Dos semanas después, muy temprano por la mañana, me despierto al sonido de un golpe en mi puerta. Solo puede ser Maxwell. Después de varios días de preparativos, finalmente llegó el día de la "caza del zorro". Me levanto para abrir mi puerta y me encuentro con un Maxwell emocionado y un Bertrand, serio como siempre.
|| ¡Levántate y brilla, pequeña flor! || exclama Maxwell.
|| Muy bien, es hora de despertarse, Lady Riley || dice Bertrand apartando a Maxwell de su camino || Aquí, nadie se hace más joven si duerme ||
|| Buenos días también contigo, Bertrand... ¿No es un poco temprano? || pregunto mientras me froto los ojos.
|| ¡Es que los eventos de hoy comienzan temprano, mi flor! || exclama Maxwell, tomando mis manos y saltando mientras yo obedezco sin fuerzas.
|| Obviamente venimos tan temprano para prepararte, ¿o crees que disfrutamos estar frente a tu puerta en las primeras horas como una especie de servicio de entrega postal? || agrega Bertrand, exhalando aire caliente mientras le levanto una ceja.
|| No le hagas caso a mi hermano, mi flor... ¡Hoy va a ser increíble! Vamos a estar en comunión con la naturaleza a lo largo del majestuoso campo de Cordonia || me dice Maxwell con muchísima emoción.
|| ¡Eso suena perfecto, Max! El sol es exactamente lo que necesito || exclamo.
|| ¿Lo necesitas como una flor de verdad? || Maxwell comienza a reír, y no puedo evitar unirme a la risa. Tengo una amplia sonrisa en mi rostro, mientras Bertrand solo nos mira con enojo.
|| Muy bien... ¿Cuál es el itinerario? || pregunto.
|| Seguiremos uno de los senderos de caza históricos que usaba la vieja nobleza. Es muy antiguo, incluso antes de que existiera Cordonia. Los nobles cazaban a su presa por estos senderos || explica Bertrand enderezándose el traje con total naturalidad.
|| Para tenerlo claro, no vamos a cazar nada, ¿verdad? || pregunto.
|| Claro que no, la caza está prohibida en estos días. Además, la peligrosa vida salvaje ha emigrado a otros lugares en los años transcurridos desde las grandes Cazas Reales de los siglos pasados. En su lugar, estarás cabalgando por algunos de los campos más hermosos de Cordonia, tal y como lo hemos estado haciendo por los alrededores || responde Bertrand mientras que Maxwell me mira con felicidad.
|| Muy bien, será mejor que te bañes, mi Flor. Anita debe estar por venir para ayudarte. Dentro de un momento nos iremos juntos a desayunar, para luego ir a la boutique y seleccionar tu traje || me dice Maxwell mientras me abraza.
|| Gracias, Max ||
|| Nos encontramos dentro de poco, Lady Riley... Maxwell, no la hagas llegar tarde || comenta Bertrand.
|| Claro que no, hermano || responde Maxwell, sonriéndole.
**
Momentos después, Maxwell me arrastró fuera de la habitación con prisa para llegar rápidamente a la boutique. En el camino, justo por uno de los tantos pasillos, nos encontramos con Hana.
|| Hola, Riley, Maxwell, Duque Bertrand || nos saluda con una sonrisa y una reverencia.
|| Hola, Hana. Qué bonito tu traje, se ve muy elegante || le digo, observándola de arriba abajo. Noté que lleva botas de montar negras pulidas a la perfección, pantalones color café, una camisa blanca y una chaqueta azul brillante.
ESTÁS LEYENDO
Una Princesa Real (Libro1)
Romantizm¿Es posible experimentar un amor apasionado cuando se ha perdido la fe en él por completo? Riley, una joven camarera de Nueva York, ha enfrentado la adversidad a lo largo de su difícil vida. Sin embargo, un encuentro fortuito con un apuesto príncipe...