Charmed (CLEXA)

Parte 17 Un demonio y una bruja

Joder es que amaba a Clarke, y sabía que todo lo que le habían dicho ella y Octavia era verdad. Porque todo eso lo había pensado ella antes pero no se quiso escucharse a si misma, estaba demasiado dolida y creía tener derecho a estarlo.

Pensar que le podía pasar algo malo le daba una sensación de angustia intensa.

Un demonio y una bruja blanca enamoradas... una puta locura, pero era su locura. Y bajar al inframundo de la mano de otro demonio solo para salvarla a ella, había sido prueba de ello.

No se lo podía contar a sus hermanas, no lo iban a entender. Probablemente ella tampoco lo habría hecho.

¿Y si probamos a invocarlo otra vez? - Preguntó Piper-

No funcionará, ya lo hemos intentado antes - Contestó Phoebe -

Mientras, ella las escuchaba sin poderles decir que no le hicieran nada, que no era como ellas pensaban, tal vez lo fue, pero ya no. Podía sentirlo.

Cuando pensaba en lo que su chica había hecho durante toda su vida se le removía todo, eso no podía justificarlo ante ellas, pero tal vez podría convencerlas de que había cambiado, que aquello era su pasado, pero su futuro podía ser muy diferente, que no volvería a ser aquel demonio más. Que conocieran a la Clarke que ella conocía. Que supieran ver que su parte humana había podido con todo aquel mal, que se había enamorado de ella y que nunca la dañaría. Habían pasado tiempo con ella, sobre todo Phoebe, ella tendría que llegar a comprenderla.

Necesitamos algo suyo, si no, va a ser imposible acabar con ella - Continuó hablando Piper-

Alejemonos simplemente de ese demonio - Dijo ella-

Nos volverá a atacar Lexa, tarde o temprano y tenemos que estar preparadas.

Ella sabía a ciencia cierta que eso no iba a pasar, no era capaz de hacerle daño, ni a ellas tampoco, por el simple hecho de ser sus hermanas. Se había expuesto a que pudieran acabar con su vida solo porque pensaba que no podría estar con ella. Estaban a salvo de esa parte de Clarke.

Estaba un poco nerviosa porque hacía casi un día entero que no sabía nada de ella. No podía pensar en nada más que en eso. Cuando recibió un mensaje suyo, soltó todo el aire que había estado aguantando dentro durante ese tiempo. Un respiro.

Clarke: ¿En una hora en la casa abandonada?

Lexa: Allí estaré.

Y allí estuvo, esperando hasta que apareció delante de sus ojos, todavía se le hacía raro verla fluctuar, tenía que ordenar aún muchas cosas en su cabeza.

Si prefieres que no lo haga yo...

No no, está bien, esta eres tu, me acostumbraré -Clarke se acercó a ella y le dio un beso. Lo había echado de menos-

¿Qué te ha pasado en el labio?

¿Esto? - Dijo señalando un pequeño corte- No es nada

¿Clarke estas bien? No me ocultes nada más por favor.

Abajo saben lo que a pasado... y están enviando demonios para... pero no les va a servir de nada, en ese piso ya no queda rastro de mi. No van a poder rastrearme.

¿Y dónde te estás quedando?

Octavia me esta ayudando. Es mejor que no sepas mucho más, no quiero que vayan a por ti.

Estamos acostumbradas Clarke, nos las apañaremos. Me las apañaré

No, no quiero que alguno consiga hacerte daño por mi culpa.