One of those Days || Gaalee/Leegaa

Capítulo 15

Se pasó la mano sobre la frente borrando todos los rastros de sudor que podrían estar sobre su sien. Había estado organizando la llegada de los preparativos de la fiesta ni bien salió de su última clase del día que tuvo en la mañana. A partir de ese momento hasta casi el final de la tarde había estado de aquí para allá verificando que todo esté en su debido orden, dirigiendo a cada miembro de ambas fraternidades para que la celebración de la victoria de Rock Lee saliera perfecta. Es lo menos que podía hacer después del gran desempeño del pelinegro el día anterior.

-Ya hiciste mucho, toma un descanso y ve a alistarte, hermanito- le dijo Kankuro, quien sostenía una caja llena de bebidas alcohólicas.

-¿Estás seguro? Todavía faltan ciertas cosas.

-Tranquilo- mencionó Naruto, quien venía tras de Kankuro con otras cajas también. -Nosotros nos encargaremos del resto, de veras.

-Sí, hiciste un excelente trabajo, Gaara. Total ya casi terminamos, y justo a tiempo. Serías un excelente líder- dijo Kankuro proporcionándole una sonrisa, la cual el pelirrojo devolvió.

-Bien, nos vemos más tarde entonces- dijo antes de tomar sus cosas para irse, pero la reciente presencia de Neji lo hizo detenerse.

-Vaya, sí que hicieron un trabajo genial- mencionó el recién llegado observando la excelente decoración del complejo de la fraternidad de La Hoja y de La Arena. Habían instalado un set de luces de neón, al igual que un complicado equipo de sonido, cuyas bocinas habían sido posicionadas en distintas esquinas de todo el complejo. También dentro del edificio acomodaron una mesa larga en la cual se servirían todas las bebidas y la comida. Aunque el sol aún no terminaba de ocultarse, el lugar prometía dar un aire de club nocturno.

-Apuesto a que a Lee le encantará- continuó el castaño.

-¡Neji! ¡Hola! Muchas gracias- saludó Naruto.

-Hablando de eso, ¿cómo está él?- cuestionó Gaara tratando de no sonar muy preocupado.

-Sí, ¿qué es de él? No lo he visto desde ayer. Se veía bastante agotado- dijo Kankuro apoyándose en una esquina.

-Ha estado recuperándose desde que acabó el torneo, pero no tenía nada grave, únicamente uno que otro golpe - explicó -Lo que más tenía era cansancio, pero tranquilos, ya está mejor. Ya saben cómo es, nunca se le acaba la energía.

-Qué bueno- murmuró Gaara. Tras esto, se despidió de los presentes para tomar camino hacia el edificio donde se encontraba su habitación, la cual quedaba un poco lejos por lo que le tomó cierto tiempo.

Ni bien abrió la puerta de su pieza, dio un profundo suspiro obra del agotamiento del largo día que había tenido. Una vez asegurada la puerta, fue deshaciéndose de sus ropas una por una tirándolas sobre su cama. Una vez que su blanquecina piel estuvo completamente descubierta, entró al baño para darse una larga y cálida ducha que pronto lo relajó por completo. Las cálidas gotas bajando desde sus cabellos rojos hasta la punta de sus dedos era lo que más necesitaba en ese momento. Aquella semana había sido tan ajetreada y llena de diversas emociones que había olvidado ese sentimiento de paz. Parecía que poco a poco todo comenzaba a tomar un mejor rumbo.

¿Qué podría salir mal?

Tras haber terminado su aseo, tomó su toalla y la envolvió entre sus caderas. A continuación salió del baño para comenzar a buscar la ropa que utilizaría esa noche. Se decidió por un suéter delgado color carmín, jeans azules y zapatos deportivos blancos. Una vez completamente vestido y tras haber secado su cabello con la toalla, volvió al baño para arreglarse un poco. En lo que terminaba de hacerse su delineado de siempre, un Naruto completamente agotado entró a la habitación con cara de los mil sueños y saltó a su cama mientras pronunciaba:
-Despiértame 10 minutos antes de irnos para que me aliste.
Y se durmió.