--" Full de Ases con Reyes"-- de nuevo Fernando había ganado la partida de cartas, la suerte estaba de su lado mientras disfrutaba viendo como su supuesto amigo Ernesto se hundía cada vez más.
--" Exijo la revancha"-- le dijo Ernesto mientras se ponía de pie de su silla para ir a dónde estaba Fernando, pero un par de enormes hombres le impidieron el paso.
--" Como quieras mi buen amigo, traes dinero para la siguiente partida?"-- Tomó su copa de whiskey entre las manos dándole un generoso sorbo, sabía cuál sería la respuesta pero quería escucharla por la propia boca de Ernesto.
Ernesto retrocedió un paso, no había sido una buena noche, todo el dinero que había sacado de su cuenta de banco ahora estaba en poder de Fernando,pero estaba seguro que ganaría la revancha.
--" Préstame el dinero que necesito"--
Fernando sonrió triunfante, una mueca de autosuficiencia se asomó por su rostro las deudas que su amigo tenía con el crecían más y más veía cada vez muy cercana la oportunidad de cobrarse con la hija de Ernesto.
----" Carlos,le dijo dirigiéndose a uno de los enormes hombres.
" Acompaña al señor a la caja del casino y dale el efectivo que necesita"---
Ernesto se adelantó hacía la caja donde le darían más efectivo, detrás de el iba el guardaespaldas, una voz hizo que ambos se dieran la vuelta.
---" Ya sabes lo que tienes que firmar para que te den el dinero verdad?"--
--"Otro pagaré...---"
Cada vez que pedía prestado Fernando lo obligaba a firmar un pagaré dónde se comprometía a pagar el dinero que pedía prestado, pero Ernesto nunca leyó la cláusula escrita al final del papel donde decía que en caso de incumplimiento de pago, el señor Fernando Colunga podría exigir cualquier forma de pago a su conveniencia.
--" Si Fernando, te firmaré otro pagaré"--- le dijo con una mueca de decepción, había tratado de todas las maneras posibles de dejar la adicción que lo estaba hundiendo en deudas, su hija y su novio lo habían llevado a terapias,pero el cada vez que podía se escapaba de aquel lugar para ir al casino y volvía a regresar al centro de terapias cuando Lucero y David regresaban por el.
---" Ve por tu dinero entonces, que la noche aún es larga"---- volvió a tomar la copa de whisky volviendo a darle un gran sorbo.
Lucero la única hija del matrimonio Hogaza León estudiante del último año de la carrera de enfermería,logró pagar sus estudios gracias a su trabajo como mesera en el restaurante "Katz's Delicatessen" ubicado al sur de la ciudad de New York.
A Lucero le preocupaba las adicciones que su padre había adquirido recientemente, con la muerte de su madre por culpa de un infarto fulminante ella tenía la responsabilidad bajo sus hombros de sacar adelante un hogar y sobre todo sacar adelante a su pobre padre.
Por suerte tenía a su lado a David, quien conoció en la misma universidad a dónde ella asistía, se enamoraron desde el primer día que chocaron en uno de los pasillos de la universidad, cuando ella iba tarde a su clase de primeros auxilios mientras que el se dirigía a su clase de finanzas, Lucero chocó con David en uno de los pasillos de la universidad a causa de eso los libros se esparcieron por el aire mientras que Lucero cayó encima de David.
El simpático y guapo David se enamoró desde el primer momento en el que vio ese par de ojos de color miel, brillantes como un par de luceros mientras que ella sintió mariposas revolotear en su estómago a causa de estar encima de aquel guapo caballero.
A Lucero le encantaba cocinar, sobre todo pasteles había llegado temprano de la universidad y por lo tanto quiso sorprender a su padre con su pastel favorito, de vainilla aunque ella prefería el de chocolate pero esa ocasión le daría gusto a su papá.
Ya era tarde como para que su papá estuviera en la calle todavía, escucho que alguien habría la puerta de la casa, la tranquilidad invadió su corazón.
---" Papá,que bueno que llegaste"--- corrió abrazar a su padre quien no traía muy buen semblante. Le dió un furtivo beso luego del abrazo.
A pesar de haber conocido la derrota en el casino en varias ocasiones Ernesto trataba de mostrar su mejor semblante ante su hija.
--" Como estás mi pequeña Lucerito"-- llegaste temprano de la universidad?
---" Hoy no tuve una clase y aproveché para venir a casa y hornear tu pastel favorito le dijo mientras lo tomaba de la mano para llevarlo a la cocina.
----"Gracias princesa pero lo que quiero es ir a dormir, le quitó la mano de la suya para poder abrazarla.
Y realmente era lo que quería,con la mala racha que había tenido en el casino,haber gastado una buena cantidad de dinero apostando y haber firmado tres pagarés,lo que realmente quería era ir a dormir y no pensar nada más.
--" Acaso te duele la cabeza,le dijo Lucero mientras llevaba una mano en la frente de su padre para checar su temperatura"--
---" No mi vida, solo estoy cansado nada más le quitó la mano de su frente mientras le daba un beso sobre los nudillos.
---" Me guardas una rebanada para mañana, le dijo mientras le daba un abrazo y un beso antes de subir hacia su habitación"---
Lucero estaba confundida, la actitud de su padre la preocupaba,la inquietaba mucho no supo siquiera si había asistido a sus terapias. Quería ir tras el a preguntarle qué le sucedía pero creyó que era más prudente dejarlo solo.
Fue a la cocina a sacar el pastel del horno con ayuda de un guante de cocina abrió el horno mientras sostuvo el pastel,desmoldo mientras tomo la crema pastelera y algunas frutillas y comenzó la decoración.
Se le había echo tarde para su clase de biología en la universidad, estaba segura que el profesor Williams no la iba a dejar entrar, subió al cuarto nivel de aquel enorme edificio mientras rogaba porque aquel viejo insoportable la dejara entrar.
Corrió lo más que pudo hasta que sintió que chocó con alguien, sus libros salieron volando por el aire su celular quedó hecho añicos sobre el suelo, mientras que ella aterrizó encima de un enorme hombre vestido de traje de etiqueta.
Aquel caballero la veía fijamente tenía una sonrisa que a cualquier mujer volvería loca,era un hombre alto, piel morena, olía endemoniadamente bien no sabía cómo pero la tenía sostenida fuertemente por la cintura,sensación que no pasó desapercibida por ella incluso se sentía incómoda por el contacto de aquel desconocido.
---" Estás bien..? Le pregunto mientras le quitaba un mechón de su cabello que caía frente a su rostro y se lo acomodaba detrás de su oreja.
Aquella voz se quedaría para siempre grabada en su mente, la voz era de todo un hombre,varonil y sumamente sensual.
Lucero había quedado muda, no podía siquiera articular palabra era como si las palabras se hubieran esfumado en algún lugar recóndito del planeta tierra.
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MAFIA Y AMOR ®
RandomEn un casino exclusivo de la ciudad de New York ubicado al sur, cinco jugadores reunidos en una mesa de juego, uno de ellos el jefe de una de las mafias más poderosa del país. Ernesto Hogaza un jugador casi inexperto con una gran adicción por el jue...