#21

34 6 1
                                    

(NS):

Eran las tres de la tarde, estaba recostado en el sofá viendo la televisión, estaba tan abstraído que había olvidado que Alison vendría en pocas horas, me levanté casi de un brinco, apagué el televisor y comencé a arreglar la sala.

-¿Y a ti qué te pasa?- preguntó una de mis hermanas al verme tan hacendoso

-Necesito tener todo limpio y en orden antes de las 4:30... Creo.

-¿Crees? deberías calmarte, te ves muy ansioso

-Ayúdame

-No

-Por favor

-No

-Te pagaré...

-¿Cuánto?

-Después pones tu tarifa, no tenemos mucho tiempo.- Para fortuna mía la casa no estaba en desorden como creí que lo estaría, sólo que quería que todo estuviese perfecto para dar una buena impresión. Corté unas flores y las acomodé en las macetas viejas de mamá, barrí y limpié el porche del patio trasero y sobre la mesa que había en este puse un mantel cuadriculado y rojiblanco, para dar un poco de color a aquel lugar que en su totalidad era blanco.

-¿Crees que hice una buena elección abuelo?- preguntaba al mismo tiempo que observaba la mesa, poniendo mis manos en mi cadera para descansar la postura.

-Pienso que este lugar no se veía tan acogedor desde hace años, estás haciendo un buen trabajo ¿ya viste tu cuarto?- preguntó riendo, recordé aquel lugar manchado por las pinturas y subí corriendo para arreglarlo.

Trapo, jerga, escoba y al revés; aromatizante, colchas nuevas, orden de museógrafo a pinturas, bajo, ropa y todo lo demás. Mi cuarto parecía una exhibición de "Aquí vivió Stuart Sutcliffe, dejen su donativo al museo al salir".

Cuando volví a la planta baja, preparé unos bocadillos...

Metí bebidas a la nevera, postres (porque Alison amaba los dulces) y preparé emparedados con distintos rellenos. Puse un pequeño florero en la mesa del jardín y en él acomodé flores que parecían minimalistas, de diversos colores y muy bonitas, pensé que a Alison podrían gustarle.

-Entonces ¿de cuánto estamos hablando?- preguntaba mi hermana haciendo un ademán de pago.

-No lo sé, prometo que mañana te pago

-Me conformo con que me invites unas entradas al cine

-Hecho- Ella sonrió y salió porque iría con mi madre y mis hermanas a visitar a papá, quien estaba en Londres por su trabajo, allá estarían todo el fin de semana.

Cuando miré a mi abuelo, éste me miraba y reía bajo.

-¿Y tú qué traes?

-¿Yo? Más bien tú... ¿quién es la chica?

-¿La chica? Pero...

-Hijo hice lo mismo alguna vez por tu abuela... además hoy te peinaste y has usado esa colonia irlandesa que tanto le gusta a tu padre.- Contestó riéndose, yo estaba un poco avergonzado, pero le daba el mérito por aguantar tanto tiempo sin decir una sola palabra o hacer burla alguna frente a mi madre o hermanas.

-Sólo intenta no burlarte demasiado

-Cuenta con ello y mi discreción

-Gracias abuelo

-Tú tampoco dirás que fui a Blackpool con los viejos amigos ¿verdad?

-No abuelo- sonreí tras el guiño que me dedicó. Tomó su chaqueta, su boina y salió de casa... estaba completamente solo esperando a Alison y con mil cosas pasando por mi cabeza.

Honey PieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora