XL

1.5K 241 128
                                    

Narra Frank

Sábado, dia de la fiesta:

Antes de que la fiesta empezara, corrió el rumor de que Iván vendría y no se quedaría de brazos cruzados. Hijo de puta, por lo que se ve la paliza que le dieron Sam y David no fue suficiente.

[...]

Estaba junto a Alex, haciendo nuestras cosas cuando apareció Raúl y se lo llevó. Borja apareció detrás suyo, le paré.
- Tío, que Iván la quiere liar parda. En cuanto le veamos, David y yo jugaremos un rato con él, pero necesitaré que Raúl no se entere de nada. Creo que intuyo lo que va a contar. - asentí.
- Yo no tengo ningún problema en reventarle la boca, por si necesitáis ayuda.
- Tranquilo, podremos con él.

[...]

- ¿Cómo de miserable tienes que ser para contar intimidades? - le di una patada - Estoy harto de que Alex se sienta intimidado por ti, de que Raúl no este seguro y - le agarré de la camisa - de que no dejes de tocar los cojones.
- Vale, relajemonos. Frank suéltale. - David estaba lavándose las manos.
- No. - seguí golpeando su cara - se lo merece. - David me cogió por los brazos y me separó de él. - Te aviso, Iván, que como vuelvas a meterte con alguien, vas a echar mucho de menos esta vida, porque simplemente te voy a joder la existencia. - Le escupí y fui dónde la cabaña de Raúl y Borja. Al entrar vi al más pequeño acurrucado en el pecho de Borja. Iba a hablar pero Borja me hizo callar señalando a Raúl.
- En principio no hará nada. Cualquier cosa que pase avisame - le dije a Borja. Este asintió.
- Estaría bien llevar a Raúl a casa... ¿Me ayudas? - asentí y levanté al menor. Este se movió.
- Borja... - murmuró, cuando el nombrado se levantó y estiró cogió a Raúl. Fuimos ambos hasta su coche y, después de varios intentos conseguimos meter a Raúl en el coche. Este chico tenía el sueño muy profundo.
- Gracias Frank. Te debo una - Borja se despidió y condujo hacia su casa.

Narra Borja

Domingo.

Raúl seguía dormido, le presté una sudadera que había en el cochd ya que hacía bastante frío. Lo llevé hasta mi cama y lo tumbé cubriéndolo con la manta e intentando que no cogiera frío. Yo fuí a la habitación de invitados, no vi bien dormir con él sin su consentimiento explícito. Eran las 3 de la mañana y no tenía nada de sueño. Un grito y unos sollozos me sacaron de mi trance. Me acerqué a mi habitación y vi a Raúl sollozar sentado en la cama. Me acerqué a él.
- Raúl, cielo ¿Una pesadilla? - murmuré abrazandole. Este asintió.
- Lo siento... - hizo un puchero.
- No te disculpes cielo, ¿Quieres contármelo? - acaricié su espalda intentando que se calmara. Raúl asintió ligeramente. - ¿Vamos a la cocina y te preparo algo calentito? - Raúl asintió de nuevo.
- Eres mami luzu, ahora esta confirmado - sonreí y bajé junto a él a la cocina.
- ¿Que te apetece? Tengo un poco de todo. - Abrí la despensa. Repasando un poco lo que había.
- Un Nesquick, calentito porfa. - Se veía tan tierno Raúl estando soft. Adoraba cuando se ponía en modo infantil. 
- Marchando, ¿Que pesadilla has tenido, honey? - le pregunté mientras cogía su taza favorita. Una especialmente navideña pero que, según Raúl, pegaba con todas las épocas por ser bonita, roja y blanca. Gran argumentación. Le calenté la leche y le puse el chocolate, le di la taza.
- Era la pesadilla típica con Iván. La de cuando me pegó y eso. Nada nuevo. - Le miré enternecido. Bebió de su taza. - Gracias por el Nesquick - sonrió.
- ¿Sueles tener mucho estas pesadillas? - Él asintió levemente - ¿Y que haces para tranquilizarte cuando estas solo?
-

Nada, intento dormirme de nuevo, y si vuelven me doy una ducha fría. No puedo hacer más.
- Claro que puedes, ve al psicólogo Raúl.
- No quiero - jugó con la taza - Si estas cerca mio no tengo pesadillas. - murmuró. - Pero no puedes estar conmigo siempre - suspiró y se terminó la taza - Mañana llamaré al psicólogo. Vamos a dormir. - Dejó la taza en el lavavajillas y subió hacia el cuarto de invitados.
- Raúl, ve a mi habitación anda, no mereces estar en ese cuartucho mal decorado. - Subí tras él cerrando la puerta de la habitación y guiándole hacia la mia.
- Quédate porfavor... - susurró jugando con las mangas de la sudadera.
- Hecho, ¿Dormimos? - Me acerqué a la cama y me tumbé, Raúl se tumbó a mi lado. Su respiración se ralentizó indicando que había caído en los brazos de Morfeo. Raúl se veía tan puro y tan frágil durmiendo que me daba miedo moverme por si le despertaba.

Nota

Hoy me he tatuado. Estoy feliz. Pero me han dolido mucho :(

Adoro intentar escribir situaciones soft y que sean de todo menos soft.

Os tendré unos días sin actualizar, quiero centrarme en química y aprobarla :((

So, buenas noches que en Españita son las 00:24 😔✌️❤️

Fine Line (Luzuplay) [En edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora