52

1.3K 181 62
                                    

–¿Qué tiene?

–no ha querido comer en todo el día y se la ha pasado acostado y...

–¿y qué?

Jin abría sus ojos muy asustado por el tono misterioso de Nam.

–y esta aferrado a una de sus camisas.

El susto en los ojos de Jin son remplazados por un brillo que ilumina su rostro pues ahora además sonríe.

–¿tú crees que este...?

–es muy posible mi señor.

–dioses, llevamos tantos años juntos y sigues llamándome así.

–lo siento mi señor, es la costumbre.

Jin ingresa al cuarto y ve a Tae acurrucado aferrado a su camisa. Pero parece percibirlo porque rápidamente gira a verlo, hace puchero como niño necesitado y estira sus brazos.

–Jinnie, por fin llegaste.

–mi amor ¿estás bien?

–si, solo te extrañaba mucho.

–me dice Nam que no has comido nada en todo el día. ¿Estas enfermo?

–no lo sé Jinnie. Todo esto me recuerda cuando Taemin crecía en mi interior.

Los ojos de Jin se volvían a iluminar.

–¿crees que estés embarazadito?

–es muy probable.

–en ese caso llamare al doctor.

–no te vayas, quédate un momentico más conmigo.

–tranquilo, lo llamare desde aquí.

Luego de hablar y acordar una cita con el doctor, Jin se queda dándole mimos a Tae calmándolo con su olor masculino.

Al otro día, después de haber sido revisado por el doctor, se confirma que Tae tiene dos meses de embarazo. Todos se ponen felices pero especialmente Taemin, quien da saltos de alegría por toda la casa.

–un hemanito, un hemanito. Voy a tenen un hemanito mío.

–así es pequeño, ahora debemos cuidar mucho y mimar a Tae.

–shi, voy a dale muchos beshitos. Y tu tamen pueres dale muchos beshitos ponque me diste un hemanito.

–gracias mi pequeño, te amo mucho.

–yo tamen te amo mucho papi Jin.

Tae y Jin se miran y se sonríen contemplando como su hijo sale corriendo alegre por toda la casa.

A diferencia de su primer embarazo, este le está demandando más energía a Tae. Le ha llevado a desmayarse en varias ocasiones preocupando a todos en casa. Jin es el más preocupado y se ha obligado a estar en casa más tiempo para hacerlo comer así sea a la fuerza.

Nam y la nana de Taemin se sonríen al ver a Tae haciendo pucheros con los brazos cruzados como niño regañado cada día en horas de la comida, ya que Jin tiene que llamarle la atención reiteradamente para que coma porque de otra manera no lo haría.

El embarazo cada vez se vuelve más tortuoso, las náuseas, el vómito y los mareos son constantes. Jin está meditando si cancelar su año rural donde está haciendo sus prácticas médicas. Las jornadas son extensas y ha podido atender a Tae gracias a la colaboración de Yoongi.

Cuando al quinto mes van a control y finalmente el bebé se deja ver, pueden darse cuenta que Tae espera una niña. Lo que derrite y llena de felicidad a ambos padres.

DULCE INOCENCIA JINTAE ~ OMEGAVERSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora