verdad – Es porque me gusta mucho... y hoy lo comprobé.

-¿Eso es cierto? O estás jugando...

-Es la verdad – dijo con sinceridad, al menos era sincero en eso.

Kylo lo miró seriamente, entonces Ben lo supo, estaba diciendo la verdad. Cerró los ojos y tomó aire, estaba resignado, al fin y al cabo, Rey había salido con Kylo y no con él, incluso se habían besado y aunque algo se removía por dentro, solamente pudo pensar que estaba sobrando en esta historia – Entonces deberías salir con ella...

Aquellas palabras lo sorprendieron – No, no puedo hacerlo, sé que esto te importa.

-No, no me importa – dijo mintiendo, pero era lo mejor que podía hacer, renunciar – Pero debes irte de todas formas – Si iba a ser el perdedor no permitiría verla en su casa.

-Está bien – dijo tratando de ocultar la sonrisa de su rostro, como si eso fuera todo lo que necesitaba, a pesar de que debía buscar un lugar donde vivir.

Ben le dio una sonrisa tratando de ocultar lo mal que se sentía y se fue a su habitación, dolido con la decisión que había tomado, pero si iba a ser el perdedor en todo esto al menos se quedaría con la satisfacción de haber hecho lo que consideraba lo mejor para todos, así no tendría que verla nunca más... sí, eso era lo mejor, no verla nunca más.

Al pasar unos días llegó a su oficina, como todas las mañanas, pero a pesar de estar seguro de lo que había hecho, aún se sentía extraño, pero mejor era olvidarse de ese asunto y seguir como si nada hubiese pasado, desde ahora ella no existía. Dejó de pensar cuando vio que Poe lo estaba esperando.

-Tuve que despedir a Vanessa...

-¿Qué? – Miró a su amigo con sorpresa. Sabía que su mejor amigo tenía una debilidad por las mujeres desde que lo había conocido, pero ya estaba llegando al límite.

-Tuve que hacerlo, Zorii estuvo a punto de descubrirme, no podía arriesgarme – Poe se veía realmente preocupado, tal vez su novia sabía más de lo que él deseara que supiera.

-Te dije que dejaras de coquetearle, ahora por tu culpa no tenemos asistente, justo cuando necesitamos más ayuda ¿Sabes cuánto tiempo costará capacitar a la persona que llegue a ocupar ese puesto?

-Conseguiré una persona antes de esta semana, lo prometo.

-Todo lo ves tan fácil...Vanessa hacía un muy buen trabajo y dudo mucho que encuentres una persona tan capacitada.

-¿Por qué todo lo tomas tan grave? Pienso que te falta diversión, querido amigo.

-No es gracioso Poe, esto es en serio.

-Ya verás, debes confiar en la magia de Poe – dijo riendo mientras tomaba su teléfono para hacer una llamada.

Ben lo miró con seriedad, no era la primera vez que esto ocurría – Eso espero...

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Rey estaba junto a sus amigos en la universidad, a pesar de la llamada que había recibido de su madre, siguió yendo a clases aquellos días, mientras encontraba otra solución que no fuera irse de vuelta a Jakku. La noticia de que ya no podrían pagarle la universidad ni sus gastos la había golpeado demasiado fuerte y todo había sido por culpa de su padrastro, quien no estaba manejando bien los negocios familiares, logrando que perdieran casi todo, excepto la casa. Debía encontrar un empleo lo más pronto posible o todo se derrumbaría, a pesar de que Rose le permitiría quedarse en casa sin pagar nada y los demás prometieron ayudarla.

Todos estaban concentrados buscando empleos por internet, hasta que Connix llega corriendo hasta ellos, con una gran noticia – Tengo un empleo para ti...

Era la mejor noticia que había escuchado - ¿En serio? – preguntó emocionada.

-Sí, pero tienes que apresurarte, será hoy a las tres de la tarde.

Rey miró la hora, ¡maldición! Sólo quedaban dos horas. Se puso de pie y salió corriendo junto a Connix directamente a la casa para cambiarse de ropa.

Sólo faltaban veinte minutos para las tres y Rey estaba con su mejor traje, junto a Connix frente a un hermoso edificio. Se sorprendió al ver que se trataba de una de las constructoras más importantes del país - ¿Cómo conseguiste esta entrevista? ¿Fue tu padre? – preguntó mientras entraban a la recepción.

Connix se puso un poco nerviosa – Fue... Poe...

-¿Poe? ¿Hablas del profesor Dameron? – la miró sin entender - ¿Cómo es que te lo dijo?

-No preguntes – dijo riendo.

-Ya hablaremos de esto... -De pronto recordó las palabras de Ben "Es mi mejor amigo, trabajamos juntos". Se quedó paralizada.

-¿Qué te pasa Rey?

-No puedo ir, Ben trabaja aquí... - dijo nerviosa.

-Ay no – Connix puso una mano en su cabeza al recordarlo - ¿Qué hacemos?

Estaba a punto de dar la vuelta e irse, hasta que aparece Poe – Acompáñeme señorita Palpatine...

Ben estaba firmando unos papeles, estaba tan concentrado, hasta que llega Poe con una gran sonrisa – Te dije que encontraría un reemplazo...

-No te creo – dijo con indiferencia, sin mirarlo.

-Te presento a la señorita Palpatine...

Ben levantó la vista en ese momento y no pudo ocultar su sorpresa, al igual que ella. Ahí estaba de pie mirándolo sin saber que decir, no podía creer que ella estaba frente a sus ojos, no reaccionó, mientras Poe le daba los detalles del horario que tendría debido a sus estudios, pero no escuchó ni una sola palabra, hasta que ella tímidamente hace una señal con la mano y le dice – Hola...