— Makku — pronuncia el mayor fijando su vista en Mark, notando como la pierna de este se movia de un lado a otro, sabia que estaba nervioso. — Mark — vuelve a decir, viendo como él estaba totalmente distraído en sus pensamientos.
Sin más, se acerca a Mark, quien esta sentado en la banca de la parada de buses, se sienta a su lado y toma la pequeña mano de Mark, logrando de por fin lo vea.
— ¿Mmm?, ¿que pasa? — pregunta Mark y Yuta ríe, no puede evitarlo, Mark estaba tan distraído desde hace rato.
— Eso te pregunto ¿que sucede?, ¿estas seguro de esto?, no quiero presionarte Mark, pero es que te ves muy nervioso ahora mismo... —
Mark entre abre su boca para contestar pero de allí no sale nada, tan solo suelta un pequeño suspiro.
— Estoy nervioso, muy nervioso — Yuta sonríe amplio y asiente con su cabeza para darle a entender que lo sabia.
— Te conozco. Haz estado muy distraído e inquieto, estas nervioso por lo de hoy y probablemente tengas miedo —
Mark le dedica una mirada y muerde su labio inferior para no sonreir.
— ¿Por que me conoces tan bien? — Mark entrecierra sus ojos, casi reclamándole, en broma obviamente.
— Porque soy tu novio — Yuta le saca la lengua con diversión y Mark ríe.
— Eres un tonto —
Mark le da un suave apretón a la mano de Yuta y baja su mirada.
Yuta sabía la causa del comportamiento de Mark, le había propuesto que queria presentarse a los padres de Mark puesto a que llevaban casi cuatro meses de relación, y Yuta queria hacer bien las cosas, Mark también, y se alegro cuando Yuta le dijo aquello, solo que ahora moria de nervios porque sus padres no eran las personas ms agradables del mundo, tendían a criticar a simple vista y Mark odiaba eso, no queria que criticaran a su novio.
— Quiero que todo salga bien — dice Mark, casi inaudible. — Tengo miedo de que mis padres crean que eres un mal tipo, que comiencen a criticarte por su apariencia, ellos son tan... antipáticos — Mark exhala, Yuta entrelaza sus dedos con los de Mark y antes de que pueda responder, Mark continua. — Quizás te critiquen, o te pregunten algo indebido. Incluso luego de irte lo más seguro es que me hablen mal de ti, y no quiero eso —
Yuta toma con suavidad el mentón de Mark y éste alza su vista.
— Tranquilo, Mark bonito — Mark forma una pequeña sonrisa. — Sere lo más paciente con ellos, intentare agradarles aunque sea un poco, hare el esfuerzo por ti, asi como tu lo estas haciendo por mi —
Mark sonríe antes sus palabras, lo abraza un par de segundos y vuelve a sonreirle.
— Espero que todo salga bien — dice Mark y Yuta asiente.
En el camino a casa de Mark, habia logrado calmarse gracias a Yuta, quien aun no soltaba su mano y dejaba cortos besos en sus labios, al llegar, justo en frente de la puerta, Mark inhala y exhala con suavidad. Sus padres sabían que se día llevaria a Yuta a casa, asi que no seria una sorpresa para ellos, o eso esperaba.
Le da una mirada a Yuta, llevaba su cabello rojo intenso con una trenza desde su nuca hacia arriba sujetada con algunas pinzas, tenia unos pantalones rasgados en la parte de abajo y una camiseta de alguna frase en inglés. Lucía realmente increíble, pero quizás sus padres no pensarían lo mismo.
— Tranquilo bebé — dice Yuta, antes de que Mark abra la puerta de su casa.
Al entrar, Yuta saluda cortésmente al hombre que observa la TV, deduciendo que es el padre de Mark, y a su madre, quien va hacia ellos con una expresión seria mientras lleva en sus manos una bandeja de galletas recien horneadas al parecer.