Saga De Las Crónicas de Narnia

prólogo

Capítulo 1

"Antes del invierno eterno"

Narrador Omnisciente

En otro mundo, en donde la magia era real, una humana se encontraba muy débil por la traición de su padre, que la había apuñalado y como pudo llegó al campamento de los Faunos pidiéndo por su ayuda.

-por favor, cuiden de mi hija- pidió débilmente, los Faunos que se acercaron con cuidado a ella la sujetarla cuando cayó inconsciente.

-¿Señorita?- pregunto preocupado uno de los seres mirandola pero esta no respondió más, para seguido escucharse el llanto de una niña.

Los Faunos se miraron entre ellos y tomaron a la niña llevándosela al Gran León, sin saber a quien más acudir.

Luego de haber dejado que el río se llevara el cuerpo de la mujer, las mujeres Fauno dejaban flores que flotaban a su lado dejaron que él río se llevara a la mujer a la tierra de Aslan, donde podría descansar eternamente.

Fueron a donde se encontraba el Gran León con la niña en brazos, y luego de explicar lo que sucedió esperaron que el León diera el veredicto.

-la cuidaremos- dijo el Gran León mirando como la pequeña niña estaba en una cuna improvisada mirando con sus grandes ojos azules a su alrededor.

-es la hija de Eva más bella- dijo una centauro que estaba acostada junto a la cuna cuidándola.

-Afrodita, espero de que me prestes tu ayuda para poder criar de esta niña- pidió amable el león mirando a la rubia que asintió alagada.

Así fue como la vida de esa niña comenzó creciendo con rebosante felicidad, con amigos curiosos, creciendo siendo sabía, amable, bondadosa, llena de gracia, una futura reina igual de sabia y Justa como Aslan.

Seis años despues.

Una niña de siete años estaba escondida dentro de unas carpas vacías tapando su boca ahogando su risa.

Un Gran León por su parte estaba fuera de ésta, buscando el rastro de la pequeña criatura, soltando pequeñas gruñidos al caminar olfateando el suelo, fue cuando oyó como alguien corría hacia el interior del bosque, a lo que no dudo en ir tras esa personita, corriendo tras ella para saltar y rugir para escucharse un grito bastante agudo.

-¡¡Jajaja ya!! ¡¡Papá!!- reía la niña intentando apartar a su padre de arriba suyo. -¡esta bien! Jajajaja papá~ -reía mientras resivia "golpes" de la pata del león que reía también dándose vuelta haciendo que la pequeña niña quedará arriba de el que se sostuvo del pecho del León- ¡Sii! ¡Yo soy la vencedora del gran león!- decía divertida abrazando a su padre que se levantó para juntar sus frentes como solían hacer.

-hay que volver, debes seguir tus estudios- dijo sonriendo el león caminando junto a la niña.

-pero ya lo sé~ las estrellas, las Leyendas, las historias de Adán y Eva- dijo sonriendo orgullosa.

-si pero siempre hay algo nuevo por aprender- dijo empujandola levemente hacia los centauros. -además, de que nunca termina así de saber sobre las estrellas -le dijo divertido y ella reía bajo.

-te amo papá- dijo abrazandolo.

-yo igual te amo, Charlotte -dijo abrazandola con una de sus patas.