San Maximiliano (Wosplik)

El día de los sentimientos encontrados

Un molesto movimiento en mi hombro trataba de despertarme, supongo que era Valentín tratando que me levantara para ir a las duchas y poder tener su baño exageradamente largo.

Levantarme tan temprano cada día me estaba cansando, al inicio era lindo, íbamos solo los dos y podíamos estar tranquilos. Pero ahora que el cansancio me pasa la factura pienso que es mejor idea ir más tarde.

Pero, como siempre, terminé cediendo ante Valentín. De mala gana me levanté, tomándome un tiempo para ubicarme, estirarme y acostumbrarme a no estar dormido. Ya más de una vez he hecho o dicho una estupidez por saltarme esa última parte.

Tomé mis cosas y caminé de la mano con Valentín hasta el baño. Desde que somos oficialmente novios Valen no escatima en dejar claro que estamos juntos. No creo que haya persona en este hospital que no sepa ya que somos novios.

- ¡Oh por Dios!- soltó Valentín al abrir la puerta.

Yo no entendía su comentario, así que iba a girar mi vista hacia el frente, pero él cubrió mis ojos con sus manos.

- Vamos Valentín, no es para tanto- oí como Dani le respondía-. ¿Me vas a decir que nunca lo han hecho?- preguntó esta vez.

- ¿Hacer qué?- pregunté yo sin entender, ya que Valen no había movido sus manos de mis ojos, y tratar de quitarlo sería inútil.

- Holaaa Manuu- dijo Mateo alegre.

- Hola Teo- dije ahora más confundido.

- ¿Le respondés vos al nene o lo hago yo?- dijo Dani.

- No, no le digás, no quiero que se haga esa imagen en su cabecita sana- dijo Valen con un tono de voz perturbado.

- Exagerás, no es para tanto- dijo esta vez Mateo.

- Lo siento si la imagen de mi mejor amigo y su novio duchándose juntos me perturba, además no es algo que quiero que Manu vea- respondió Valen sin darse cuenta de que delató lo que pasaba.

- Ishshshshsh te cagaste Valen, ya le diste la imagen mental- dijo ahora Dani, soltando una carcajada al final.

Podía sentir como mi cara se ponía roja, no quería imaginarmelo pero no pude evitarlo.

- Esperamos a que terminen afuera- dijo Valentín arrastrándonos a ambos afuera.

Ahí finalmente quitó sus manos de mis ojos, permitiéndoles a estos volver a percibir lo que ocurría alrededor.

- Siento que te hayas dado cuenta de eso- dijo realmente apenado, señalando la puerta de las duchas.

- Está bien, en realidad no es para tanto- dije sonrojándome otra vez.

Valen solo sonrió un poco, pero en su rostro aún se podía notar que estaba avergonzado por lo que había pasado.

Esperamos un rato hasta que los dos chicos salieron de las duchas, se les veía bastante divertidos por la situación, nada parecido al pobre de Valentín, que aún no quitaba su cara de perturbación.

- Listo, las duchas están libres para ustedes- dijo Teo muy feliz y más calmado de lo usual.

- Disfruten la ducha juntos, realmente se los recomiendo, ayuda a estrechar lazos- dijo Dani cuando ya iban unos pasos lejos, al tiempo que se despedía con su mano y se reía un poco.

Valentín por su parte solo se puso rojo hasta las orejas y entró sin decir nada. Siento que se estaba comportando muy raro acerca del asunto, pero bueno, todo el mundo aquí es raro, así que no debería sorprenderme.

Me lavé mis dientes e iba a entrar a uno de las duchas cuando vi a Valen asomarse a través de la puerta de una de ellas. Su rostro se encontraba rojo y no se atrevía a mirarme al rostro.