The Clan // ShowHo

십이

Esto se pondría interesante...

- ¡Baja el arma! ¡Primera advertencia! - el oficial que se encontraba al frente de las patrullas gritó acercándose un par de pasos. Detrás de él, nadie se movió. Al menos diez policías seguían apuntándole.

HoSeok dejó el arma en el piso sin siquiera dudarlo, alzando las manos y poniéndolas detrás de la cabeza. Caminaba lentamente frente de la barrera escuchando los gritos de ambos lados. La mitad querían matarlo, la otra mitad protegerlo. Caminaba entre una delgada línea en el borde de un precipicio, un paso y estaría a salvo, un paso y caería al vacío. Río mientras se acercaba al oficial.

- ¡Ya está en el suelo! - su voz dio paso a un repentino silencio. Le miró a los ojos, desafiándole. - Baje el arma, primera advertencia.

Las mismas palabras del oficial salieron teñidas de sarcasmo de su boca. El hombre seguía inmóvil con el arma en alto, viéndole acercarse. HoSeok bajó sus manos y las extendió hacia el frente, mostrando sus palmas desnudas, vulnerable. Sus pies seguían avanzando, al igual que sus nervios comenzaban a subir por su garganta. Nadie se movía, nadie bajaba la guardia. Un disparo y pasaría al otro lado. A punto de bajar la cabeza, un movimiento llamó su atención. El oficial volteó y, con solo una mirada, todas las armas cayeron, al igual que la suya. La adrenalina inundó su cuerpo.

- Ahora si podemos hablar - HoSeok habló con calma, relamiéndose los labios sin desviar la mirada en ningún momento de sus ojos. - ¿Qué mierda quieren?

- Ya sabes por qué vinimos, no te hagas el idiota. - los ojos vagaron por el lugar, clavándose en una patrulla en particular. - Queda detenido por trafico de órganos.

No pudo evitar reír a carcajadas al escucharle. - Me chupa un huevo lo que tú me digas y todos los soldaditos que hay detrás suyo. - su sangre hirvió al ver su rostro nuevamente. - ¿Cuánto te pagó esa basura?

- No he recibido nada de nadie, solo cumplo mi trabajo. - el policía se hacía el desentendido. Dominado por la rabia, HoSeok quiso correr hasta la patrulla, pero una mano contra su pecho le hizo detenerse. Sus dientes rechinaban en su boca, la sed de muerte crecía en su interior.

-¿Así que no has recibido nada? Que te jodan. - ignorando las amenazas, avanzó otro paso y gritó hacia las patrullas. - ¿¡Te piensas que no te iba a ver, imbécil!? ¡Sal y da la cara! ¿O acaso tienes miedo de reencontrarte con tu hermano bajo tierra?

Una puerta se abrió y el estruendo al cerrase resonó entre los dejados edificios. Sus miradas volvieron a cruzarse, HoSeok quería saltar sobre él cuanto antes, mas se contuvo. Observó pacientemente como se acercaba. El golpe de las muletas contra el suelo le irritó, pero nada era comparado al odio que sentía dentro al tenerle justo en frente.

- Dímelo en la cara. - la voz del hombre sonó estrangulada, su mandíbula fuertemente apretada.

- La próxima vez me encargaré de encontrarte solo... - miró al policía y luego al hombre. - y vas la vas a cobrar muy caro Park, muy caro.

- Ve oficial, no solo trafican órganos sino que me ha amenazado...

- ¡Maricón de mierda!

Con un golpe en el ojo, HoSeok dejó a Park en el piso. De pronto, la imagen del rostro de Shownu cubierto de sangre apareció en su cabeza, haciendo que terminara de explotar. Cegado por la rabia, se abalanzó sobre el hombre, golpeándole a muerte. No pararía hasta que tuviera su cuerpo sin vida bajo sus pies, necesitaba venganza. Sin embargo, con una patada en el pecho, el policía lo quitó de encima, apuntándole directamente a la cabeza.