~12~

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Después de tanto esperar Jungkook salió de la habitación, respiro profundo y miro hacia ambos lados me miró a mi y sonrió levemente.

-Vamos–Se paró enfrente mío.

-¿Ya no está enojado jefe?–Pregunté y me levanté rápido.

-No importa, volvamos a la fiesta, mis padres deben estar buscandome.

Él pasó, lo seguí como he hecho últimamente, se me dío por voltear y ví al hombre que besó el cabello de Taehyung salir de la misma habitación que salió mi jefe Jungkook.

No volvimos exactamente a la fiesta, cada uno tomó un trago y salimos al balcón.

-¿Jefe puedo hacer una pregunta?–Lo miré y él suspiró pesado.

-Esta bien, hazla, veré si la respondo–Volvió la mirada al frente mirando el cielo oscuro.

Un mesero se nos acercó y ofreció una bebida. En un vaso serví tres bebidas y le sonreí al mesero dejando su charola de plata con los vasos vacíos.

-¿Asi de agrio es lo que preguntarás que debes beber tanto?–Preguntó con burla.

Dejé el vaso en la baranda y saqué un cigarrillo, lo encendí y empecé a fumar ordenando mis ideas.

-¿El novio de su hermano fue su novio?–Pregunté y lo miré, enarco una ceja y me miró, respire profundo y tome un largo trago de whisky. -Mejor pregunto, ¿su hermano le quitó su novio?.

Mi jefe frunció el ceño, miró hacia el frente y se enderezó metiendo las manos a los bolsillos.

-¿Tienes hermanos?–Preguntó fríamente.

-Ahora no–Le hablé suave.

Él negó levemente y respiro profundo. Tomé todo el resto del alcohol de un solo trago y dí una larga colada al cigarrillo.

-¿Desde cuando dejo de arder?–Preguntó sin verme.

-¿Arder que?–Me acerqué a él lo suficiente para respirar su perfume varonil.

-El whisky, lo tomas como si fuera agua–Me miró y su rostro se relajo. -¿Acostumbras a tomar?.

-Digamos que sólo cuando tengo sed, no soy de los que toman agua–Le sonreí grande y alce mis hombres restándole importancia.

-Señor sus padres quieren verlo–Dijó una empleada doméstica.

Jungkook asintió y la mujer se fue.

-Ire con mis padres, espérame aquí, ya sabes que debes hacer...

-No hablaré con nadie señor–Hice señal de cerrar mi boca y botar una llave imaginaria.

Él se fue y seguí fumando tranquilamente, nadie me podía decir lo contrario. Me asomé y ví como la familia Jeon estaba en una tarima improvisada.

Ellos sonreían y hablaban de lo feliz que se sentían por ser una familia unida. Me alejé de esa vista y saqué mi celular para llamar a mi papá.

-¿Gatito?–Preguntó.

-Si papá, soy yo.

-¿Como está la fiesta de tu novio
de mentiras?–Preguntó con
burla.

-Bien papá, la fiesta de la gente
millonaria es muy calmada–
Respiré profundo. -Papá te preguntaré
algo y quiero que me respondas
con sinceridad–Le dije sacando otro cigarrillo.

-Dime hijo, nunca te he dicho
mentiras, no tenemos secretos–Me
dijó tranquilo.

-¿Extrañas el tiempo donde
eramos una familia? antes del
divorcio con mamá–Le pregunté sin
ánimos y volviendo a fumar.

-Jimin hablamos de eso cuando
llegues a casa.

-Solo quiero un si o un no
papá, sólo eso.

-Si, extraño esos días pero no volverán nunca, así que no hay que hacer.

-Lo sé papá, ahora te dejo, viene
mi sexi novio con el ceño fruncido
pero se ve guapo.

-Siempre lo verás así gatito–Dijó
riendo.

-No tengo la culpa que sean
hermosos, chao te amo, no me
esperes.

-No lo haré, me despertaste,
también te amo.

Colgué y guarde el celular en mi bolsillo, aplaste el cigarrillo con la suela de mi zapato.

-Fumas mucho–Dijó Jungkook con las manos en los bolsillos.

-Lindo discurso de familia, si no viera como es tu hermano diría que era un angelito–Le sonreí y me paré a su lado.

-¿Tenías planes con tu novio?–Me miró y negué. -¿Si quieres irte nos vamos?.

-Hay trago gratis y es whisky caro, yo no puedo pagar una botella de esas–Le dije riendo. -Ademas mi adorable papá ya se durmió, no tengo nada que hacer.

Nos quedamos en silencio un rato, él mirando la noche y yo la fiesta.

-¿Señor?–Lo miré y él me miró. -Su madre viene.

Jungkook se volteó y vio a su madre caminar hacia nosotros con una enorme sonrisa.

-Hijo trae a tu novio, los Min están aquí–Ella sonrió con una copa de vino en su mano.

-Ya vamos madre–Jungkook sonrió ladido.

Ella se fue y Jungkook me quedó mirando de arriba a bajo y suspiró pesadamente negando.

-¿Me desarregle?–Le pregunté con el ceño fruncido.

-No es eso, eres perfecto del gusto del hijo de los Min...

-¿Como lo sabe jefe?–Le pregunté y me acerqué a él.

-Dos novios–Dijó mirando el suelo.

Al principio no entendí pero después como que los cables se unieron y me reí de él. Pero dejé de hacerlo cuando vi su cara de frustración.

-Lo siento–Me disculpé. -Yo no soy su novio de verdad jefe, así que no le quitara un tercer novio.

Me miró y sonrió ladido.

-Eso no es lo que me preocupa, es mi dignidad, soy el idiota que busca novios para otros–Respiró profundo y arregló su traje.

-Vamos jefe, usted es mejor que ellos–Le sonreí grande y lo agarré de gancho.

Entramos nuevamente a la fiesta y nos dirigimos hacia los señores Jeon, saludamos a los presentes y sí, ese hombre que dijó Jungkook era guapo. Me invito a bailar una suave melodía y Jungkook a regañadientes solto, aquí no eran celos sólo era el ego de hombre apoderándose de él.

-¿Cuanto llevas con Jungkook?–Me preguntó el hombre.

-Tres meses–Le sonreí leve.

El me miró todo el rostro, y sus ojos cayeron en mis labios.

-¿Y en que trabaja señor Min?–Trataba de quitar el incómodo ambiente.

-Solo Yoongi, nada de señor, me haces sentir viejo–Me miró coqueto y su mano de mi espalda bajo in poco. -¿Te dicen seguido que eres muy lindo?.

Soy Un Desastre (KOOKMIN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora