"El destino puede equivocarse"
Esa era la frase que vagaba en mi mente desde pequeño, nadie puede decirte lo que esta bien o mal y aún peor con quien debes estar.
Mucho menos atarte a alguien que odias y el a ti, así es, no siempre las cosas salen...
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¿Nunca se han preguntado, cual es nuestro verdadero lugar en el mundo? Esa es una de las preguntas que rondan en mi cabeza con frecuencia, quizás suene extraño, pero no puedes culpar a alguien que crece en una sociedad como la mía ,donde es demasiado difícil ser quien eres realmente sin antes ser juzgado.
Y bueno, antes de que me acribillen diciéndome que esto es fácil, que solamente queda ignorar, déjenme decirles que suena más técnico de lo que parece, mi vida sería incluso aún más "tranquila" si fuera un Beta, desgraciadamente nadie escoge lo que quiere ser, todos nacemos de cierta manera, no sabemos que somos hasta cierto tiempo y eso nos marca de por vida sin siquiera opinar ante lo que nos rodea.
No digo que odié ser Omega, creo que de hecho de cierta forma me agrada, aunque lo que si me tiene harto es que aún a estas fechas sigan pensando que no somos capaces de asumir los mismos cargos que las otras jerarquías ,o peor aún que no nos den siquiera una oportunidad, hemos tenido que fingir, colarnos o en el peor de los casos rendirnos, pues las probabilidades de conseguir un empleo con buena paga son escasas, la gente te discrimina apenas sabe que eres y eso me parece la cosa más estúpida del mundo.
Agradezco en serio haber nacido en una familia que a pesar de ser de puros Alfas, como mis padres y mis dos hermanos, tienen la mente abierta, siempre haciéndome ver igual a los demás, aunque como todo, en algún momento de tu vida te encuentras a este tipo de "neandertales" en mi caso uno de ellos fue mi primer amor en la escuela, nada serio al final del día, creo que por eso y por otras cuestiones, me consideró bastante fuerte de mente.
No soy igual a los demás Omegas tampoco, según mis hermanos soy un hueso duro de roer, pero pese a ello siguen siendo muy sobre protectores conmigo desde que era pequeño, después de todo soy el menor de los tres, aunque he destacado más rápido en la familia, mi determinación desde aquellas malas experiencias ha sido, demostrarle al mundo que un Omega puede hacer cualquier trabajo y ser un buen líder, porque yo no pensaba en un simple trabajo, no señor.
Mi primer trabajo fue de reportero centrandome en las noticias sobre el mundo, realmente amaba ese trabajo, todo lo que tenía que ver con la carrera de Comunicación era lo mío en lo absolutoabsoluto, pero no a todos mis compañeros les gustaba lo lejos que llegaba, ponía cada grano de mi ser, tanto que no me molestaba doblar turnos, así que rápidamente iba subiendo de puesto y con lo mismo llenando de experiencia mi currículum, aunque claro no era lo único que subía, nunca pararon esos rumores que decían que "me acostaba con todos para subir de puesto" Lo cual era falso, ni siquiera había tenido una pareja en mi vida, con esos rumores comenzaron a aparecer mis acosadores, siempre pidiendo un "buen faje" Para dejarme en paz, después de 2 años soportando todo esto en silencio por miedo a perder el empleo de mis sueños, un día simplemente puse un alto.
Mi enojo era visible, ese día descargue todo con mi jefe, quien aunque trato de evitar mi renuncia no lo logró, aunque de cierta manera me paso un contacto de una empresa dedicada al escándalo, la editorial Undernews, gracias a mi buena recomendacion pude conseguir una entrevista rápido, corrí con bastante suerte esta vez ya que mi jefe, era el alfa de en sueños como esos de las novelas~.
Su nombre era Asgore, un alfa noble y carismático, que sin dudarlo me dio una oportunidad en el trabajo, además de que me apoyo para tener un buen puesto gracias a mi experiencia, todo parecía sacado de una de esas novelas que ve mi hermano Error.
O quizás.... Hable demasiado pronto
Nunca les dijeron de niños que sabrían cuando su vida cambiaría? Pues algo así sentí yo cuando fue mi primer día de trabajo, todo iba perfecto, mi jefe me iba dando un tour por el edificio, hasta que llegamos al lugar donde me tocaria estar, al llegar estaban todos esperando para saludar y mientras iba presentandome ante todos, un chico de cabello negro se me quedo mirando y por un momento todo se detuvo, sus ojos color ámbar oscuro me miraban de una manera tan curiosa como si me examinara, yo solo se que hasta el habla se me quito, mi corazón latía muy rápido, estaba perdido en mirada y ese aroma tan curioso a menta ,nunca antes había sentido algo parecido y era por eso mismo que me costaba comprender que estaba pasando o eso fue hasta que....
Odio la canela
Escupió con una mirada asqueada aquel chico ,aquel momento tan extraño había sido cortado, tal y como si te hubieran dado un golpe en el estómago, parpadee varias veces, bastante confundido, hasta que en solo unos segundos entendí algo.
(Este sujeto es un idiota)
Pense con bastante enojo, pues lo que al principio era un aroma agradable, se volvió algo que me hizo cabrear, poniéndome fiero por primera vez en el trabajo, respondiendo ante aquello.
—A mi tampoco me agradas.
Yo solté sin más alejandome de aquel lugar, rogandole a todos los dioses no encontrarmelo de nuevo o de ser posible no volver a tener contacto con el, lo que no sabia es que era el inicio de mi infierno.
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Muy buenas a todos wapisimos UvU este es el bello inicio de esta historia, espero les guste y comenten su parte favorita <3
Pd. Ese vídeo de la multimedia ayuda mucho, ya que la letra me sirvió para escribir este capítulo, evidentemente tiene mucho que ver con la historia, así que en algún momento verán un guiño a la misma
Trataré de actualizar dos veces por semana, aunque realmente por la escuela lo más probable es que sea una vez, aun así siempre os avisare.
