Media hora ha pasado desde que despertó, primero lavó los pocos platos que quedaron en el fregadero, aquellos eran de la cena anterior. Después decidió que un buen desayuno sería cereal con leche, y en caso de que alguien quedase con hambre preparó: tostadas con mantequilla.
Escuchó suaves pasos bajar con delicadeza, y un suave tarareo que conoce de memoria.
-¡Buenos días, hermano!-la animada voz entra a la cocina, corriendo directamente hacia él. Siente los brazos alrededor de su cintura y una suave presencia apretujando su cuerpo en un abrazo lleno de amor. Voltea para corresponder al abrazo que le fue otorgado por la menor de ojos rosas y cabellos castaños, ella sonríe de una manera en la que nadie podría hacerlo, una que lo hace sonreír de igual forma al sentir que todos sus problemas desaparecían. Tanjirou sabe que ver a su hermana contenta y sana es lo que recarga sus fuerzas para seguir adelante.
-Buenos días, Nezuko. Siéntate, ya serviré tu tasa de cereal-indica. Escucha ahora que Giyuu se acerca con pereza, colocándose un dato mentalmente de que también debe servir el desayuno de él azabache azulejo.
No tarda más de cinco minutos en colocar las tasas de cada uno sobre la superficie de madera en el comedor, exactamente son tres desayunos para los miembros de la casa (sin contar al tío Urokodaki, que aún no vuelve de su jornada). Giyuu aparece en el lugar con el fin de tomar asiento en una de las sillas que pertenecen al comedor, Nezuko imita la acción tomando lugar frente a él mayor, y al final Tanjirou se sienta junto a su hermana.
Nadie dice nada más, solo comienzan a comer. Nezuko ya parecía lista para irse a la secundaria en cuanto terminara de desayunar, como siempre ella entra un poco más temprano que los otros dos muchachos. Las notificaciones en el celular de la chica se hacen presentes y la mayoría pertenecen a él amigo pelirubio de Tanjirou.
Oh sí, los dos llegaron a conocerse hace un par de días atrás cuando la muchacha fue hasta su preparatoria porque salió temprano, Zenitsu quedó perdidamente flechado de dicha chica e intercambiaron números celulares. Claro que Tanjirou se dió cuenta que a Nezuko también le gustó de inmediato, a pesar de ella no lo dijo directamente. Conoce a su hermana, es fácil saber lo que piensa con tan solo mirarle a los ojos y preguntarle acerca de la situación.
-Hermano, Zenitsu me invitó a salir el fin semana al cine. ¿Está bien que vaya?- lla pregunta después de tragar una cucharada con cereal y leche. La petición lo sorprende pero no es quien para negarle una salida a su hermana, y mucho menos si va con alguien de confianza como Zenitsu.
