El linaje Black persistirá con la llegada de Ephraim Black, el pequeño hijo de Jacob Black. Un auténtico varón quien ha llegado para salvar el linaje Black y quien lleva el mismo nombre que el antiguo jefe de la tribu, en su honor. Él es su legado...
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El sonido irritante del teléfono de la sala de estar la saco arrebatadamente de su profundo sueño. Miro el techo de la casa, temerosa de que todo lo que había acontecido la noche anterior se tratará de un simple sueño. Volteó incrédula a su costado y se encontró al de tez morena dormido plácidamente a su lado, los brazos de él se aferraban a ella con fuerza. Zeze odio tener que levantarse de esa cárcel humana, pero no tenia otra alternativa que levantarse a descolgar ese teléfono o terminaría despertando a Jacob. Hecho un vistazo al reloj de su mesa de noche y marcaban las 5:15 am, rodo los ojos molesta. Cuidadosamente se levanto de la cama y camino sigilosamente hasta la sala, contesto el teléfono mientras se acomodaba la camiseta de Jake que traía puesta.
—Hola
Contesto somnolienta entre bostezo.
—¿Puedo hablar con Jacob? —musito una voz angelical, fácil de reconocer.
Zendaya tardo en comprender de quien se trataba. Apretó los ojos un par de segundos antes de responder.
—Duerme.
—¿Paso la noche contigo? —cuestiono, tajante.
La humana permaneció en silencio, intentando pensar en que responderle.
—Le diré que te llame cuando despierte, Renesmee.
La híbrida permaneció en sepulcral silencio.
—¿Cómo estás? —cuestiono poco amigable.
—Pues lamento decirte que no me mataste —se burló amargamente.
—Escucha... No me disculparé por eso.
La azabache soltó un bufido.
—De igual forma, no hubiese aceptado tus disculpas.
—Te lo merecías...
—Y tú merecías que Sam te volará la cabeza.
—No te agradeceré haberme salvado la vida, ni lo pienses.
—No lo hice por ti, lo hice solamente por Jake, tristemente tú venias en el combo y eso fue realmente una lástima, yo hubiese preferido ver todos los miembros de tu cuerpo regados por todo el bosque. Hubiese sido el mejor día de mi vida.
Al otro lado del teléfono se escuchó su respiración agitarse.
—Tú y yo sabemos cómo terminará esto, Jackson.
La humana empezó a reírse forzadamente.
—Que teatral eres...
—Es muy bajo de tu parte usar este pretexto para llevártelo a la cama
