Capítulo 33

1.2K 92 3
                                    

-Al parecer el impacto fue del lado de la chica. -Continuó hablando esa voz de hombre por el radio. -Él está consciente.

-¿Y ella? ¿Cómo está ella? -Pregunté desesperada esta vez.

-Sigue viva.

No pues que gran noticia, el idiota está consciente y Camila sigue viva. Jodida mierda.

-Manden a la ambulancia ya. -Habló esta vez el oficial que estaba conmigo haciendo una seña.

-Yo voy con ellos. -Dije rápidamente.

-Señorita, usted tiene que atenderse a sí misma. -La mujer que me estaba revisando intervino.

-¿Si escuchó? ¡ELLOS ACABAN DE CHOCAR! -Alcé la voz y ella simplemente me miró asustada. -Iré con ellos. -Repetí nuevamente y me subí a la ambulancia.

En menos de cinco minutos ya estaba en el lugar, mi rostro fue de completo horror al ver el estado de Camila, estaban luchando por sacarla de ahí, al parecer el otro auto había impactado directamente contra ella, su frente tenía sangre y algunas heridas en su rostro, sus ojos estaban cerrados y no podía creer que la castaña estuviese así, ni siquiera sabía como reaccionar, estaba en completo shock.

-TE VOY A MATAR. -Grité viendo al idiota de Ashton simplemente limpiando algunas de sus heridas en el rostro. Quise correr y golpearlo, pero uno de los policías me sostuvo.

-No se preocupe, señorita, este chico no saldrá con vida de la cárcel. -Me aseguró y yo me tranquilicé un poco.

-Te vas a pudrir encerrado, maldito demente y espero que también te pudras en el infierno. -Escupí con rabia viendo como él al parecer seguía impactado de ver a Camila así.

-Tranquila, creo que su amiga la necesita más. -Una mujer dijo cuando lograron sacar a la castaña del auto.

-Aquí estoy contigo, Camz. No voy a dejarte sola. -Dije cuando estábamos dentro de la ambulancia, acaricié su mano y la observé un momento.

Cuanto había hecho sufrir a la castaña, todo esto pasó por mi culpa, la había engañado y por estar conmigo el lunático de su exnovio había intentado llevársela, con esto, estaba segura de que Camila jamás me perdonaría. ¿Quién puede perdonar tanto? En ese momento entendí todo, ella volvió a arriesgar su vida por mí, ella de verdad me amaba, lo hacía de una manera que yo ni siquiera podía imaginar.

¿Cómo había sido tan ciega? Esta chica que probablemente estaba al borde de la muerte había hecho de todo por mí, y yo le había agradecido haciéndole más daño de lo que otra persona pudiera llegar a hacerle. Me arrepentí de todo, absolutamente de todo lo que había hecho. Pero esperaba que no fuera demasiado tarde para hacerle saber a Camila que yo también la amaba, pedirle que no se fuera y que se quedara conmigo para enmendar todos mis errores e intentar hacerla la chica más feliz del mundo.

Salí de mis pensamientos cuando llegamos al hospital, de inmediato entramos al lugar y todo lo que escuchaba eran voces diciendo palabras que no entendía, empecé a sentirme mareada, los oídos se me taparon y la vista se me puso borrosa, después todo se volvió negro.

***

Desperté recostada sobre una cama, Clara estaba conmigo tomando mi mano y me miró con un semblante preocupado cuando vio que estaba abriendo los ojos.

-¿Qué pasó? ¿Dónde está Camila? -Me removí en la cama intentando levantarme pero la mujer me detuvo.

-Te desmayaste, cariño. No habías comido nada y dicen que también pudo ser porque tenías muchas cosas acumuladas. -Acarició mi mano.

Confident (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora