—¿Tienes todo?
Pepper se acuclilló frente a su hija. Morgan apretó con sus manitas las asas de su mochila que ya llevaba en los hombros y asintió. Pepper sonrió y, justo en ese momento, sonó el timbre.
—Papi ya llegó —dijo la pequeña sonriendo y, sin esperar nada, corrió hacia la puerta.
Pepper se incorporó y la siguió hasta el vestíbulo, donde su niña esperaba ansiosa a que ella abriera la puerta. Miró primero por la mirilla de la puerta y sí, ahí estaba Tony y un paso atrás de él, Steve. Entonces, abrió la puerta y Morgan salió disparada a abrazar a su papá.
—¿Lista para ir al zoológico? —preguntó Tony sosteniéndola entre sus brazos.
Morgan asintió y volteó a ver al hombre detrás de su papá.
—¡Steve! —dijo y estiró los brazos hacia él.
Steve sonrió y tomó en brazos a la pequeña, relevando a Tony en ello.
—¡Quiero ver a los leones! —dijo Morgan aferrándose al cuello del capitán, sonriente y emocionada —¿Tú a que animalito quieres ver?
Mientras Steve y Morgan hacían un itinerario para su paseo, Pepper le entregó a Tony otra mochila con las cosas de Morgan, ropa y también...
—Tiene tarea —dijo —, es para el martes, pero si pueden adelantar algo te lo agradecería, porque tengo que revisar algunos proyectos este fin de semana.
Tony asintió.
—De acuerdo, Pepp, nos vemos el lunes —Tony le besó en la mejilla y se hizo a un lado para que Steve y Morgan (especialmente ella) se despidieran.
—Adiós, mami —dijo la pequeña estirándose, pero sin abandonar los brazos de Steve, para darle un beso.
—Pórtate bien, cariño.
—Hasta luego, Pepper—dijo Steve y, como Tony, le besó la mejilla brevemente.
—Hasta luego, Steve, te la encargo mucho.
Steve asintió y dio media vuelta retomando enseguida la conversación con la niña. Pepper vio como Tony echaba la mochila de Morgan en el maletero, mientras Steve acomodaba a la pequeña en su silla especial en el asiento trasero y le ajustaba las correas que la sujetaban a él. Tony pasó detrás de él y subió al asiento del copiloto. Steve cerró la puerta trasera del auto y tomó su lugar tras el volante. Tony se asomó por la ventanilla y se despidió de Pepper agitando la mano, Morgan hizo lo mismo desde su lugar. Cuando el auto se perdió calle arriba, Pepper suspiró y entró a su casa.
Se había divorciado de Tony hacía casi un año un medio, pero su matrimonio siempre había estado en una zona difícil de explicar. Llamémosle intuición femenina, pero ella sabía que Tony no estaba del todo enamorado de ella, sabía que había algo ahí que no le permitía llevar una relación completa con él. Cuando Steve apareció de nuevo en la vida de su esposo, las cosas tomaron claridad. Era evidente, hasta para quién no quería ver (ella, por ejemplo), que entre ellos se fraguaba una complicidad que iba más allá de una simple amistad, incluso, más allá de la mejor de las amistades. Tuvo que aceptarlo y cachetear a Tony para que se diera cuenta de las cosas (él era otro de los que no quería ver). Éste, finalmente, aceptó sus sentimientos y descubrió que tenían eco en el corazón del capitán. ¿Qué otra opción tenía ella? Se divorció y las cosas entre ambos, curiosamente, mejoraron.
Para Morgan no ver a sus padres juntos, al principio, fue raro, pero se acostumbró rápido a ver a su padre determinados días y fines de semana. Parecía haber encontrado lo bueno de todo ello, decía que tenía dos casas, dos habitaciones, una mamá y dos papás.
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Stony Series Vol. 4
FanfictionConjunto de one shots, Stony. 1.Dodger nos cuenta como Steve y Tony le han dado una familia. 2. Tony es el padrino de boda de Steve, y aunque quisiera no puede remediarlo. 3. Una vieja promesa del colegio espera ser cumplida. 4.Steve soñaba con un...