Capítulo 4

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17 de julio de 2019

POV'S CARMEN (madre)

—¡Alicia! —gritó Antonio, mi pareja—. ¡Alicia!

Antonio se acercó a mí cabreado y me agarró las mejillas apretándolas con fuerza.

Me quejé, pero hizo caso omiso.

—¿Dónde está tu puta hija? —se acercó más a mí, intentando intimidarme y formuló la pregunta juntando sus dientes.

—Ay, me haces daño —me quejé.

—No me importa. Contesta a la pregunta que te acabo de hacer.

—¿Para qué lo quieres saber?

—Para mimarla, ¿para qué va a ser? —contestó irónico.

—N-no te lo puedo d-decir... —cerré mis ojos con fuerza.

Antonio propinó un fuerte puñetazo en mi mejilla izquierda.

—Lleva un día fuera, ¿y te das cuenta ahora? —espeté asqueada.

Sonó el timbre.

Antonio fue a abrir y entraron los hombres de ayer, con quien tenía que saldar sus deudas y me vieron serios.

—Antonio —pronunció uno llevando su mirada hasta él—. ¿Ya te has decidido?

—Eh... Sí. Bueno, pensé venderos a mi hija, pero ha surgido un imprevisto —dijo mirándome con odio.

—¿Cuál?

—Ha desaparecido. No la encuentro.

—Pues ya puedes descubrir donde está, sino serás hombre muerto —el gran hombre se acercó a él intimidándole—. ¿Te ha quedado claro? —Antonio asintió rápidamente.

—No te preocupes. La encontraré y te la venderé.

—¿Vender? —uno rió falsamente— No, no. ¿Cómo que vender? ¿Pensabas hacernos pagar por tu hija, cuando aquí el único que tiene que pagar eres tú?

—B-bueno...

—No pensamos pagar por tu hija. Nos la das y nosotros te dejamos tranquilo —aclaró el primer hombre de todos.

—Mañana volveremos, como no hayas descubierto dónde cojones está, te mataremos con nuestras propias manos, ¿entendido? —volvió a hablar el segundo.

—Entendido.

El grupo de hombres fue rumbo a la puerta y abandonaron el lugar.

—Tú me vas a decir dónde cojones está tu hija, porque sino te mataré yo mismo —Antonio se acercó a mí furioso y me tiró al suelo con fuerza.

—No voy a permitir que vendas a mi hija —me atreví a decir entre dientes.

—Eso ya se verá —me dio otro puñetazo en la misma mejilla.

(...)

—¿Y bien? ¿Ya sabes dónde está tu hija? —el mismo grupo de hombres, se acercaron a nosotros.

—Yo aún no, pero mi esposa sí —Antonio me miró maliciosamente.

Una hora antes me dio una paliza en la que perdí la consciencia por un rato. Suficiente tiempo como para que pudiese sentarme en una silla en medio del salón y atarme con una cuerda bastante gruesa.

—Buen plan —comentó el líder.

—Gracias —respondió Antonio con una sonrisa triunfante.

El hombre se acercó a mí y se agachó quedando a mi altura.

—Muy bien, querida. Ponme las cosas fáciles. ¿Dónde está tu hermosa hija? —me acarició la cara.

—No lo sé —respondí apartándola.

—Estoy seguro de que sí que lo sabes. Te lo voy a volver a repet...

—No hace falta. No soy tonta. No lo sé. Y si lo supiese, no pensaría decíroslo. No pienso permitir que Antonio venda a mi hija. Y mucho menos, mientras yo esté viva.

—Entonces tendré que matarte...

—Aún así, hay personas que no os lo van a permitir.

—¿Ah, sí? —preguntó incrédulo y yo asentí segura—. ¿Como quiénes?

—No lo puedo decir.

—Yo sé como quiénes —intervino otro. Todos llevamos nuestras miradas hacia él—. Personas como su hermana Catalina. El otro día vi a Alicia caminar hacia la parada del bus con una mochila y una maleta. Que yo sepa, no se habla con nadie más que no sea su abuela o su tía...

—¿Y ahora lo dices?

—Esperé a que la torturáseis.

—¿Sabes dónde vive la tía?

—Antes sí. Pero se mudó. Se fue a otra ciudad y ya no sé nada de ella.

—¿Y tú? ¿sabes dónde vive? —me miró.

—Sé exactamente lo mismo que tu compañero —mentí.

—Ahora eres muy valiente, ¿no? A mí no intentes vacilarme. No me llegas ni a la suela del zapato. No te vas a salir con la tuya. Descubriré dónde vive actualmente tu hermana, y me encargaré personalmente, o alguien de confianza, en ir donde ella y sacar a tu hija de esa casa —planeó.

Se puso recto y se fue con todos los de su banda pisándole los talones. 

***

¡Heeyyy! Bueno, cuarto capítulo subidoo. 

Quería informaros de dos cosas.

La primera: para poder organizarme mejor con la novela, he decidido hacer un horario para subir capítulos. Así que el horario será el siguiente: 

Los días en los que subiré capítulo serán los: lunes, miércoles y viernes. E intentaré subirlos alrededor de las 11:30 de la mañana; bueno, esa hora aquí en España... 

La segunda: también quería agradeceros por el apoyo que le estáis dando a esta novela, porque ya es el cuarto día que lleva en esta plataforma y ya hemos llegado casi a las 100 visitas; y todo gracias a vosotros. Nunca pensé que subiría tan rápido y sería tan apoyada, y esa es la razón por la que he tardado en subirla, jeje. Pero en serio, muchísimas gracias a todos los que la leéis y la apoyáis votando y comentando.

Y dicho eso, ¡nos vemos el lunes! 

Espero que os haya gustado el capítulo, y si es así, votad, comentad y compartid. 

¡Chao, lectores! 

¡Chao, lectores! 

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El oscuro secreto familiar ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora