Pobre Garu...

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Abyo se encontraba golpeando la puerta principal de la casa de Garu, esperando que le abrieran.

—¡Eh, Garu! ¿Cuando abrirás la puerta?

Después de esperar otro poco, el moreno se da cuenta de que la puerta estaba abierta desde hace rato.

Así que entró en la casa, y observó que la sala de estar se encontraba hecha un desastre, estaba sucia, llena de polvo y pelo de gato, pareciera ser que Mio se había adueñado del lugar.

Obviamente esto asqueó y extrañó a el muchacho, ya que su mejor amigo es una persona que acostumbra a mantener limpio su entorno.

Así que, entró a la habitación de su amigo, y lo vio.

Estaba ahí, tirado, vestido como un ciudadano cualquiera (pero con ropa sucia), el cabello despeinado, ojeras...

—¡P-Pero Garu! ¿Qué haces así?

Pero nadie contestó.

—Eh, hombre, te estoy hablando.

Nadie contestó, de nuevo.

—Garu... ¿Estás bien?

—¿Cómo piensas que voy a estar bien, Abyo?

—Ya... Sólo intentaba ayudarte.

—Lo siento... Es que... No es fácil...

Garu se tapó el rostro con ambas manos, para después empezar a sollozar.

—Viejo, no te pongas así, la vamos a encontrar.— Abyo se sienta a su lado. —Lo prometo.

(...)

Abyo pasó como media hora intentando consolar a su mejor amigo, logró convencerlo de que se dé una ducha, le ayudó a arreglar su habitación y parte de la sala, y después salieron a pasear para refrescar la mente.

Pero ¿Cómo te refrescas la mente si ves en todas partes que la policía anda buscando a un ser querido tuyo?

Pero bueno, habían salido para entretenerse, así que fueron en dirección a una tienda de pasteles para comer algo dulce.

De repente, Garu vio al otro lado de la acera, a Pucca saliendo de un establecimiento. —¡Pucca!— gritó, y emocionado empezó a correr hacia el otro lado, pero de repente notó en lo que visualizaba, a Tobe, quien se acercó a la chica y la besaba.

En medio de esto, Garu se enfadó y entristeció a la vez, pero esto le hizo frenar el paso.

Gracias a esto, un camión que iba de paso casi se lo lleva, pero por suerte, Abyo se abalanzó sobre Garu y evitó esto.

La visión de Pucca y Tobe se esfumó.

—¿¡Estás loco!? Corriendo a otro lado a ver si te atropellan, ¿¡A caso te quieres matar!?

✘ Rσנσ Ʋιησтιηтσ ✘ (SIN EDITAR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora