La venganza

291 26 11
                                    

Estaban ahí, todos riendo cuales niños de secundaria por cualquier tontería.

Era suficiente para Garu, tenía bastante tiempo sin sonreír así.

Claramente no era del todo feliz, pero estaba agradecido por tener compañeros tan estúpidos pero leales en su vida.

Esa alegría no duraría mucho, apreciaron que alguien estaba lanzando rocas pequeñas hacia la ventana.

Dada abrió la ventana, y por accidente una de esas rocas le cayó en el rostro. —¡E-Ey! Eso dolió...

Pero notó mejor quién era esa persona, que estaba allá abajo, lanzando rocas.

Se puso nervioso y cerró la ventana.

Garu, curioso, pregunta. —¿Quién estaba haciendo eso?

Dada se puso más nervioso. —N-No era nadie, na-nadie importante.

—¿Estás seguro?

—Sí... No...

Poco después, alguien abrió la puerta de una patada (como es de costumbre).

En efecto, era el villano de nuestra historia, quien ha hecho la vida de nuestros personajes un infierno.

Tobe venía con el máximo. —Intenté hacerlo por las buenas, ¡Pero serán por las malas!

Y con su característica agresión, corrió hacia su enemigo (quien estaba medio atontado y distraído.) Y se abalanzó sobre él (#nohomo) para así caer ambos por la ventana misma.

Una vez en el suelo, ambos se levantaron.

—¡Por favor, Tobe! ¡¿Crees que esto es un juego?! ¿¡Qué le has echo a Pucca y por qué te esfuerzas tanto en hacerme miserable?

—Garu, Garu, Garu... Tú solito te haces miserable, yo solo estaba demostrando a TOOOOOODA Sooga que ya no era el patán de antes, ¡Ahora seré tu peor pesadilla! ¡Prepárate para la venganza!

Una fuerte pelea inició, el maestro Chang estaría orgulloso de las buenas técnicas y movimientos aplicados por su ex alumno, mientras que Tobe por su lado sí daba buena riña.

Los amigos de Garu no se iban a quedar de brazos cruzados, así que todos bajaron para defenderle.

No pasó mucho para que vinieran el clan de ninjas secuaces de Tobe para impedir que estos se interpusierab en la pelea por el honor.

Golpes, patadas, ataques de espada y demás iban siendo intercambiados por ambos.

Garu intentó realizar la misma táctica que con Ring Ring.

Pero cuando estuvo a punto de ponerse en posición, recibió un golpe en el lateral izquierdo de la cabeza DESDE ATRÁS.

Cayó en el suelo, mientras su malvado enemigo se reía descaradamente.

—Ay, claro, se me olvidó darte un detallito... Creo que conoces a mi aliada.

Pucca estaba en posición, para también dar pelea hacia Garu, en sus manos portaba el mismo nunchaku que la otra vez utilizó en su pequeña batalla amistosa.

No lo podía creer, o más bien no lo quería creer. «No le puedo pegar a una mujer, mucho menos si es ella.» Pensaba. Se levantó del suelo e intentó dialogar con su nueva oponente.

—Pucca, no hace falta que hagas esto, ¡T-Te prometo darte cualquier cosa, en serio!

—No me tienes que dar nada. — Contestó ella. —Lo que quiera me lo consigo yo sola, y lo que quiero es TU DERROTA.

✘ Rσנσ Ʋιησтιηтσ ✘ (SIN EDITAR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora