Luego de recibir la ayuda de Anita con el maquillaje, era el momento de encontrarme con Maxwell. Salí con calma por el corredor, tratando de recordar la ruta hacia las gradas principales. Al localizarlas, bajé rápidamente y noté que en la parte inferior ya se encontraba Maxwell, luciendo un impresionante traje negro con detalles de rosas rojas y una máscara dorada que cubría solo uno de sus ojos.
|| ¡Wow! Ri... ¿Riley? ¿Eres tú? || Preguntó, con la boca abierta, incapaz de apartar la vista de mí. Cuando me acerqué y me detuve frente a él, hice una pequeña reverencia || ¡Te ves increíble, mi flor! ¡Liam no podrá apartar los ojos de ti! Y eso es precisamente lo que queremos. Dime, ¿cómo te sientes? ||
|| Honestamente, un poco nerviosa por ver a Liam. ¿Y si no está contento de que haya venido hasta aquí? ||
|| Riley, conozco a Liam desde que éramos niños, y nunca lo había visto mirar a nadie como te miraba a ti. Estará encantado, lo prometo || Mi sonrisa se ensanchó, deseando sinceramente que Maxwell tuviera razón. || ¿Preparada para esto? ||
|| Más que nunca || Respondí con una sonrisa firme.
**
Maxwell me condujo con gracia hasta las majestuosas puertas del amplio salón. La ansiedad creció en mí al observar cómo se abrían. Inclinándose, Maxwell susurró en mi oído:
|| Dado que careces de un título y la Casa Beaumont te respalda, técnicamente podrías ser considerada una Dama. Lady Riley... Uhh... || De repente, se detuvo, fijando su mirada en la mía. || Por cierto, ¿cuál es tu apellido? ||
|| Brown... Soy Riley Marie Brown ||
|| Perfecto... Olvidé preguntarte eso... Muy bien, entonces, cuando sea tu turno, dile al heraldo que eres "Lady Riley Brown de la Casa Beaumont" ||
Cuando las puertas del espléndido salón de baile se abrieron, Maxwell y yo hicimos nuestra entrada con cautela. Me agarraba a él como si mi existencia dependiera de ello, mientras todos parecían observarnos en un silencio expectante.
|| LORD MAXWELL BEAUMONT || anunció el heraldo, volviendo luego su mirada hacia mí, esperando mi presentación. Le indiqué cómo debía ser anunciada, y él asintió con la cabeza: || LADY RILEY BROWN DE LA CASA BEAUMONT || pronunció y junto con Maxwell comenzamos a avanzar hacia el salón.
Mi corazón latía con una intensidad abrumadora, mezclando diversas emociones. El lugar era tan magnífico como lo había imaginado. Muchas miradas estaban fijas en mí, pero, a pesar de mi búsqueda ansiosa, no pude encontrar a Liam entre la multitud. De repente, Maxwell percibió mi inquietud.
|| Tranquila, pronto lo verás... Aún no ha llegado. Pero dime, ¿qué opinas? || preguntó Maxwell.
|| Es como un sueño hecho realidad, honestamente || le confesé, dejando que mis ojos reflejaran mi asombro. Maxwell, lleno de calma, me dijo:
|| Me alegro de que lo sientas así. Mira, pequeña flor, necesito hablar con Bertrand por un momento. ¿Te sentirás cómoda sola? Solo... intégrate || guiñó su ojo antes de perderse entre la multitud. "Está bien, lo haré", me dije a mí misma. Observé el salón en busca de alguien conocido y noté a Drake, el gruñón mejor amigo del príncipe, parado en un rincón. Me dirigí hacia él, y mientras lo hacía, asintió con la cabeza y realizó una pequeña venia, como si no reconociera quién era.
|| Buenas noches, mi Lady || saludó con cortesía.
|| Vaya, vaya, ¿así que tienes modales? || le solté en tono sarcástico.
ESTÁS LEYENDO
Una Princesa Real (Libro1)
Lãng mạn¿Es posible experimentar un amor apasionado cuando se ha perdido la fe en él por completo? Riley, una joven camarera de Nueva York, ha enfrentado la adversidad a lo largo de su difícil vida. Sin embargo, un encuentro fortuito con un apuesto príncipe...