Alzó los brazos sobre su cabeza cuando el dardo que había lanzado dio justo en el blanco. Una sonrisa se extendió en los labios de Urchin antes de mirar a Ariel con satisfacción mientras la muchacha le devolvía una expresión contraría a la suya.
– Eso ha sido suerte.
– Tres veces seguidas – Flounder asintió con una mueca de mala gana – Hemos perdido contra ellos.
– Son tres contra dos, no es justo – Ariel se cruzó de brazos mirando hacia sus amigos.
– Por supuesto que es justo – Urchin sonrió mientras sacudía el peluche que había ganado en el juego de lanzar dardos – porque ustedes dos siempre están de racha, además...
– Solo está inventando excusas – Flounder murmuró mientras se daba la vuelta.
– Tienes toda la razón – La muchacha comenzó a caminar lejos junto con su amigo – ¡Eh! Vamos a la montaña rusa...
– ¿A la... montaña rusa...? – El chico palideció – Pero es muy rápida y peligrosa y pasa por el mar. Qué tal si las vías se rompen y los carritos se caen al agua. En la profundidad, podríamos toparnos con un tiburón y...
– Deja de ser tan llorón – La muchacha dijo con una sonrisa mientras corría hacia una enorme fila que se encontraba en un lado. La muchacha sonrió ampliamente mientras miraba a sus amigos con una sonrisa en los labios, de las cuales al menos tres personas estaban asustadas.
– Cobardes – Urchin dijo mirando hacia sus amigos – Dios santo, mira esa fila. Tardaremos horas en subirnos.
La muchacha de cabello castaño hizo unos gestos con las manos antes de retroceder con una sonrisa nerviosa. A su lado, un chico de delgado de cabellos negros y ojos marrones asintió firmemente mientras la seguía nervioso.
– Gabriella tiene razón, no deberíamos perder el tiempo aquí cuando podemos salir a divertirnos a otros lugares.
– Pero es la montaña acuática – Gimió Ariel – Es la única montaña rusa de este mundo que tiene recorrido en el mar.
– Y – Urchin alzó la voz enfatizando – no estaremos aquí mucho tiempo.
– Creo que realmente tienes que ir al oculista, Urchin – Flounder lo miro con calma – Lo he pensado desde que comenzó el ensayo de la obra y ahora simplemente creo que es cierto que tienes algo mal en los ojos. Mira esa fila, el letrero pone dos horas de espera.
– Flounder, Flounder, Flounder, mi querido amigo Flounder – El rubio lo tomó de los hombros antes de mirar hacia sus amigos con una sonrisa maliciosa – Creo que todos ustedes están olvidando algo
– ¿El qué? – Preguntó el muchacho de cabellos negros.
– Que tenemos a una persona importante en el grupo – El chico soltó al rubio y señaló a Ariel – Es en este momento cuando usas tu influencia de princesa y haces que nos subamos ahora.
La pelirroja se rió sacudiendo la cabeza – Eso no va a suceder. Prometí que no me metería en problemas.
– ¿Cómo esto puede meterte en problemas? – El chico de cabellos negros preguntó.
– No estoy seguro de cómo, pero siempre que tenemos una idea... todo termina en problemas – Flounder dijo mientras Ariel coincidía asintiendo con la cabeza.
Gabriella volvió a mover las manos y Flounder asintió en coincidencia. En realidad los problemas los buscaban y no era como si ellos los recibían con los brazos abiertos y una gran sonrisa en los labios. La chica volvió a mover las manos mientras sacaba unos palitos del bolsillo, todos del mismo tamaño. Ella rompió uno y luego sujeto los palitos mirando a sus amigos.
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Melodía del Corazón
FanfictionElla y la música tenían una conexión especial, nadie la amaba más que ella en el mundo. Pero cuando un accidente busca convertirse en tragedia, Ariel sentirá que la música que tanto ama se le escapa entre las manos por un agujero negro. Para recuper...