Innocent Lovers ©|Yoonmin

Capítulo Diez

Yoongi gruñó ronco en su oído y él por su parte gimió embelesado de placer. Yoongi embestia dulcemente su interior y las oleadas de placer venían haciéndolo sentir como si estuviera en el paraíso, le encantaba hacer esto con Yoongi y la simple sensación de estar haciendo algo prohibido y estar engañando a sus parejas lo hacía muchísimo mejor. Lo estaba disfrutando como nunca antes, aunque ya se hubiera convertido en un total infiel.

No importaba, no le importaba estar teniendo sexo con su ex-esposo.

Gimió emitiendo una queja cuando Yoongi salió de su interior inesperadamente, pero no dijo más cuando Yoongi lo volteó, besándolo humedamente y con clara necesidad, fue un beso que respondió con gusto abrazándose a él, diciéndole en silencio cuánto lo había extrañado mientras sentía sus delicadas caricias en su espalda. Yoongi lo cargó y cedió sosteniéndose de él, después fue sentado en la repisa que iba unido al lava manos.

Yoongi mordió su labio inferior tirando de el, para luego separarse y agacharse a besar su muslo mordiendo también levemente su piel despertando sensaciones increíbles y en respuesta le sonrió ladino.

—Abre tus preciosas piernas para mí, cariño— Soltó en su oído y no evitó besar su mandíbula en señal de deseo. Y tal como lo pidió Yoongi, abrió sus piernas flexionandolas un poco mientras se sostenía con sus manos a los lados en la repisa. Miró con deseo a Yoongi quién acarició su muslo interno. Lo vió tomar su miembro y lo posicionó de nuevo en su entrada, antes haciéndolo sufrir cuando comenzó a frotarse levemente, justo cuando iba a quejarse se introdujo de nuevo haciendo que echara la cabeza hacia atrás y embistió tomando nuevamente el ritmo que antes había tenido.

—Mgh~ Yoongi— Jadeó ante el sonido de sus pieles chocar, en como los testículos de Yoongi golpeaban parte de sus glúteos y ese sonido de humedad siendo emitido cada vez que entraba y salía de él —Ah, me encantas...— Cerró sus ojos sintiendo el placer incrementar y los gruñidos de Yoongi hacer presencia mientras lo tomaba con cierta fuerza.

—Eres perfecto— Sonrió ante lo dicho. Realmente estaba disfrutandolo tanto que no quería que eso terminara. Sin precio aviso, Yoongi tomó su miembro que estaba faltó de atención y comenzó a recorrer con su grande mano su longitud, brindándole placer al doble y le fue inevitable no gemir aún más. Su pulgar acariciaba su punta y se sentía al borde, no podría aguantar más en no correrse, estaría muy pronto en la recta final.

Yoongi tocó su punto dulce lo cual hizo que se arqueara un poco en disfrute. Parecía que le gustaba hacerlo sufrir ya que siguió tocandolo repetidas veces. Acrecentando su placer, provocando que en su parte baja sintiera un cosquilleo exquisito.

—Jimin...— Gruñó Yoongi aumentando el ritmo y siendo este más fuerte, y más profundo, podría decir que era hasta un poco brusco, pero aquello le gustaba en demasía. A cuestas Yoongi se acercó chupó su labio inferior. Lo miró a los ojos viéndolo tan sexy, caliente y con una fina capa de sudor en el rostro, sus hebras oscuras alborotadas le daban una imagen tan perfecta —Me voy a correr, ¿Puedo hacerlo dentro de ti?— Inquirió su mayor a cuestas, no pudo evitar sentir ternura ante aquello y tocar su mejilla acunandola con cariño y besando sus labios levemente.

—Quiero que lo hagas dentro de mí— Asintió de acuerdo, con la respiración errática y Yoongi le devolvió el beso. Ambos se separaron y se prepararon para la recta final. Yoongi apretó su cadera viéndolo fijamente con deseo, en ese momento estaba cerca por lo que le sostuvo la mirada cuando sintió sus piernas temblar, y el cosquilleo incrementar, el placer pronto explotaría y lo sabía. Con una embestida más, sucedió aquello que tanto ansiaba y se terminó corriendo en la mano de Yoongi, arqueandose pero manteniendole la mirada. Mordió sus labios por los espasmos de su reciente orgasmo que aún estaban azotandolo y sintió a Yoongi tensarse y en un leve jadeo lo sintió correrse en su interior exquisitamente deteniendo sus embestidas, llenándolo de su calidez
—Mgh... Eso se siente tan bien— Soltó débilmente y Yoongi lo besó con más tranquilidad, mordiendo su labio inferior.