By. Jimin.
Había tomado cinco días libres de la tormenta que se desataría cuando llegara a la escuela y me encontrara cara a cara con ___.
Pero cuando al tercer día de estar en las villas con Suga, cuando recibí la llamada de mi mejor amigo, que podía considerar como mi hermano, me arrepentí totalmente.
-Perdí mi torneo, y todo porque ella me hizo la muy sutil amenaza de que, si no te mata a ti, me mata a mi... ¿tienes idea de cuánto me gusta estar vivo? MUCHO, así que más te vale que llegues el viernes y te quedes todo el maldito fin de semana conmigo, porque por tu culpa ___Crowell quiere sangre.
La verdad es que había soltado todas las palabras de manera rápida, y de un momento a otro empezaba a subir el tono de su voz, por lo que intuí de que de verdad se había vito con una muy mala cara de aquella chica.
-Tranquilo, Suga no tiene planes de alargar el viaje, ya hicimos lo que nos habían encargado y aunque tenga que llegar solo, también soy consciente de que no puedo huir de ella toda la vida.
Suspire de manera pesada y me recargue en el barandal de mármol frente a mí, la tarde estaba bellísima, la luz se reflejaba en el agua del estanque y unos cuantos gansos hacían que estuviera la superficie del agua en movimiento, lanzando algunos destellos como si fuera un gran diamante.
-Me temo que ella es todo un demonio, lamento el futuro que te espera, pero sabíamos que esto podía pasar.
- ¡Ah! Ya lo sé, no sabes cuánto lo siento, no pensé que ella se fuera a cercar a ti y mucho menos que te amenazara, pero dime, ¿Qué fue lo que te dijo?
-Me dijo que una cabeza iba a rodar y que, si no tenía la tuya, iría por la mía. Jimin, sabes de sobra en las cosas en las que estoy involucrado y estoy seguro de que si ella empieza a escarbar un poco descubrirá nuestro pequeño negocio y conexión con Suga, eso no será bueno para ninguno.
En automático me tense.
Tenía razón.
Aunque los dos no solíamos ser de los que se mentían en problemas en la escuela, la realidad era que, nuestra vida estaba llena de problemas.
Hace dos años nos metimos a una pandilla que se dedicaba a las actividades ilícitas.
Nos habíamos convertido en mulas, desde el contrabando de algunas drogas hasta ir a casas de las personas a cobrar el dinero que les debían a otras personas, de eso llegábamos a recibir en ocasiones pequeñas comisiones.
La diferencia entre Jin y yo, es que aquel cabrón tenía más cerebro que yo, así que mientras él era más hábil con los numero, con las estrategias y los planes, a mí me tocaba realizar las acciones.
Ganábamos muy bien.
Y aunque es todo un estereotipo de que las personas pertenecientes a este tipo de pandillas somos unas personas con una mala vida, llena de vicios y violencia, la realidad era muy diferente, es por eso que, aunque ya no necesitábamos en dinero (que fue el principal motivo por el que nos habíamos involucrado en esto) seguíamos por que estar con ellos implicaba seguridad.
No era la típica banda en la que cada quien era un peón, no, Suga se preocupaba en exceso por sus muchachos, en especial por los nuevos.
Habían sido muy pocas veces las que nos habían expuesto realmente a alguna clase de peligro, siempre eran cosas fáciles y sencillas de realizar y muy pocas veces aceptábamos trabajos que nos arriesgaran. Y era por eso que allí seguíamos.
Es por eso que me encontraba en medio de un conjunto de villas en donde una familia muy bien posicionada debido a la venta de drogas se encontraba vacacionando con sus hijos, nosotros, nos encargábamos de cuidar a los niños pequeños y a un par de adolescentes que habían tenido un flechazo por nosotros y que no paraba de insinuarse.
Nos habían contratado específicamente a nosotros porque Suga ya había trabajado para ellos en la distribución de narcóticos, aparte de que parecía conocer muy bien a la familia e incluso la abuela del matrimonio principal, cada tarde se había acercado a ofrecernos galletas y un poco de té, hasta teníamos nuestra propia villa al lado de la villa de los niños para poder estar al pendiente de ellos.
Éramos cinco de los chicos de Suga cuidando a ocho niños de entre seis y doce años y dos adolescentes de 16 años, yo era el más pequeño de grupo con 18 años, los demás, ya tenían más de 20.
-Está bien, entiendo a los que te refieres, llegare y calmare a ___.
- ¿Cómo?
-Dejando que me use de saco de boxeo.
-Oh que divertido, deberías dejar que tu mejor amigo también se calme contigo siendo usado como saco de boxeo, Jimin, no sabes lo que te hago si mi madre se entera de la existencia de Suga.
Aquello logro que sacara un suspiro melancólico que me dejo un leve dolor en el pecho.
Fue hace dos años cuando la madre de Jin tuvo una terrible enfermedad que la dejo en el hospital durante meses, las facturas eran muy caras y ni Jin ni su padre sabían qué hacer con la falta de dinero, fue cuando comenzamos nuestro trabajo, porque obviamente, aunque yo no era quien necesitaba el dinero, no dejaría que mi hermano y mi segunda madre pasaran por eso solos, no, yo me metí para asegurarme de que no encontraría a mi mejor amigo golpeado en algún callejón en su primer trabajo.
Si la madre de Jin se llegara a enterar de esto, ella nunca se lo perdonaría, jamás se sacaría de la cabeza el gran sacrificio que su hijo hizo por ella.
-Tranquilo Jin, ella no se enterará de nada, te veo el viernes.
Colgué la llamada.
Y me dije que más me valía cumplir con aquella promesa que le había hecho, porque si no era así, no solo la había cagado con una mujer, la había cagado también con mi familia.
*~*~*
Ok, muchas respuestas, muchas preguntas...
Para los que no entendieron, esto se desarrolla en medio del capitulo 11.
Creo que secretamente disfruto de leer y escribir los pensamiento de Jimin.
Bueno, ya sabemos lo que significa un extra...
Minnie_Novack
ESTÁS LEYENDO
Solo una noche Park Jimin
FanficQué pasaria si alguien entra en tu casa en la madrugada?, cuando todos duermen, pero por alguna razón tu tienes insomio? Qué harias al darte cuenta que no solo lo a hecho una vez?. Qué no solo te ha visto dormir una vez?. Qué no solo se le ha pasado...