No me jodas.
—Ostia, ¿en serio? —se quejó Ian, hundiéndose un poco en la silla de la cocina, donde estábamos todos sentados, menos Corina.
—Si, en serio. —Ella tiró de su camiseta para que se incorporara otra vez. —Sus padres creen que ya han estado mucho tiempo aquí y necesitan seguir estudiando como si fuesen a la escuela.
Resoplé mirando la pila de libros sobre la mesa. Aun quedaban algunas migas de las tostadas de desayuno y desearía volver a unos minutos atrás, no tenía ganas de abrir ninguno de esos textos de estudios. Aunque no era una mala idea, estaba segura de que mi madre había apoyado esta idea, pero sinceramente no estaba segura de que tan fácil iba ser estudiar aqui. Con toda la locura del asesino entre nosotros.
—¿Y tú serás su profesora? —Sonrió Heros pero ella lo miró mal.
—Si, basta de preguntas. Todos tendrán tareas y ejercicios para hacer, tendrán exámenes cada mes de distintos temas y los aprobaré según vea el proceso. —Le dio un vistazo a un anotador y volvió a hablar. —Ámbar, Tomi, Nita y Seth compartirán los mismos temas, los cuales deberían estar estudiando en sus respectivas escuelas. Zaira, Ian y Zarek tendrán los temas de ultimo año.
—Esto va a ser muy divertido —agregó Heros, levantándose de la silla y yendo a la cocina donde tomó un vaso—. Esfuércense y quizá vaya a su graduación —se rio cuando Ian le arrojó un lápiz a la cara.
—Tu no te salvas por haber terminado la escuela —le dijo Corina y él borró su sonrisa—. Tu madre quiere que apliques a alguna universidad así que usa esto para aprender que debes poner en tu carta de solicitud. —Le tendió un libro y lo tomó de mala gana mientras nosotros no reíamos.
—¿Y qué pongo? ¿Pasar dos años con posibles..
—Heros —interrumpió Zarek con una mirada de advertencia, sabiendo que iba a decir "asesinos".
—Ni siquiera se cuando podré salir de aquí, ¿de que me sirve que me acepten? —Cambió de tema rápidamente, pero todos nos dimos cuenta de lo nervioso que se puso. Todos excepto Corina.
—No empieces y haz lo que tu madre te pidió. —Ella se volvió a nosotros para seguir hablando.
El fastidiado, se volvió a sentar con nosotros y abrió su libro.
Tres horas más tarde de ubicación de ríos y montañas en el mapa, encontrar la equis en varios ejercicios y un análisis de un texto, ya estaba por fin recostada sobre el sofa. Aunque la televisión seguía emitiendo películas aburridas, al menos disfrutaba no tener que estar haciendo ejercicios de matemática.
Ian, que ya había terminado sus ejercicios y caminaba hacia las escaleras, me hizo un ademan disimulado para que lo siguiera. Fruncí el ceño y lo miré extrañada. Volteé a ver la cocina. Todos seguían allí, menos Zarek que lo había visto subir las escaleras. Me levanté con cuidado y lo seguí escaleras arriba. Entró en su habitación y aunque me dio algo de pánico volver a entrar en el lugar donde Heros dormía, lo ignoré y entré con él.
La habitación olía a calcetines sucios y sudor bastante fuerte. Arrugué la nariz con asco mientras el cerraba la puerta detrás de mi.
—Como que podrían echar un perfume o algo, ¿no? —bromeé riéndome pero el solo revoleó los ojos.
—Si, si, demándame. Escucha, encontré esto en el baño de arriba —explicó buscando algo dentro de una mochila azul— y creo que nos puede servir para saber quien asesinó a Adeline.
Se acercó a mi, abrió la palma y pude ver un pen-drive en su mano. Por primera vez, sentí nervios otra vez luego de esa charla sobre Adeline. Supe que quizá si había pistas que nos indicaran quien había sido el culpable, pero no podía alegrarme solo por una memoria USB.
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Zarek
Teen FictionNita Fields lleva la vida de una niña normal. Todo cambia radicalmente cuando su mejor amigo Zarek Black, obligado por su madre, lo arrastra fuera del país alejándolo de ella. Años más tarde, ambos se reencontrarán en circunstancias un poco precipit...