Capítulo 23

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Lunes en la mañana llego al instituto con el mismo humor de todos los días. Por algún milagro de la vida, Shawn no había venido con Matthew y conmigo, así que el trayecto hacia aquí fue silencioso y aburrido y con el no tan buen gusto musical de mi hermano de fondo.

Abro mi casillero y me aseguro de sacar y meter lo que usaría y no. Cuando cierro la taquilla, me sobresalto al notar al rubio sonriéndome.

—Pude haber muerdo por tu culpa —digo dramáticamente.

—Ay, ya, y yo soy gay —rueda los ojos.

—Eso sería genial —digo emocionada, moviendo las manos.

—No, claro que no —dice horrorizado —Tengo una reputación que mantener.

—¿Acaso eres homofóbico? —hago una mueca.

—¿Qué? No. Por supuesto que no —exclama —Si fuera gay, todo el mundo ya lo sabría, pero no lo soy. Punto.

—Ya, dramático —murmuro con burla.

—Como sea. Vine porque tengo que contarte algo —se coloca frente a mí.

—Bien, porque yo también tengo algo que contarte.

—¿Y qué es? —pregunta obvio.

—Tú dime primero. Tú empezaste.

Thomas rueda los ojos antes de hablar —Teonoia.

—¿Qué? —hago una mueca sin haber entendido ni una palabra de lo que dijo —Vocaliza, Thomas, vocaliza —pido.

Él me mira serio y bufa —Que tengo novia.

Abro la boca, sin poder contener mi sorpresa ante tal noticia. ¿Thomas Flynn con novia? Eso no lo había visto venir, aunque ya tenía mis sospechas sobre alguna chica desde hace unos días.

Sonrío pícaramente y lo codeó, sin dejar de mirarlo como maniática.

—Deja de mirarme así. Solo te lo cuento porque eres mi amiga y quiero que sepas esto de mí.

—Es Maddie ¿verdad?

—No, es- —se interrumpe a sí mismo y luego voltea a verme juntando las cejas —¿Cómo sabes?

Me encojo de hombros, restándole importancia con una sonrisa de lado —Los encontré follando en el baño, ¿recuerdas? No es difícil sacar conclusiones. Además que el viernes, cuando ganaron el partido, los vi bien abrazaditos... Esa fue la cereza del pastel —señalo.

—¿Entonces si lo sabías? —me mira confundido.

—Nop, la verdad solo pensaba que ambos estaban teniendo sus encuentros sexuales o algo parecido, pero si tú vienes y me dices que tienes novia, entonces ahí yo recién sé que es Maddie.

Thomas me mira pensativo —Mmm, muy inteligente, Parker.

—Lo sé —sonrío orgullosa.

—Bueno, tu turno. ¿Qué era eso que tienes que decirme?

El timbre suena, y miro a mi amigo con una mueca. Él bufa. 

—A la hora del almuerzo te lo digo —aseguro —Nos vemos. —me despido alejándome hacia el salón de biología.

A mitad de la clase, me comienzo a aburrir y pienso en Charli y en lo divertido que fue cuando estuvo aquí. Tristemente tuvo que volver a Florida porque tenía clases en la universidad y no podía faltar más días.

Unas horas después, la campana indica que es tiempo que mi estómago ingiriera algo de comida, y soy una de las primeras personas en salir del salón de Matemáticas. Le sonrío a Thompson antes de atravesar la puerta y corro hacia la cafetería.

Particular Taste (Shawn Mendes)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora