Park Jinyoung, exitoso jefe del Departamento de Medicina de emergencia del Seoul National University Hospital. Un tipo de mal carácter y nula empatía, para él la medicina y la ciencia lo son todo ¡Al diablo los sentimientos! ¿Amor? ¡Ni hablar!
De p...
Jamás pensó regresar de manera definitiva a Corea, no después de todo lo sucedido en el pasado y la estrepitosa huida. Algunas veces regresó, furtivamente, a causa de negocios y algunos pocos amigos que aún mantenía, aunque, principalmente, lo hizo por sus ansias de ver a la persona que tanto dañó; aquel hombre que mantenía en sel corazón, a pesar del tiempo y las heridas de antaño.
Se culpó una y mil veces por lo sucedido; la pasión turbó su cabeza, dejándose llevar ante una persona que llenó de dudas el corazón del americano, aplastando el amor incondicional de Jinyoung. A pesar de asumir el desliz, delegó el peso en otra persona, haciéndolo más llevadero y menos letal ¿Qué haría cuando esos orbes chocolate lo vieran? Los pensamientos ahuecaron la mente del pelinegro, necesitaba volver a la vida y recuperar lo perdido.
Al arribar decidió que su vida tendría un rumbo nuevo. Luego de un tortuoso divorcio, lo único en que pensó fue gestar un plan y recuperar a Jinyoung; finalmente, iba a concretar lo que dejó pendiente junto al castaño. Aunque sonara egoísta, estaba decidido a revivir el amor en el corazón del castaño.
El edificio que moraría resultó perfecto, manteniendo el estilo de uno de los Cardiólogos más renombrados en Estados Unidos; lujoso, moderno y cómodo, pero lo más importante cercano a la residencia de Jin, siendo la primera parte de su magnífica estrategia.
El tiempo jamás cambió su forma de ser, pues era el tipo egoísta y ambicioso de siempre; uno que sólo velaba por sí mismo.
"Pronto volverás a mí, Jinyounggie. Lo sé y prometo que será diferente"
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El hospital era el mismo, a pesar del tiempo; todo le hizo rememorar la mejor época vivida, esa en la que gestó su amor por la cardiología y en la que cayó enamorado. Sonrió recordando algunas experiencias con el hermoso castaño; el internado médico, la declaración de amor e incluso el primer te amo. Prefirió omitir las malas experiencias y la traición...su traición.
Los pasos resonaron en los diversos departamentos, caras desconocidas apuntaban al americano, quien hizo una mueca desagradable. Al parecer, el personal conocía la magnífica reputación de Mark Tuan y el hecho de que estuviera en aquel recinto, ratificó la idea de liderar el departamento de cardiología.
- Me alegra que hayas aceptado trabajar en este caso- expresó Chanyeol, cuando tuvo al pelinegro frente a él.
- Chan ¿No me darás un abrazo? - Park resopló, accediendo a la petición.
- ¿Cómo estás? Espero que listo para comenzar- indicó el directo.
