Be My desire. (Two-shot) Dark Dramione.

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Capítulo 2. "If You Really Love Nothing"

Su pequeño vistazo se convirtió en un acto vouyerista un tanto perverso, no el primero si era sincera, disfrutaba mirar, pero en esta ocasión su ojeada se convirtió en una tortura muy dolorosa. Los amantes a pocos metros de ella se deshacían y reconstruían frente a sus ojos, ajenos a su observación se dedicaba a besarse y tocarse en puntos clave que les erizaba la piel y los hacía jadear. Bueno, al menos eso creía Hermione, no estaba lo suficientemente cerca para oír, pero su cerebro le dio sonido a lo visual y la envidia de verlos inundó su sistema con hierro.

Sin tener consciencia de sus movimientos, apretó de más su paraguas dejando arrugas de sus dedos, recién lo había comprado y esa era su única compañía permanente. No resultaba ser un gran acontecimiento conseguir un objeto de tuilidad, pero en esa nueva vida que eligió, todo lo que hiciera iba directo a su diario.

Esa entrada, por ejemplo, empezaría así:

"He comprado un paraguas y mientras esperaba me he calentado viendo a una pareja, siempre pensando que esos podríamos ser él y yo..."

Sabía que era deprimente, pero trataba de concentrarse en lo positivo. Desde el segundo día que llegó a su nuevo hogar, las lluvias no se detuvieron. Comprar un paraguas fue una inversión de alta necesidad que hizo un poco tarde. Köln en Alemania resultó ser una ciudad hermosa y extremadamente lluviosa; situada cerca del río Rin y con un ambiente liberal, logró pasar desapercibida fácilmente, necesitaba ser una aguja en un pajar por todo el tiempo que le restara de vida.

El paraguas en su mano era una capa más a su figura incógnita, agazapada en una esquina se dedicó largos minutos a observar a la pareja, cubiertos de la brizna de la tarde debajo de la pestaña de un restaurante, el frío los había llevado a buscar calor entre caricias poco decentes. A nadie le causó estupor el encuentro, la gente estaba más preocupada por no mojarse. Hermione tenía su paraguas y podía quedarse y ver el término de la escena, luchando con el morbo y los celos.

Su primer mes en Alemania fue el mejor, estar ahí ayudó a enfriar sus huesos hirvientes luego de la guerra. Entusiasmada por la arquitectura y la sabrosa gastronomía, se tomó el tiempo para descubrir todos los alrededores y lo que ofrecían, eso ayudó a despejar su mente y de alguna forma la centró.

En su segundo mes decidió comenzar a recorrer los museos, esperando con ansias el festival de literatura que resultaba ser el más grande de toda Europa: eso le calentaba el espíritu, aunque nunca lo suficiente, nada era suficiente. La batalla y su crueldad podían estar atrás, pero el dolor en su espíritu seguía tan presente, como el primer día en que se embarcó con Harry y Ron a la misión de sus vidas.

Trató de vivir su nuevo presente lo mejor que pudo. Hizo de todo para lidiar con ese hueco horrible en su estómago que por las noches se convertía en un agujero negro, devorando botellas de alcohol o tumbandola en el suelo hasta que rogaba por la paz. Ya no sabía ni siquiera de que se trataba la paz y el consuelo de otro no era una opción, había elegido la soledad cuando huyó y arrepentirse parecía tonto. Se había ido sin mirar atrás, sin esperar a que los muertos fueran enterrados y los vivos recompensados. No quería una palmada en la espalda por un buen trabajo, no hizo un buen trabajo. Jodió a Ron, jodió a Harry al joder a Ron, se jodió a si misma y no necesitaba más de eso.

Algunas noches se consolaba creyendo que tenía el control, fingía que era dueña de su vida y que bien podía matarse cualquier domingo, pero era demasiado cobarde para atentar contra su vida sin un mejor motivo que el de un trauma. Se dijo que podía sobrellevarlo, lo había logrado durante la guerra y no iba a rendirse ahora. Solo que eso era mentira, pues lo único que ayudo a la fragilidad de sus emociones fue Malfoy. Ver a Malfoy roto, lavando su piel con sus nudillos maltratados y sucios, fue suficiente para no perder el camino, para ganar y correr. Y a pesar de que huyó antes de que él fuera liberado, las imágenes de él mortífago quedaron grabadas detrás de sus parpados.

Bucle *Antología*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora