Pαяα Sιємρяє/ Vαlєηтιηα II/

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-Para para- me aleje de Mateo, sentándome a su lado.

-Perdona, no debí besarte.- me miró con pena.

-No no, no es eso Matu. Puedes besarme todo lo que queras, pero posta quiero ir despacio.- el asintió y me abrazó.

-Queres ver otra peli, esta es malarda- me pregunto.

-Dale busca alguna de terror- acote.

-Sabes que me dan mucho miedo Valentina.- hizo puchero, yo le miré igual- Está bien, una de terror. Esta noche no se como dormiré solo.

-Quedate aca.- el me miró sonriendo.

-Me decís enserio?- yo asentí con una sonrisa.

-Bueno dale, pone la peli.

Elegimos Annabelle, alto cagaso de película. Mateo estaba tumbado hacia arriba, yo encima de él, con mi cara en su cuello mientras me abrazaba y me daba mimos en mi espalda.

Hubo una parte en la película en la que Mateo salto del susto, me pareció lo más tierno así que lo abracé y bese su mandíbula, acarie sus rulos para tranquilizarlo.

-Beba, Géminis está llorando.- yo asentí para levantarme- No deja, voy yo.

Se paró dejándome tumbada en el sofá, y recibí un mensaje de ig. Cuando lo abrí pude ver que era Agustín.

Agus2109

Ey qué onda linda

Todo piola vos?

Igual, quería avisarte que mañana ya estoy por allá.

U que bueno

Querés que nos veamos?

Dale, tipo 18 en el puente de la boca.

Dale, nos vemos linda😘

Acepté verme con Agustín por curiosidad, llevaba semanas hablándome con el y aún no lo conocí en persona.

No es que vaya a pasar nada, yo ahora quiero centrarme en Mateo. Pero no está mal conocer gente nueva.

Deje mi cel al lado cuando vi a Mateo con la beba en brazos, haciendo el avión.

-Que andaban haciendo, tardaron banda- pregunté.

-La nena se hizo caca y el papi la tuvo que limpiar.- yo rei.

-Que papá más bueno y lindo- mordí mi labio sonriendo.

-Viste? Por eso hay que tener otro- casi me atragantó con mi propia saliba.

-Mateo, espera que Gemí sea más grandecita, y que vos y yo ya estemos en una relación seria- hablé.

-Vale, pero lo quiero pronto. Un nene.- yo sonreí.

Se acercó con Géminis en brazos y me besó , y como no la celosa de mi hija puso la mano en medio y se abrazo a Mateo.

-Tu papá no es sólo tuyo sabes turrita?- le hablé riendo, ella me miraba sería.

-Buee, papi solo de vos mi nena.- yo lo miré seria- y de la mama también, un poquito aunque sea.

-Vengan aca- abrí mis brazos y Mateo se tumbó encima de mi colocando a Gemí en mi pecho.

Era completamente feliz ahora mismo, y deseaba con ansias que llegara el día donde podamos volver a ser una familia unida.

-¿ Sos feliz?- me pregunto Mateo.

-Si, ahora mismo si. Los tengo a los dos y me encanta poder estar bien con vos. ¿ Vos sos feliz?

-No del todo- yo le miré con el ceño fruncido- necesito saber que sos mi mujer, necesito saber que ningún otro pibe va a tocarte sin que sea yo.

-Matu, sos el único que voy a permitir que me toque, pero démonos tiempo, volvamos a tener la misma magia que antes.

El asintió. Se tumbó de nuevo en mi pecho junto con nuestra hija, mientras les hacía mimos a los dos quedaron completamente dormidos.
Son iguales.

Decidí dormir yo también, y descansar un poco mi mente.