ATRAPADA A ÉL

Parte 33

NARRADOR LEVANA

Luchaba con todas mis fuerzas lanzaba patadas al aire, trataba de  arañarlo sin embargo su peso y sus manos en mis brazos me impedían no podía quitarlo de encima mientras me estaba besando y lo único opte fue morderle fuerte su labio inferior, de inmediato paro le salia bastante sangre.

-Eres una gatita salvaje, me gusta- se empezó a reír como loco, mientras que las gotas de sangre caían sobre mi.

-¡Auxilio!- empecé a gritar con todas mis fuerzas las lagrimas me impedían ver.

De repente sentí un fuerte golpe en mi pómulo izquierdo, dejándome algo mareada.

-Tu así  has querido a las malas, te dije que consumiríamos nuestro amor en la noche de bodas pero ahora se adelanto- Mi vista estaba algo borrosa, solo podía escuchar esa voz gruesa propia de él cuando se enoja.

Cansada de tanto luchar y gritar él hacia lo quería con mi cuerpo, me había besado lamido por todo mi cuerpo y manoseado lo peor vino después cuando había roto toda la pureza que me quedaba, pude sentir un fuerte dolor en mi partes intimas cada vez que él entraba en mi, escucharlo gemir era tan asqueroso, mientras él disfrutaba para mi era era una gran tortura solo deseaba morir, cansada de luchar y sentir los dolores de haber sido violada, quede inconsciente.

Cuando desperté, vi que él estaba a lado mío, me levante sin hacer ruido él estaba dormido me dolía mi cuerpo y sobre todo abajo observe que estaba sangre seca y algo blanco que bajaba de mi entrepierna, tome mi vestido roto buscaba las llaves y cuando las encontré a lado de la cómoda él me sujeto mi mano.

-¿Qué haces? intentas escapar mi pequeño conejito- dijo el demonio que había quitado lo mas puro que tenia, en ese momento quería que se muera. 

-Suéltame asqueroso-mis lagrimas salían y empecé a gritar de pronto él se paro estaba desnudo y sin importarle su condición me agarro las dos manos.

-Entiende esto, tu eres mía y créeme que no dejare que te escapes- dijo dejándome sorprendida, a caso sabia lo que tenia planeado y como se había enterado.

-Se todo de ti y se muy bien que tenias planeado alejarte de mi y eso nunca lo permitiré-dijo mientras me miraba atentamente.

-Déjame ir ahora, ya has tenido lo que querías- dije entre lagrimas, quería desaparecer en ese momento.

-Tu crees que solo quería tener sexo contigo, esto va mas allá, yo quiero todo de ti y no me cansare de que estés a mi lado- y diciéndome esto me quito de las manos el vestido dejándome expuesta ante él mi cabello cubría mi pechos y de inmediato mis manos taparon mi zona intima. 

-No te escondas de mi pequeña ya he visto todo de ti- dijo mientras me miraba de pies a cabeza y jalándome y tratando de detenerlo él me cargo a la fuerza llevándome al cuarto de baño, me coloco debajo de la ducha.

-Nos bañaremos para irnos- y de repente el paso su mano por mi entrepierna y cogió con su mano ese liquido blanco y mi sangre sangre

-Déjame ir por favor- suplicaba pero él no me hacia caso cuando termino la ducha me puso una toalla encima.

-Colócate esto, nos vamos a ir- dijo con su tono y mirada fría.