ATRAPADA A ÉL

Parte 25

Narrador Levana 

Cuando desperté  aún me encontraba en sus brazos, su rostro de él era relajado se veía como un ángel hermoso, sin embargo, su personalidad era como la de un demonio,sus ojos tienen un bello color como el agua, pero con toda esa belleza exterior  no puedo quererlo.

-Vamos tenemos clases- se alejó de mi y automáticamente salí  corriendo y fui  directamente a mi habitación a encerrarme. 

Después de una hora ya estaba lista para enfrentar las miradas de mis amigos y compañeros, de repente alguien jaló mi mano e  intentando soltar mi mano de la de él.

-¿Por qué lo haces más difícil?- pregunté mirándole a los ojos.

-Porque no quiero que nadie mire lo que es mío-contestó molesto 

-No soy algo tuyo- afirmé, no me gusta la manera en la que él cuando afirma que le pertenezco. 

-Eres mi novia y vas hacer dentro de muy poco mi esposa- y jalando con fuerza me llevó  fuera del edificio de los brigadieres y mientras caminábamos  en los pasillos muchos compañeros  nos miraban,  me sentía rara y avergonzada estar a lado de él y hacia que me sintiera muy pequeña, aunque eso si es verdad él sobresalía por su 1.92 de estatura y yo con 1.63 me veía muy pequeña a lado de él.

Cuando llegamos a la cafetería un silencio rotundo inundo el lugar todos nos miraban, soltándome las manos se adelantó y fue a la mesa donde estaban sus amigos, detrás de él seguí yo fui a una mesa lejos de mis amigos parecían que no querían estar conmigo estaba sola nadie decía nada solo de vez en cuando me miraban, sin poder aguantar más, me levante y tomé mis cosas para salir de la cafetería.

Todas las mañanas de esa semana eran lo mismo miradas de aquí aya nadie me hablaba y en las noches eran peor sus besos forzados y abrazos de Ryan me hacían sentirme sucia, quería que mi vida volviera a la normalidad.

............

Cuando llegó domingo me dieron permiso para salir ya que los padres Ryan solicitaron el permiso.

Esa mañana también fue terrible mis padres que no dejaban de hostigarme en preguntarme porque había decidido casarme con ese tipo de chico, bueno dejaron el tema cuando tuvimos que arreglarnos para ir a la casa de los Relish.

Mi madre me arregló con el peinado y maquillaje y el vestido ya lo tenía comprado cuando fui de vacaciones,  pero nunca en vida me hubiera imaginado usar este vestido en esta situación yo pensé usarlo en la graduación.

-Te ves hermosa,sin embargo te noto triste ¿Dime que pasa confía en mí?-se había suavizado en sus palabras, quería decirle todo lo que había hecho ese bastardo, pero temía por la vida de mis papas, él ya me amenazó  diciéndome que sí hablaba algo sus hombres estaban vigilando mi casa y como no creerle si había un auto estacionado toda esta mañana al frente de nuestra casa.

-No me pasa nada-trate de sonreír aunque quería llorar.

-Segura, estoy aquí para que me digas lo que pasa- aún seguía mi mamá tratando que le día algo y sin poder contener mas solté lagrimas y sollozos.

-Oh tranquila, aquí está tu mamá no dudes en contarme qué es lo que te ha hecho ese joven- dijo mientras me abrazaba.

-Nada mamá nada....-trataba de decirle otra mentira para no poder decir lo que realmente me ha hecho pasar.

-¿Estas segura? y ¿Por qué lloras?- preguntó mirándome ahora a los ojos.

-Solo estoy nerviosa- de nuevo me recompuse no quería que ellos se preocuparán, me limpie mi cara con una toalla.

-De nuevo te diré ésto, no dudes en decirnos la verdad-Habló mi mamá 

-Sí- afirmé y sonreía falsamente.

-Ven de nuevo te arreglaré- me señalo la silla de mi peinador para que me sentará.

- Lo siento, lo he malogrado-contesté y de nuevo ella me arreglaba.

-Oh mi niña ya creció te diré que yo estaba igual de nerviosa cuando su familia de tu padre conocería a la mía- decía mientras me pasaba el labial en mi labios. 

Después de una hora de escuchar como fue la pedida de mano de mis papas y su casamiento, me sentí feliz al saber que nací de un amor puro.

Una lemosina nos recogió de nuestra casa aún sorprendidos recibí una llamada de Ryan que subiéramos en ella.

Cuando llegamos su casa era como un palacio una gran entrada y luego parecía un palacio aún sorprendida el ama de llaves nos llevo a su entrada ahí estaban ellos esperándonos, sus padres muy bien vestidos y con porte de elegancia.

Con nervios los salude, mis padres también los saludaron sabían que ellos también estaban nerviosos al igual que yo, pero no lo dejaban ver, nos dirigimos hacia adentro sus lujos y todo era muy hermoso parecía de ensueño nos hicieron pasar a la sala principal.

Mis padres se sentaron conmigo en un mismo mueble sus padres de Ryan también estaban sentados junto mientras que él se sentó en el otro mueble aún nerviosa ya que su madre al igual que sus padres me miraban de arriba abajo claro siendo disimulados y podía notar eso en su miradas.

Después de una hora de formalidades y cortesías. 

-Cuéntame querida qué es lo que te gusta de mi hijo-Iris Relish madre de Ryan, me había hecho una pregunta muy difícil de contestar y poniéndome nerviosa no sabía que decir, si no decía nada pronto se desataría la guerra y Ryan estaba tan atento que su mirada me quemaba.