Tu Me Quemas

Enfrentamiento

Ellen

El tiempo que pase sin Massimo se me hizo muy duro,pero no podía volver a estar con el si Cristopher aún sentía algo por mi .
Decidí dejarme de agobiar por mis pensamientos y fui al hotel donde estaba Luz con Massimo.

Me encontraba en el hotel y iba subiendo las escaleras para buscar a mi sobrina para tomar un helado y tal vez ir al parque,estaba a punto de llamar a Massimo para decirle que estaba por llegar a la habitación cuando no pude hacerlo por qué alguien agarro bruscamente mi brazo.

-¿Qué haces aquí zorra?¿Has venido por el padre o por el hijo?¡O talvez quieras follartelos a los dos! Zorra de mierda eso es lo que eres.- Era Brisa y me estaba impidiendo el paso y se veía bastante amenazante pero trate de guardar la calma mientras varios huéspedes disfrutaban de la escena.

- Por favor Brisa,no es el mejor momento ni lugar...

-¡Te follaste a mi hijo y a mi marido!¿Ahora te da vergüenza golfa?¡Pues te jodes!que todo el mundo sepa..¡Miren! Esta niña aquí que tiene cara de no haber roto un plato,es una roba maridos sin moral... primero estuvo con nuestro hijo y le puso cuernos y luego conquisto al padre para quedarse con el patrimonio familiar ¡Esta mujer destruyó mi familia!-exclamó a los gritos fuera de sí.

-Cálmate,estás muy alterada..podemos hablar esto en otro lugar.

Pero mis intentos de calmarla eran inútiles.

-¡Qué lo sepan todos!no me importa,eres una persona sin escrúpulos una puta de la peor calaña..te abrí las puertas de mi casa y traicionaste a mi hijo...¡Conseguiste que Massimo y yo nos divorciaramos!- grito aún más exaltada.

Uno de los botones se acerco a ella para intentar calmarla.

- Señora Morello..por favor venga conmigo.

-¡Sal de aquí microbio! Y yo soy la única señora Lauden..y está que ven aquí es la prostituta de la familia,que le da servicio a todos los hombres Lauden,entre ella y su hermana se encargaron de ella...

Cuando menciono a mi hermana mi calma se esfumo.

- Ni te atrevas a mencionar a mi hermana,ten la decencia de no manchar su memoria.

-¿Decencia?¿Tú me hablas a mí de decencia?¿Te sentías decente cuando le chupabas la polla a mi marido a mis espaldas?- replicó ella fuera de si.

Un murmullo de desaprobación se elevó a nuestro alrededor.

- Jamás hize algo así - replique al borde de las lágrimas- Nunca me acerque cuando estaban casados...el me odiaba y lo sabes.

- Así que te odiaba...- repitió Brisa con ironía y luego se dirigió en torno a las personas que estaban a nuestro alrededor-: Si,así es mi marido,si odia a alguien se lo folla,no importa que se trate de la propia novia de su hijo, Massimo Lauden solo obedece su polla.

-¡Basta Brisa,estás calumniando al padre de tu hijo!

-¡Es mi jodido marido y puedo decir lo que quiera!.... después de que desperdicie toda mi juventud criando a su único heredero.

-No sé cómo puedes decir algo semejante...si te oyera Cristopher,se sentiría muy herido,y creo que debes asumir que Massimo ya no es tu marido y esa posesividad tuya te hace decir muchas cosas injustas- intenté razonar con ella,pero a estas alturas era imposible.

- Hace falta mucho más que una maldita perra para hacerme callar¡Te mereces lo peor!y creeme Ellen king lo tendrás.

- Me estás amenazando frente a muchas personas y creeme con lo que dijo Massimo el otro día,no te conviene que llame a la policía.

No tenía ni idea de lo que había pasado con respecto a la policía,pero si lo sacaba a colación sería bueno.

- No te saldrás con la tuya Ellen,no te quedarás con Massimo- la observé con tristeza unos momentos,me dió lastima.

- No es necesario que me digas amenazando,el y yo ya no estamos juntos,quédate tranquila- murmuré mientras hacia el intento de marcharme.
Pero Brisa dió un paso al frente y me lo impidió.

- Vaya así que se aburrió de ti...te salió mal la jugada con mi marido,puede que te quedes con la casa y con la niña pero con mi marido y mi hijo no.

No me permiti verme débil ante ella,levanté al cabeza y le respondí.

- No quiero nada de lo que consideras tuyo,aún que no lo sea... asumelo ya y permíteme pasar.

A la mujer le brillaron los ojos con maldad.

- Ni mío ni tuyo,con eso me basta...ahora vete y conduce con cuidado cunado te vayas...no vaya a ser que te pase lo mismo que a tu puta hermana.

Eso fue demasiado para mi,estaba dispuesta a agarrarla por los pelos,pero ella me empujó por las escaleras.

Trastabille y cai hacia atrás.
Y luego todo fue oscuridad y silencio.