3. Una buena razón

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Creo que hablé demasiado rápido respecto a mi vida, sigue siendo la misma miseria de siempre. Kate le había mencionado a mi mamá que me estaba juntando con muchos muchachos, sin ninguna chica, ¿Qué hay de malo con eso?, no lo sé y me interesa mucho por qué ella piensa que estoy haciendo cosas malas, en fin, me quitaron los permisos y me amenazaron con sacarme de la escuela si seguía juntándome con ellos sin siquiera conocerlos....

Esa es la razón por la cual ahora mismo me encuentro almorzando sola. Había estado evitando a los chicos durante tres días, los cuales se habían hecho largamente aburridos, sofocantes y estresantes...gracias madre querida.

El resto de mi día me concentré en las clases, en los pequeños descansos Bon Jovi fue mi mejor amigo... ¿Solo a mí se me dificultaba decir su nombre completo? Me refiero a que es como un trabalenguas, John Bon Jovi para mí era un nombre bastante difícil de pronunciar.

Bon Jovonyi, Bon John Jovi, John John jovi, miles de malas pronunciaciones salieron de mi boca, y para no hacer el ridículo lo llamaba como todos, Bon Jovi, no pensé que un nombre tan corto me traería tantos problemas

(...)

"We've got to hold on to what we've got
It doesn't make a difference if we make it or not
We've got each other and that's a lot for love
We'll give it a shot
Woah, we're halfway there
Woah-oh, livin' on a prayer
Take my hand, we'll make it, I swear
Woah-oh, livin' on a prayer..."

Me cortaron la inspiración cuando el profesor se aparcó frente a mí, mirándome.

—Señorita, salga de mi clase si no va a prestar atención—¿en qué momento había llegado? Diablos. Bajo la mirada expectante de todos salí del salón, moría de vergüenza y tenía ganas de llorar, en la vida me habían sacado del salón y no me imagine que así sería la primera vez.

Me senté a unos cuantos metros de la puerta por la que había salido, volví a conectar mis auriculares y cerré mis ojos conteniendo mi respiración unos momentos para luego suspirar largamente. ¿Llamarían a mi madre?, sino lo hacían ¿le diría?, estaba claro que no, además, solo me sacaron del aula, ningún reporte, citatorio o algo por el estilo, creo yo que no había problema.

El resto de la hora la pase escuchando a The Beatles, The cure, Madona, David bb, y bueno, no fue tan malo después de todo. Cuando la campana sonó todos salieron de los salones para ir a sus siguientes clases y pues yo me levanté y también lo hice. De mala gana llegué a ciencias sociales, la materia más fácil del mundo, siempre aprobaba con diez, eran los mismos temas y artículos básicos de la constitución.

—Hader, ¿en una situación en donde tu compañero Stanley esta lastimado y tiene problemas con dinero que haces?—vaya ejemplos más raros.

—Claramente lo llevaría con un médico a ser revisado y respecto con el dinero creo que sería un tema donde debería hablar con sus padres— el profesor sonrió satisfecho, ¿Qué?, solo debías pensar en una respuesta aburrida y respetando las normas porque creo que en un caso donde verdaderamente ocurriera eso, lo curaría yo misma y le daría mis ahorros, que se yo. Todo por un amigo y no echarlo de cabeza a un problema que podía ahorrarse.

Cuando la clase llegó a su fin todos salimos de ahí rumbo a la salida. En el transcurso uno que otro se burlaba por lo ocurrido en la clase antepasada, pareciera que no tenían nada bueno que hacer con sus vidas, yo tampoco, pero al menos no me estaba riendo de alguien más.

Estaba realmente cansada, me sentía ajena a todos aquellos que me rodeaban, me sentía bastante irritada por lo cual comenzaba a exasperarme.

Mordí mis labios quitándome la capa exterior que los cubría, sintiendo ardor en ellos, sin embargo no deje de hacerlo y al llegar por fin a la puerta para salir del infierno el sol me deslumbro, cuando me acostumbré a ello comencé a caminar bajo la mirada de los 5 chicos que estaban bajo el mismo árbol de siempre. Los miré por un segundo, dudando en ir, pero seguí mi camino al darme cuenta que mi madre estaba a unos metros de mi montada en el auto, ¿Qué hacía aquí? Tenía muchas preguntas y ninguna respuesta, a pesar de eso me subí al carro sin decir nada y al estar frente a mi casa, me bajé y fui directo a mi habitación recostándome al instante en mi cama, sintiendo el calor abrazador de mis cobijas, me tiré al suelo sintiendo lo fresco que estaba y me quede ahí, mirando el techo blanco, después de eso me quedé dormida.

𝐒𝐂𝐀𝐑 - 𝐑𝐈𝐂𝐇𝐈𝐄 𝐓𝐎𝐙𝐈𝐄𝐑 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora