Final

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Massimo

Y un segundo después, sucedió.
Sus brazos en torno a mi cuello,mi boca contra la suya,sus pechos,su vientre,su perfume. Ellen en todos lados,como antes,como siempre,como la había soñado.

- Ellen..joder..

- Si..yo también te echaba de menos Massimo..

Gemi, y escondí mi rostro en su cuello.

- Ya se a que has venido..a volverme loco - gruñi y besaba cada parte de ella.

- Entre...otras cosas..- admitió ella en suspiros.

- Dime qué cosas..- exigí

- Vine a recuperarte...te necesito Massimo..joder.

-¿Qué te hizo cambiar de opinión Ellen?

- El convencimiento de que lo único que podría separarme de ti no existía más que en mi imaginación

- Mira que todavía sigo teniendo veinte años más que tú - acote medio en broma.

- Y eso es algo que,lejos de alejarme,me seduce - admitió Ellen tocando mi clavícula - Aún que fui una perra dejándote pensar eso..

- Podría perdonarte si me dices cuál fue el obstáculo real.

Ella no dudó en responder.

- Cristopher.

Me tense al escuchar el nombre de mi hijo.

- Supongo..que tenías que averiguar que sentías por el...

Ella hizo una mueca.

- No, siempre eh tenido claro que lo que sentía por el: un cariño muy cercano al fraternal - me aseguró - Lo que no quería era ser la manzana de la discordia.

- Pero..eso no..

- Ya lo sé Massimo,lo interprete todo mal .

- Yo te aclare todo Ellen.

- Eso ya no importa,ahora estoy aquí y olvidemos todo lo malo.

- Lo siento Ellen.

- Yo también - admitió - Entonces..visto lo visto..¿Podemos empezar de nuevo desde aquí? Sin sospechas..sin rencores..sin ropa.

-¿Qué? - pregunté confundido por si no había escuchado bien.

- Que necesito que me folles Massimo,toda la tarde,toda la noche,hasta que salga el sol - admitió mientras se bajaba las bragas.

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Mucho más tarde cuando ella yacía entre mis brazos en el pequeño camarote,le pregunté si de verdad iba a quedarse.

- Mira,aquí está el hombre de mi vida..aquí está mi futuro,aquí está el tío de mi sobrina,que no hace otra cosa más que hablar que un día viajará para verlo...aquí está o estará todo lo que amo,así que,si tú me aceptás..claro que me voy a quedar.

Mi sonrisa llegaba a las orejas.
Me la comí a besos, empezé por la boca, seguí por la cara,por el cuello...
Me detuve en sus pechos.
Los gemidos de Ellen bastaban para ponerme a mil.

Dios como la amaba..llevaba siete años enamorado de ella como un niño,y esperaba que la vida me diera mucho más tiempo para estar con ella.
Ella me miró mientras que observaba detenidamente.

- Dime qué sientes cuando me miras asi - me rogó entre suspiros.

- Siento que soy capaz de todo contigo a mi lado,que no quiero que te alejes de mi nunca..que puede follarte desde que sale el sol hasta que se pone..cuando te miro,siento que ardo-le respondí mientras le daba ligeros besos en su rostro - Tu me quemas Ellen King.

Ella me rodeo la cintura con sus piernas.

- Te quiero bien metido en mi hoguera Massimo Lauden..tu también me quemas....

Tu Me QuemasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora