Cuando abrí los ojos, estaba en casa de Félix, el sueño había sido aburrido así que había decidido venirme temprano, miré un rato televisión y de repente sentí olor a huevos revueltos. Me duché, me vestí y bajé, al llegar estaba solo Samantha y Jennifer.
-Buenos días- dije sonriente, solo Jennifer me contestó- ¿y Félix?- pregunté, esta pregunta ya se me hacía habitual, eran pocas las veces que llegaba y se encontraba en casa.
- Ha ido a buscar a Franccesca- dijo.
-Ahora tendrás que compartirlo porque al parecer ella es su nueva novia- dijo Samantha con tono engreído luego Jennifer la calló.
Aun cuando agradecía que callara, las cosas no cambiaban ¿en verdad ella era su novia?, tal vez me había equivocado con celarlo, al parecer él en verdad iba enserio con Franccesca y no le importaba lo que yo hiciera con mi vida.
Ángel llegó temprano junto a Félix y su "nueva novia" Franccesca, yo no quise bajar al almuerzo y mentí con que no me sentía bien del estómago, realmente, me sentía mal pero era emocionalmente.
-¿Puedo pasar?- era la voz de Ángel.
-Sí, obvio- contesté desde mi cama.
-Amira, sé que debes sentirte mal de verlos siempre juntos, sigo creyendo que le gustas, tienes que jugártela , él es así, algo arrogante-.
-Por favor no me des más consejos, solo déjame tranquila- dije; entonces no aguanté las ganas , me di vuelta hacia la pared y empecé a llorar.
-No llores- dijo- tranquila chiquita, él es un tonto, él lo hace porque... bueno en realidad no lo sé, pero él es un buen chico, tal vez tiene miedo, ya verás que se alejará de ella, si Franccesca lleva años buscándolo y a Félix en realidad no le gusta-.
-Basta, ya no importa, gracias en todo caso, además Franccesca es su...-
-Permiso- dijo Félix desde la puerta- Ángel mi hermana te anda buscando y no creo que le agrade mucho verte aquí-.
-Ya voy- me miró y en tono bajo comentó- hablamos después- me sonrió y se marchó. Félix por su parte me miró y sin decir nada también se marchó.
En la noche hablé con Jennifer cuando todos se habían marchado a dar un concierto y le dije que no volvería hasta las vacaciones, pues tendría los últimos exámenes estas semanas y estaría muy atareada, en cierto punto era verdad, aunque podría haberme hecho un tiempo, ella solo se despidió y dijo que ojalá nos viéramos pronto, la abracé y asentí, ella en verdad era muy maternal, la extrañaría, sabía que Nadia la había elegido para cuidarme porque sabía que la querría muy rápido, entonces tras la despedida me dispuse a volver a casa.
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El chico de mis sueños
Romance¿Existen límites para el amor? ¿Cuánto cuesta hacer realidad un sueño? Estas son dos preguntas que se hará durante toda la historia Amira, una joven chica que está a punto de cumplir sus dieciocho años y que a pesar de un difícil pasado tiene un tr...