Luego de quedarse dormidos dentro de la camioneta el fue el primero en incorporarse realmente era una posición bastante incómoda en el que ambos estaban, recogió el Rolex del suelo para checar la hora,vaya aún eran las doce de la noche pensó que tal vez estaría pronto a amanecer.
Temió estarla aplastando con cuidado salió del cuerpo de su esposa quien dormía plácidamente en una posición un poco incómoda.
Se incorporó por completo mientras tratando de no despertarla se pasó a los asientos de adelante para comenzar a vestirse y poder limpiar un poco dentro de la camioneta.
Luego de tener todo aparentemente limpio sin rastro alguno de lo que paso allí dentro y el medio vestido tomó la botella y las copas para dejarlas en la cocina.
Regresó minutos después por su esposa para llevarla a la habitación y que pudieran dormir de una manera más cómoda.
Temió por su salud ella estaba completamente desnuda durmiendo sobre el asiento de la camioneta mientras que en el suelo de este se encontraba su saco,la camisa que ella llevaba puesta totalmente desgarrada y sus panties que ahora era un pedazo de tela inservible.
Tomó la tela de sus panties entre sus manos mientras que se la llevaba a sus fosas nasales,olía a ella eso encendió de nuevo su instinto de hombre que ansiaba poder hacerle el amor hasta el amanecer justo como lo habían prometido. Guardo aquel pedazo de tela en uno de los bolsillos de sus pantalones mientras volvía entrar a la camioneta.
Tomó la camisa desgarrada junto con el saco para cubrir medianamente su desnudez. Con cuidado la tomó en brazos para subir con ella a la habitación dejo abiertas las puertas del auto dejando que la brisa del aire limpiará los vidrios aún empañados.
--" A dónde me llevas...?"-- preguntó somnolienta mientras rodeaba su cuello con sus brazos.
--" A la habitación,estoy seguro que dormiremos más cómodos..."-- dijo mientras subía con ella a la habitación tratando de no hacer ruido.
La piel de sus piernas rozando la yema de sus dedos era una sensación exquisita,era suave,tersa delicada como toda ella sumamente embriagante.
--" Estás seguro que solo dormiremos...?"-- preguntó más dormida que despierta cuando sintió como la depositaba suavemente en las frías sábanas de la cama.
--" Vaya desde cuándo mi pequeña niña tímida y nerviosa se convirtió en toda una mujer..."-- se volvió a quitar la ropa,para entrar a la cama junto con ella.
La idea era ir por una pijama y dormir,pero desecho esas ideas a la basura sabiendo que tenía a su musa completamente desnuda y a su merced en la cama.
Abrió las sábanas de su lado para acostarse junto con ella, se acercó lentamente a su esposa quien seguía durmiendo plácidamente aferrada a una almohada. Comenzo acariciarle y besarle la espalda desnuda para luego entrenenerse hurgando dentro de su oído con la punta de su lengua.
--" Acaso no estás cansado...?"-- murmuró mientras sentía una enorme mano rodearle la cintura.
--" No,tu si...?"-- continuo su juego mordiéndole dulcemente el lobulo de su oreja.
--" Podemos seguir..."-- la mano de Fernando se había dirigido a su entrepierna dándole endemoniadas caricias.
Comenzaba a despertar del todo,mordió su labio inferior mientras rogaba por más.
--" O te dejo descansar..."-- de la nada quitó la mano de dónde estaba mientras se daba la vuelta dándole la espalda.
Segundos después sintió como ella salvajemente le daba la vuelta encimandosele,con desesperación comenzó a besar sus labios mientras bajaba por todo su abdomen repartiendo besos.

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MAFIA Y AMOR ®
De TodoEn un casino exclusivo de la ciudad de New York ubicado al sur, cinco jugadores reunidos en una mesa de juego, uno de ellos el jefe de una de las mafias más poderosa del país. Ernesto Hogaza un jugador casi inexperto con una gran adicción por el jue...