El Colega - Yoonmin.

Capítulo 35

Subieron las escaleras, lo detuvo en el último escalón,

Yoongi: Hubiera preferido haber muerto ese día.

Jimin: No digas tonterías.

Yoongi: Dolería menos que amarte.

Jimin: Min.

Lo besó, abrió la puerta y entraron, ambos como leyéndose la mente se quitaron toda su ropa, quizás influyó también que iban empapados,

Yoongi: Te vas a despedir bien de mí.

Jimin: ¿Cómo?

Yoongi: Siendo mío toda la noche.

Jimin: No.

Bajó la vista, estaba consciente que no tenían con qué cuidarse, Min parecía no recordarlo o no importarle, de pronto pensó "claro si hay consecuencias, me quedo solo yo con ellas",

Yoongi: Voy a tomar mis cosas para irme a dormir a Mataárboles.

Jimin: Está lloviendo horrible.

Yoongi: Estoy mojado de todos modos.

Jimin: Yoongi.

Se acercó, su piel rozó con la de él,

Yoongi: Dijiste que no.

Jimin: Una vez nada más, pero tiene que ser prueba, no completo.

Yoongi: Tú siempre pones las reglas.

Lo besó muy tierno,

Jimin: Primero hay que quitarnos el lodo que traemos.

Yoongi: Sí.

Entraron al baño, abrieron la llave, ambos entraron abrazados al chorro de agua, tomó el jabón, hizo como espuma en sus manos y recorrió así el cuerpo de Park, lo estremeció por completo, se agarró a Min porque sintió que le faltaban fuerzas en sus piernas, él le dijo al oído,

Yoongi: Te amo.

No obtuvo respuesta, cerró la llave, y lo abrazó,

Yoongi: Tú amas a Ikar.

Jimin: ¿Eso crees?

Yoongi: Va a venir él por ti.

Jimin: No, mis papás.

Yoongi: Lo vas a perdonar y-

Lo besó,

Jimin: Yoongi jamás podría perdonar una traición así.

Yoongi: Si tú lo dices.

Jimin: Ven.

Salieron de ahí,

Jimin: Junta la cama.

Yoongi: No Jimin, mejor que muera así.

Jimin: ¿Así cómo?

Yoongi: Fin, punto.

Se volteó, no dijeron más, en silencio cada uno se vistió y se acostó, Park veía al techo,

Jimin: Acabó el deseo por mí.

Yoongi: Sí, definitivamente.

Jimin: Te aburriste de tenerme.

Volteó para verlo,

Yoongi: Muero por tenerte, pero...

Jimin: ¿Qué?

Dejó su cama, pensó que se iría, en eso cayó un trueno que hasta alumbró el lugar mucho más que las velas prendidas que tenían, dado que se había ido la luz,