Stolen Keys | (completada)

8

(Avrey)

River regresa y es obvio que algo ha pasado. Esta estresado y camina nervioso.

—¿Qué ha pasado?— Pregunto acercandome.

Acomoda su cabello y siempre esa es la primera señal de que algo pasará. —Hable con Liana, le he explicado todo.

Tomo sus manos para que trate de calmarse. Se perfectamente lo que hacía en momentos así, se drogaba. Y se que ha estado sobrio todo el tiempo que estuvo en McAlester, pero se que sus ansias siguen ahí.

—Tranquilo, respira.— Digo tratando de encontrar su mirada con la mía.

Mira hacía el piso y respira hondo. —Ya, está bien.— Dice más calmado.

Cuando quiero acercarme a consolarlo, alguien abre la puerta. —Avrey, creo que querrás ver esto.

Ambos River y yo lo seguimos hacía afuera y observo como la gente se junta alrededor de la televisión del patio central. Son mis padres. Verlos en televisión es tan extraño cuando hace meses que no los veo en persona.

—...Entonces, ¿ustedes no sabían que el chico Alderidge aún vivía?— El entrevistador pregunta y veo como ambos gestos de los dos cambian.

—No teniamos ni idea, de haberlo sabido, hubiera estado muy en contacto con nosotros. Su padre era mi mejor amigo...— Los miro con cara de sorpresa. No puedo creerlo.

—¿Ustedes creen que ellos hayan estado en contacto desde antes? La gente sospecha que en realidad Avrey nunca fue secuestrada, si no que todo fue un acto de ellos para ganar fama... y matar personas.— Siento las miradas de todos sobre mi.

—Yo sé que mi hija no es mala. La conozco. No hay un solo hueso en ella que sea malo. Todo es culpa de ese chico.— Escucho la voz de mi madre con toda la tristeza del mundo, y confieso que a ella si la extraño, pero a mi padre, ni un poquito.

—No podemos saber si siguen juntos, pero fuentes afirman que ella era parte del grupo que sacó a River de la cárcel, ¿qué piensan ustedes? — Me sorprende la forma en la que habla el entrevistador, sin filtros ni cuidados, yo tendría más cuidado con las cosas que pregunto y las acusaciones que hago.

—Honestamente no lo sabemos. Hace meses que no sabemos nada de Avrey. Mi corazón me dice que si, que ella fue la que lo sacó, pero quisiera pensar que no es verdad. Que Avrey esta sana, en algún lugar seguro, lejos de River.— Dice mi padre tomando la mano de mi madre.

—Bueno, por último, si es que Avrey los está viendo, ¿les gustaría decir algunas palabras?— Siento la necesidad de irme, no quiero escucharlos porque duele, pero me quedo.

Mi madre se gira para mirar a la cámara y habla. —Avrey, cariño, está bien. Puedes volver a casa. Porfavor vuelve. Si vuelves, podemos perdonarte y hacer que esto funcione. La policía ha accedido a reducir tu sentencia si vuelves. Porfavor vuelve, te extrañamos.— Tomo el control y apago la televisión. Todos me miran esperando que haré o diré. Miro a River y este tiene la misma expresión.

Los esquivo a todos y camino hacía un área dónde pueda estar sola. La oficina de River.

Me siento en su silla y subo los zapatos a la mesa. Miro hacía el techo y pienso en todo lo que acaba de pasar.

Se que no voy a volver, eso lo tengo claro. Extraño a mi madre y eso nunca cambiará, porque siempre será mi madre la que me crió con todo el amor y cuidado, a excepción de las mentiras. En cambio mi padre, no puedo decir lo mismo. Si, el también me crió con su amor, pero de lejos. Toda mi vida senti que su prioridad número uno era el trabajo, y después la familia. Así nos hizo sentir siempre. Ahora que sé lo que mi papá hizo, me es más fácil no extrañarlo. Al que extraño con locura y muero por abrazar, es a mi hermanito Jackson. Pero no, nunca volveré.