Iba Garu caminando a su casa tras la visita a Abyo en el hospital, «Primero, Tobe aparece para llevarse a Pucca el día de mi cumpleaños, ahora, Abyo no despierta... ¿Qué sigue? ¿Ching y su pollito Gwon se convierten en zombis? ¿Dada con pelo largo? ¿Santa vuelve a ser linterna roja?», cosas así iba pensando durante el camino.
Pero, de manera inesperada, logró escuchar pasos acercándose rápidamente, eran muchos; giró su cabeza en dirección a este sonido y notó que no eran nadie más ni nadie menos que los cocineros más honorables de Sooga.
Efectivamente, Ho, Dumpling y Linguini fueron apresuradamente hacia el ninja que ahí estaba, pues tenían que decirle lo que el maestro Soo les había comentado.
—¡Garu, tenemos que decirte algo!— Gritó uno de ellos.
Llegando hasta a él, se tomaron un descanso breve, respirando de forma acelerada.
Están viejos, ¿Qué esperabas?
En fin, cuando iban a empezar a decirle la noticia, este los calló. —Disculpen, pero con mucho respeto, debo decirles que en este momento no estoy apto para oír nada, pero si quieren, pueden pasar a mi casa para hablar con más tranquilidad.
Los tres se vieron entre sí, y asintieron.
Una vez habiendo llegado, Garu abrió la puerta de su casa, para quedar impactado.
Todas las trampas que dentro de la casa de Garu estaban, habían sido activadas, pero no había nadie dentro de ellas, como resultado un desastre aún peor que antes.
Mio colgaba de una de ellas, pero a propósito.
Garu pensó lo peor, para verificar si sus sospechas eran ciertas, entró rápidamente a su almacén de armas. Confirmó sus sospechas: le habían robado. —No puede ser... ¡NO PUEDE SER!— Enojado, pisó el suelo con fuerza. —¡Esto es simplemente genial! Simplemente genial... ¡Anda a comer tierra, Tobe!
—Chico, es mejor que vengas, te sientes y te relajes, ya que la noticia que te tenemos no es del todo agradable.
(...)
—Bien Garu, no te vayas a alterar...
—Dígame, señor Ho.
—Fuimos a la morada del maestro Soo, y nos dijo que le habían atacado.
—Adivino, ¿Tobe?
—No fue él solo... Quien dejó mal a Soo fue... Pucca.
—¡Lo sabía!— Exclama Garu. —¡Pucca se ha vuelto malvada! —Y su siguiente reacción, fue llevarse las manos a la cabeza y jalonearse el pelo, reflejando su estrés.
—Mira, Garu, sabemos que es difícil para ti, también lo es para nosotros, pero lo que ahora importa es encontrarla. — Comenta Dumpling a modo de consuelo, poniendo la mano en la espalda del muchacho.
—No sucumbas a la locura, Garu, mantente en pie y sigue adelante como el ninja que eres. — Le dice Linguini.
—¡Lo intento! ¡Pero no es fácil siempre mantener el papel del ninja frío y solitario! — Garu, frustrado, se levanta del sillón para darle la cara a los cocineros. —He intentado todo lo que he podido, ¡Y me cuesta! Me cuesta ser "perfecto", yo sólo quiero que ella vuelva... Que vuelva a abrazarme y besarme sin avisar, como antes...
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✘ Rσנσ Ʋιησтιηтσ ✘ (SIN EDITAR)
FanfictionNOTA: Esta historia ha sido publicada nuevamente, es decir, la había escrito entre el 2021 y el 2022. Es posible que debido a ello encuentres cosas que no están bien o correctas, ya que tengo pendiente reescribir algunos capítulos, cosa que no sé si...