18. ASALTO A LA PRIMERA BOVEDA.

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- Llevamos más de un mes tratando de localizar el paradero y aun no tienes nada - reprendió Liu Haikuan a su compañero de trabajo.

- Comandante lo siento pero... Como siente no tenemos registro de nada de Scarlet Killer, sólo la fecha en que murió.

- ¡¡Ese maldito no está muerto!!, pero pronto lo estará el infeliz.

- ¿Señor?

- además de su muerte, ¿no hay otra cosa más?

- No señor.

- Bien puedes retirarte - el hombre hizo una inclinación saliendo de la oficina de su superior.

Cómo era posible que no pudieran encontrarlo, era imposible que no dejara un maldito rastro siquiera.

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Estaban en su Recamara acurrucados uno contra el otro.
Al no poder tener relaciones, no faltaba algún sexo oral de vez en cuando, como lo había hecho en esta ocasión.

- ¿De verdad tienes que irte mañana?

- Tengo que hacerlo, después de conseguir esto desapareseremos por un buen tiempo.

- Pero nada nos hace falta, eres un millonario después de todo, ¿Qué sentido tiene robar una bóveda llena de dinero?

Scarlet killer rió - desde luego que tiene sentido, podrías abandonar esta vida, no quiero que mi hijo crees a en un este mundo lleno de sangre, quiero que tenga una vida normal.

Liu Zhan sonrió al saber sus inspiraciones de padre - Bueno, ya que esa es la razón, entonces te apoyaré.

- Gracias cariño - depositó un beso en la punta de la nariz de Zhan Zhan.

A la mañana siguiente las camionetas y el grupo de hombres ya estaba listo para partir a la ciudad rusa.

Con una sonrisa y una garantía de que regresaría a la mansión, se marcharon. La casa quedó bajo la custodia de Jessi, esa chica parecía ser de hierro, invencible.

Los muros de las miras eran supervisados por un grupo de mujeres de muy bonita apariencia, pero crueles en su corazón. Estaban bajo la orden de la chica de cabellos negros.

Al no tener nada que hacer, regresó a su antiguo lugar de entretenimiento, se dedicaría a pintar o dibujar algo.

Dos días después aún no tenía noticias de su esposo.

Scarlet killer habló por el radio de su auricular: - Ji Li, ¿Qué vez?

Era de noche, estaban dentro de la camioneta negra; el nombrado se encontraba en otro vehículo, habló para responder: - sólo están los guardias de la entrada, nada que no puedan manejar.

- Bien, vamos a entrar, guíanos.

- Entendido jefe.

Salieron de la camioneta con sus rostros cubiertos por pasamontañas.

Dylang cargo su arma, poniendo el silenciador se deciso de los guardias policiales de la entrada.

- Ji, desaste de la seguridad.

- En eso estoy... Listo, pueden entrar.

- ¿Dónde está la bóveda?

- llega al final del último pasillo, hay una puerta que necesita una contraseña codificada, pero para cuando llegues ahí, podrás entrar ya me encargo de eso.

- Okay, vamos entrar.

De manera poco sigilosa caminaron por los corredizos, como si fueran los dueños del lugar.

¿Quién en su sano juicio pensaría que la primera bóveda estaba siendo hurtada por un criminal más que experto? Ja, y para colmo, extranjero.

Entraron por la pequeña puerta, encontrando un corredizo demasiado oscuro.

- Ji Li, ya estamos aquí.

- Camina por ese corredizo y al final. Está la caja fuerte, que es la bóveda.

- ¿Tiene contraseña?

- con la perla rusa se abre automáticamente.

No respondió y siguió adelante. Caminando con un poco de cautela ya.

Llegaron al final, y tal como se les había dicho, la caja enorme estaba en ese lugar.

- ¿Entramos? - preguntó Hao Xuan con una sonrisa.

- No perdamos tiempo.

Giraron la rueda de acero, al instante la luz blanca del interior golpeó su visión.

Los billetes de color verde estaban muy bien empaquetados por fajos gruesos, tan perfectamente acomodados que aturdia. De sus mochilas sacaron bolsas negras para vaciar la pequeña recamara.

Uno que otro diamante tampoco no se salvo de entrar en la bolsa.

- Hao Xuan, ¿Tienes un aerosol?

- ¿Pará qué lo quieres? - lo miró con extrañeza.

- Tu sólo dámelo y no preguntes, ya verás.

Le pasó el aerosol. El otro al tenerlo bajo su poder escribió en una de las paredes.

Scarlet killer estuvo aquí.

Todos los subordinados dentro de la habitación rieron por las ocurrencias infantiles de su líder.

Este primer robo había sido tan fácil que ya quería asaltar las demás, todo para causar dolores en el culo a los policías y a su incompetencia para atraparlo.

Se rio para si mismo, iba y venía frente a sus narices, sin que ellos lo supieran.

- Scarlet deja de hacer tonterías y vámonos.

El nombrado obedeció sin rechistar absolutamente nada.

Le daría a su familia un futuro bueno y sin más derramamiento de sangre, cambiaría su vida con tal de mantener viva a su familia, después de tanto tiempo tendría una familia completa y no cometería el mismo error de su padre.

































Hola chicas hermosas, espero les guste el capitulo, perdónenme si las hago sufrir, esa no es mi intensión. Pero es parte de la trama.

GRACIAS A TODAS POR LEER.

PRÓXIMAMENTE...

𝒯𝑅𝒫. 𝒞𝒪𝑀𝒫𝐿𝒪𝒯  YIZHAN. SEGUNDA TEMPORADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora