Habían varias cosas que yo amaba de la secundaria y esas eran poder compartir todo esto con mis compañeros, Gitano y Enzo seguían siendo tan payasos como la primera vez que les hable, Sara era también alguien a quien yo podía recurrir en cualquier momento y era mi compinche en mis travesuras luego estaban las chicas del curso que completaban el círculo social. Candela por otro lado era la parte sería de mi vida, en lo académico, en su vida ella era tan inestable que tenía algo de temor sobre su futuras relaciones, era un temor frecuente.
-Entonces es oficial?- Sara estuvo animandome todo este tiempo sobre el chico que había conocido en esa reunión de Gustavo.
-Yo podría decir que sí- dije algo desanimada, tenía algo de pena con él todavía.
-Que sucede?- me miró curiosa, ni yo sabía que sucedía conmigo solo no era tan genial como yo pensé que sería.
-Es que pienso que debería ser más...- me detuve al ver a Candela entrar y acercarse.
-De qué hablan?- ella sonreía tan tranquila como siempre.
-De qué por fin se le dió a Laura- empezó Sara.
-Asi? Que se le dió?- ella nos miró a ambas.
-Que por fin tiene novio- celebro Sara y yo me puse algo roja, Candela me miró mas detenidamente y sonrió.
-Eso es bueno no?- me pregunto- que bien- suspiré.
-Si, es bueno- sonreí apenas.
-Que sucede?- odiaba cuando ella lo hacía de este modo, me miraba con mucha atención y suavizaba su voz para hacerla más amigable, era difícil no decirle lo que quería, así deben sentirse sus chicas.
-Yo tengo algo de pena- dije.
-De qué?- si ella seguía así, yo al final terminaría por aceptar que esto no me entusiasmaba mucho.
-Es que Lau...- Sara trataba de decirlo de una manera no tan brusca pero hasta mí me apenaba- bueno ella...
-Que podría ser tan malo?- Ella todavía no dejaba de mirarme- tener pareja es completamente normal.
-Yo no sé besar- sentía que mi cara hervía de la pena, Candela perdió la expresión y parecía querer decir algo pero le costaba.
-Nunca has besado?- me miró interesada
-No, bueno solo algunos picos pero nada muy... Cómo se supone que debe ser un beso.
-Pero entonces si no sabes besar tampoco sabes...- se detuvo, pero ya sabía muy bien a dónde iba- Lau eres virgen?- yo estaba oficialmente avergonzada y me tape la cara de inmediato- Lo siento, lo siento- Candela se acercó un poco más y tocó mi brazo de forma suave- perdón no quise ser idiota, Lau?.
-Esta bien, no importa- me empecé a esconder aún más.
-Lo siento- ella no paraba de disculparse- Lau escucha eso es algo lindo, es... es... es algo bonito, significa que...- ella no podía encontrar palabras y eso me sorprendía porque por primera vez veía a Candela sin respuestas.
-Ya...- cada vez me sentía un poco más avergonzada.
-Lau, escúchame no tiene nada de malo- seguia tocando mi brazo y luego mi mano entre las suyas, era cálido y lindo- no todo tiene que ser apresurado, ni tampoco hay algo que diga cuando debes experimentar esas sensaciones, solo depende de ti, si? Cómo y cuando lo determinas tú, nadie más, perdoname por ser idiota- me sentí mucho mejor después de eso, hasta diría comprendida y feliz.
-Son tan lindas cuando se ponen en ese plan- otra vez, Sara, suspiró y luego volvió a abrir la boca- no sería lindo que le enseñarás Candela?- ella soltó mi mano pero no de manera apresurada sino siendo delicada y finalmente mirando a la entrada.
-Es suficiente- vimos a la profesora llegar- yo... - otra vez se quedó sin respuestas, pero está vez la profesora empezó su clase, dejando atrás nuestra conversación.
Me quedé todo el resto del día pensando en lo que dijo Candela y como se comportó en ese momento.
No fue hasta la noche que todo lo que tenía en la cabeza iba haciéndose más y más grande.
***
-No sabes besar...- era ella, Candela- debes ser delicada- yo por alguna razón estaba apoyada en ella, con mis manos cerca de su cuerpo y me sostenía suavemente.
Era tan real, yo sentía sus labios sobre los míos, su perfume, su calor. Esta sensación es única, sus labios guiando a los míos en sincronía, su lengua acariciando la mía y haciendo que piense solo en ella, es Candela.
Es Candela, y eso no podía ser, es ella y no debía ser así, debería ser mi novio, debería ser un chico y no Candela, me reproche.
No puede ser Candela!
***
Me desperté algo asustada y con la respiración agitada, yo acababa de soñar que me besaba con Candela, toque mis labios y trague saliva, esto no... no... Solo fue un sueño, un sueño extraño y nada más.
Al día siguiente nada parecía normal, en principio Candela llegó tarde, algo nunca antes visto, después Sara y yo decidimos quedarnos en el curso, así podría distraerme un poco más lejos de lo que sea que Candela provoque en mí.
-Ya dime porque estás tan callada?- Sara me miró curiosa.
-No es nada, solo... Estoy pensativa- suspiré- el sábado tendremos una cita.
-Eso es bueno no?
-Si, lo es- mire por la ventana, ya iban a llegar las chicas del otro turno a sus clases de gimnasia- y si no es como yo imagino?
-Hmmm pues no lo sabrás si no le das una oportunidad.
Vimos como empezaban a entrar todos al curso después de la campana.
Candela se sentó a mi lado y se mantuvo callada mientras sacaba sus cosas.
-Algún consejo Candela?- comenzó Sara.
-Sobre?- ella la miro algo curiosa.
-Lau tendrá una cita este sábado y está algo nerviosa podrías darle algún consejo, ya sabes de rompecorazones a novata.
-Eres una exagerada- reviró los ojos- no hay nada que le pueda aconsejar, solo debe ser ella misma y no dejarse presionar.
-Esperaba mas- bufo.
-Bueno quisiera saber que tienes tú qué decir sobre eso?
-Pues no sé- se puso a pensar- que no sea tan predispuesta a cualquier cosa que él quiera, o no lo bese ella ya que no sabe.
-Ya Sara- me puse algo avergonzada.
-Enserio no sabes?- otra vez Candela con esa pregunta, me puse incomoda ya que recordé el sueño, negué débilmente.
-No, bueno me imagino que debo ser delicada- Candela ahora parecía algo incómoda y sus mejillas se colorearon.
-Uy que tenso- Sara disfrutaba de esto sin duda.
-Si, debes ser delicada- yo diría que ella no sabía dónde mirar, fue un alivio para ambas ver qué el profesor ya estaba cruzando la puerta.
ESTÁS LEYENDO
El amor de mi mejor amiga
Teen FictionEs la historia de dos chicas que se conocieron en la secundaria Laura vivía en su mundo de fantasía hasta que le tocó junto a varios de sus compañeros cambiar de salón por temas de espacio. Su vida da un giro cuando empieza a sentir curiosidad por u...